"Mi madre me tir¨® con tres a?os a la piscina y ya ve, aqu¨ª estoy"

Guillermo Molina (Ceuta, 1984) es el menor de la selecci¨®n de waterpolo y el jugador espa?ol m¨¢s joven de la historia en ganar un t¨ªtulo del mundo (Fukuoka, 2001). Este corpulento ceut¨ª de casi dos metros de estatura, rubio y de ojos azules es un marciano en un colectivo integrado por jugadores de las dos principales escuelas espa?olas: la catalana y la madrile?a. Cuenta que est¨¢ "para aprender", pero el lunes, en la victoria de Espa?a ante Brasil (10-3), en el debut en los Mundiales, fue el m¨¢ximo realizador, con tres goles.

Pregunta. ?Qu¨¦ hace un ceut¨ª en el waterpolo?

Respuesta. Estoy en este deporte por tradici¨®n familiar. Mi abuelo, Manuel, era el gerente del Club Nataci¨®n Caballos, en Ceuta, y jugaba al waterpolo por pura afici¨®n. Mi t¨ªo Miguel ?ngel tambi¨¦n lo practicaba. Ninguno de ellos destac¨®. Mi madre me tir¨® a la piscina a los tres a?os y aprend¨ª a nadar. Luego me dieron un bal¨®n. Y ya ve, aqu¨ª estoy, disputando mis segundos Mundiales.

P. ?Pero hay tradici¨®n waterpol¨ªstica en Ceuta?

R. No. Hay un par de clubes afcionados. Si se quiere competir hay que cruzar el estrecho.

P. La cuna del waterpolo espa?ol est¨¢ en Catalu?a y en Madrid. ?C¨®mo accedi¨® a entrar en la ¨¦lite?

R. Con 14 a?os, me entrenabafuerte para salir de Ceuta. En invierno no se tocaba el agua. Se hac¨ªa carreras a pie y pesas. Quer¨ªa jugar en una piscina cubierta y cuando se me ofreci¨® la oportunidad de acudir a una concentraci¨®n de j¨®venes en M¨¢laga, no lo dud¨¦ y me largu¨¦. Luego, vino otra en Madrid y de ah¨ª, Antonio Aparicio, el segundo entrenador de la selecci¨®n, me llev¨®, con 15 a?os, al Club Nataci¨®n Barcelona.

P. De Ceuta a Barcelona y luego a Italia fichado por Manel Estiarte para jugar en el Pescara.

R. Mi paso por Italia fue ef¨ªmero, un a?o. Me fu¨ª, despu¨¦s del Mundial de Fukuoka, con mi compa?ero de selecci¨®n Gabi Hern¨¢ndez. Sufr¨ª mucho como jugador, aunque madur¨¦ como persona.

P. ?Qu¨¦ pas¨®?

R. Hubo dificultades extradeportivas. La federaci¨®n italiana no nos dejaron jugar como comunitarios a m¨ª y a Gabi. Jugu¨¦ 12 partidos cuando en Espa?a se juega 40 en un a?o. Me perd¨ª los tres primeros meses por la burocracia de las autoridades italianas. Lo pas¨¦ fatal. Estaba solo y con 17 a?os. Suerte tuve de una novia italiana, Laura, que me ayud¨® a pasar el mal trago.

P. Como ceut¨ª, ?c¨®mo vive el tema de la emigraci¨®n?

R. La vivo de manera importante. La gente de la pen¨ªnsula nos tacha a los espa?oles de Ceuta de racistas. Y no es verdad. Si se vive ah¨ª, junto a la frontera con Marruecos, uno se da cuenta de que Ceuta es una ciudad muy conflictiva. Conviven cuatro religiones, la cat¨®lica, la hind¨², la hebrea y la ¨¢rabe. De ¨¦stas, s¨®lo hay conflicto entre la cat¨®lica y la ¨¢rabe, que tiene cada vez m¨¢s poder. Ceuta es Espa?a y los de la pen¨ªnsula nos tienen dejados un poco de lado.

P. ?Cu¨¢l fue el ¨²ltimo regalo que recibi¨®?

R. Una camiseta del Real Madrid, mi equipo, con mi nombre grabado. Tambi¨¦n la recibieron mis compa?eros de selecci¨®n y madridistas, Roll¨¢n, Dani Moro, S¨¢nchez Toril y el cubano, Iv¨¢n P¨¦rez.