Berlusconi abre una crisis con Alemania al llamar nazi a un eurodiputado del SPD
El primer ministro italiano empa?a el estreno de la presidencia de la UE en Estrasburgo
Silvio Berlusconi no ha podido empezar m¨¢s desafortunadamente la presidencia semestral italiana de la UE, al poner ayer en pie de guerra al Parlamento Europeo, sobre todo a los socialistas que le acusan de haber ofendido gravemente a un diputado alem¨¢n con una broma nazi de mal gusto. "Sus palabras han sido insultantes y son un ataque contra los valores de la democracia europea y las v¨ªctimas del nazismo. Ha abierto una crisis con el Parlamento y exigimos una disculpa", declar¨® el jefe del grupo, el espa?ol Enrique Bar¨®n.
La sangre fr¨ªa le dur¨® algo m¨¢s de media hora al primer ministro italiano, el tiempo de presentaci¨®n de su programa, que recibi¨® en general buenas cr¨ªticas por su compromiso en trabajar para la conclusi¨®n de la futura Constituci¨®n Europea y fortalecer el papel de la UE en el mundo, dando al mismo tiempo mayor impulso a las relaciones con Estados Unidos.
Il Cavaliere perdi¨® literalmente el control cuando en la r¨¦plica respondi¨® al vicejefe socialista, el alem¨¢n Martin Schulz, que antes hab¨ªa cuestionado el europe¨ªsmo de ministros de su Gobierno como Umberto Bossi por sus insultos a los inmigrantes, le ped¨ªa acelerar la orden de b¨²squeda y captura, y la creaci¨®n de una fiscal¨ªa europea, pero sobre todo hab¨ªa puesto el dedo en la llaga sobre el conflicto de intereses econ¨®micos de Berlusconi y su inmunidad cuando era eurodiputado.
"Estoy de acuerdo con el eurodiputado Antonio di Pietro cuando habla de usted como una anomal¨ªa italiana, como un virus de conflicto de intereses y el peligro de que se extienda como un c¨¢ncer en Europa", irrumpi¨® Schulz. El juez de Mani Pulite hab¨ªa confesado, poco antes sentirse "avergonzado y humillado, de que el presidente de la UE fuera Berlusconi".
"Usted est¨¢ aqu¨ª gracias a que Nicole Fontaine [ex presidenta del Parlamento Europeo] no gestion¨® la petici¨®n de levantar su inmunidad" solicitada por el juez Baltasar Garz¨®n en el caso Tele 5, prosigui¨® el socialista alem¨¢n. Sua Emittenza aguant¨® estoico la andanada, pero cuando le lleg¨® la r¨¦plica le contest¨® jocoso de un tir¨®n: "Conozco en Italia un productor que est¨¢ haciendo una pel¨ªcula sobre los campos de concentraci¨®n nazis. Le voy a sugerir que le contrate porque estar¨ªa perfecto en el papel de capo", los prisioneros colaboracionistas que hac¨ªan de polic¨ªa para los nazis y que se distingu¨ªan por su crueldad.
Las manifestaciones encolerizaron a Schulz y a Bar¨®n. ?ste solicit¨® al presidente de la Euroc¨¢mara, el irland¨¦s Pat Cox, que le exigiera una disculpa p¨²blica. Cox estuvo esquivo, si bien luego dijo que en las actas no se recoger¨ªa el intercambio de palabras entre Berlusconi y Schulz, algo que los propios socialistas estimaron insuficiente. "Vamos a pedir en la reuni¨®n de grupos parlamentarios, ma?ana, una disculpa p¨²blica y, si no, que el tema se aborde en el consejo extraordinario de octubre" de apertura de la Conferencia Intergubernamental, dijo Bar¨®n.
M¨¢s tarde, en conferencia de prensa junto con el l¨ªder italiano y el presidente de la Comisi¨®n, Romano Prodi, Cox admiti¨® que Berlusconi hab¨ªa ofendido a un colega e hizo un ruego para moderar por parte de todos el tono de los debates. "No era mi intenci¨®n ofenderle. ?l lo ha hecho con mi persona y con mi pa¨ªs. Mis palabras fueron una iron¨ªa, sobre todo por su forma de gesticular, porque en ese papel ser¨ªa perfecto. Se lo dir¨¦ al casting".
Cerca de ¨¦l, su archirrival pol¨ªtico, Prodi, silencioso, ensombrec¨ªa cada vez m¨¢s la mirada y endurec¨ªa el rostro, sobre todo cuando Berlusconi reiteraba una vez m¨¢s sus cr¨ªticas contra parte de la magistratura y la prensa de su pa¨ªs ("el 85% es de izquierdas"). El presidente de la Comisi¨®n, muy tenso, no quiso hablar a la salida, aunque farfull¨®: "Es un d¨ªa triste para Italia. Habr¨¢n visto que yo no me he re¨ªdo ni una sola vez".
De la boca de Il Cavaliere salieron ayer una incontenible cascada de t¨®picos y de despectivos comentarios que da?an cuanto menos su imagen. A los eurodiputados que le critican les recomend¨® visitar m¨¢s Italia, tener paciencia -"s¨®lo estar¨¦ seis meses" como presidente de la Uni¨®n-, les tild¨® de "turistas de la democracia" por desconocer lo que ocurre en su pa¨ªs; y a quienes le apoyan les anim¨® a sentirse confiados, "porque mi vida ha estado marcada por el ¨¦xito". Neg¨® que no sea independiente la informaci¨®n que sale de sus canales de televisi¨®n. Y acus¨® luego en una reuni¨®n del Grupo Popular a EL PA?S, The Independent y Le Monde de formar parte de un circuito de prensa de izquierdas con una estrategia concreta para da?ar su imagen.
Ante sus correligionarios del Partido Popular Europeo afirm¨® que tal vez hab¨ªa podido haber herido la sensibilidad hist¨®rica de Alemania con su chiste y que estaba dispuesto a pedir disculpas al pueblo alem¨¢n, pero nada dijo de hacerlo con Schulz. El jefe del grupo, Hans-Gert P?ttering, alem¨¢n, le transmiti¨® a su compatriota su disgusto por las palabras de Il Cavaliere. Tambi¨¦n el l¨ªder popular espa?ol, Gerardo Galeote, las calificaba de "inadecuadas", si bien describ¨ªa como "inaceptable y ofensiva" la intervenci¨®n de Schulz. "Si se calienta en un simple debate, ?qu¨¦ suceder¨¢ cuando tenga que afrontar como presidente de la UE una crisis grave?", coment¨® Bar¨®n, subrayando que "nadie pretende el fracaso de la presidenta italiana".
Por no faltar, en rueda de prensa Il Cavaliere, muy sonriente, acompa?ado de su vicepresidente, Giancarlo Fini, y su ministro de Exteriores, Franco Frattini, recurri¨® a los cl¨¢sicos con una imprudente alusi¨®n a Erasmo de Rotterdam y a su ensayo sobre el elogio de la locura: "No quiero decir que est¨¦ loco, pero me siento innovador y visionario e intentar¨¦ transmitir mis ideas durante mi presidencia europea".
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