La fiscal¨ªa avala al director de la c¨¢rcel de Tarragona por repartir jeringas a presos

La fiscal¨ªa de Tarragona ha archivado la denuncia presentada por los sindicatos contra el director de la c¨¢rcel de esa ciudad, Santiago Mart¨ªnez Cadarso, y en un decreto dictado ayer avala su decisi¨®n de poner en marcha un programa de intercambio de jeringas entre drogodependientes para evitar la transmisi¨®n del sida. El director de la c¨¢rcel actu¨® "lisa y llanamente dentro del estricto marco del funcionamiento de la Administraci¨®n penitenciaria", asegura el fiscal jefe de Tarragona, Jos¨¦ Mar¨ªa Parra.

En este sentido, el decreto destaca que el fiscal realiz¨® un "esfuerzo" para combinar la protecci¨®n "de los intereses en juego, tanto de los internos como de los funcionarios de prisiones". En otro apartado del decreto se asegura: "Tan fundamental ha sido la consideraci¨®n humanitaria del programa implantado, que ha llevado a reuniones con los representantes sindicales buscando acuerdos aceptables para las partes afectadas por encima de disposiciones ordenancistas".

Mart¨ªnez Cadarso dict¨® una orden el pasado 20 de mayo regulando el programa de intercambio de jeringas despu¨¦s de que los Servicios Penitenciarios de la Generalitat autorizasen la experiencia, pionera en Catalu?a. La respuesta de los sindicatos ante ese programa piloto fue denunciar al director de la c¨¢rcel ante la fiscal¨ªa al considerar que hab¨ªa cometido un delito de prevaricaci¨®n, un delito contra los trabajadores y otro de favorecimiento del consumo ilegal de drogas. La respuesta de la Generalitat al conocer la denuncia fue paralizar la iniciativa, aunque insisti¨® en que las jeringas se seguir¨ªan facilitando a los presos a trav¨¦s del m¨¦dico de la prisi¨®n.

Ahora la fiscal¨ªa ha sido contundente al afirmar que la actuaci¨®n del director no merece ning¨²n reproche porque ese plan piloto no es m¨¢s que la aplicaci¨®n de una proposici¨®n no de ley que aprob¨® por unanimidad el Parlament en febrero de 2003. Diez a?os antes, recuerda la fiscal¨ªa, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud y el Consejo de Europa ya recomendaron la posibilidad de repartir jeringas para evitar la transmisi¨®n del virus del sida, y en 1997 el Defensor del Pueblo tambi¨¦n inst¨® a la Administraci¨®n penitenciaria a implantar estos programas.

No hubo delito

El decreto de archivo recuerda, para m¨¢s contundencia, que el fiscal jefe de Catalu?a, Jos¨¦ Mar¨ªa Mena, realiz¨® una consulta al fiscal general del Estado, Jes¨²s Cardenal, el pasado mes de febrero sobre las "dudas" que hab¨ªa originado el reparto de jeringas. La respuesta fue que esa actuaci¨®n no ten¨ªa ninguna trascendencia penal. La m¨¢xima autoridad de la fiscal¨ªa sostiene que el reparto de jeringas a potenciales presos drogadictos "son conductas que entran dentro del programa doctrinal de acciones socialmente adecuadas (...) para preservar la vida y la salud de los enfermos, extramuros y al margen del fin de protecci¨®n de la salud de los enfermos".

En definitiva, concluye el decreto de archivo de la fiscal¨ªa, la actuaci¨®n del director de la c¨¢rcel se sit¨²a "justo en los ant¨ªpodas" de lo que le atribuyen los sindicatos porque "no se apart¨® de los principios con que debe servir su funci¨®n, eficacia, jerarqu¨ªa y coordinaci¨®n que son propios de la Administraci¨®n penitenciaria a la que sirve y que garantizan la imparcialidad en el desempe?o del cargo".