Pol¨ªtica con sano descaro

En un tiempo en que la prensa est¨¢ tan constre?ida por la autocensura, por el temor a irritar a personajes poderosos o por transgredir lo pol¨ªticamente correcto, el desparpajo con el que Amalia S¨¢nchez Sanpedro aborda sus memorias period¨ªsticas es muy de agradecer. Corresponsal pol¨ªtica durante tres d¨¦cadas de Colpisa, Televisi¨®n Espa?ola y Canal Sur, Amalia S¨¢nchez Sanpedro arranca al lector de Pendientes de la noticia numerosas carcajadas por la frescura y sinceridad con la que evoca personajes y momentos decisivos de la reciente historia espa?ola e internacional.

As¨ª Hillary Clinton es presentada como "peque?a, gorda, fofa, con piernas elefanti¨¢sicas y una sonrisa forzada en su cara redonda como una hogaza de pan". La ex primera dama ofrece ese aspecto en un encuentro de los Clinton con Felipe Gonz¨¢lez y Carmen Romero en la Casa Blanca, en diciembre de 1993. Pero Gonz¨¢lez, por el que Amalia S¨¢nchez Sanpedro no oculta su admiraci¨®n, luce as¨ª ese d¨ªa: "Mal afeitado, mustio, esbozando una media sonrisa de timidez". En otro momento, la periodista extreme?a no duda en calificar el acto de la firma de los acuerdos de Oslo en la Casa Blanca, en septiembre de 1995, de "un tost¨®n, con discursos llenos de lugares comunes". Un acto en el que Suha Arafat comparece con "una blusa de lunares, rubia te?ida, despelujada a pesar del lazo de pelo falso, una especie de chabacana Barbra Streisand".

Amalia S¨¢nchez Sanpedro, que tambi¨¦n se ha hecho popular por los fant¨¢sticos pendientes que luce ante las c¨¢maras, no oculta sus filias y sus fobias. Sus dardos m¨¢s afilados van dirigidos contra los gobernantes del PP. Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar le parece un personaje acomplejado, rencoroso, torpe en sus supuestas bromas, incapaz de espontaneidad. "S¨®lo habla cuando lo disponen sus asesores informativos, convenientemente preparado, acicalado y delante de un atril". Y por supuesto, con alzas en los zapatos. En cuanto a P¨ªo Cabanillas, "superaba la petulancia de sus antecesores, que por lo menos eran bastante listos". En su congreso de septiembre de 1999, los barones del PP aparecen en la sesi¨®n del s¨¢bado "con el uniforme pijo-fin de semana: pantalones de canutillo de pana, camisa de cuadros y pulligan de pico dejado caer sobre los hombros". Descripciones tan verdaderas como irreverentes y un mont¨®n de an¨¦cdotas de la trastienda pol¨ªtica hacen muy divertida la lectura de Pendientes de la noticia.