Las empresas de EE UU se reparten los grandes contratos otorgados por Washington
La Casa Blanca controla dos de los tres fondos destinados a ayudas econ¨®micas para Bagdad
Las empresas de Estados Unidos tienen de partida una posici¨®n privilegiada para obtener las contratas de reconstrucci¨®n de Irak, al menos las que se repartan los dos fondos controlados por Washington, que son los proyectos de mayor envergadura. Uno de los fondos se financia con las ventas de petr¨®leo iraqu¨ª, que podr¨ªan ascender a 15.000 millones de d¨®lares en el pr¨®ximo a?o, y otro con los cerca de 20.000 millones presupuestados por el Tesoro de EE UU. El tercer fondo, de car¨¢cter multilateral, saldr¨¢ de las aportaciones de la Conferencia de Donantes que hoy comienza en Madrid.
"La idea de la Conferencia de Madrid apunta a hacer la situaci¨®n confortable para los donantes, pero no creo que cambie mucho la din¨¢mica. Para llegar a Bagdad hay que pasar por Washington", dijo ayer EL PA?S Bart Fisher, cofundador del EE UU-Irak Business Council y socio de uno de los bufetes de lobby de Washington, Dorsey & Whitney, que representa a varias empresas que aspiran o ya han conseguido contratos.
EE UU ya ha otorgado los proyectos del primer tramo de reconstrucci¨®n, pero "quedan miles de millones de d¨®lares por repartir porque va a ser un proceso de tres o cuatro a?os, asumiendo que todo vaya bien", se?ala Timothy Mills, ex funcionario del Pent¨¢gono y socio del bufete Patton Boggs, que igualmente representa a decenas de empresas americanas en los concursos de licitaci¨®n de obras en Irak. S¨®lo para las redes de tendido el¨¦ctrico, agua potable y alcantarillado hay presupuestados m¨¢s de 10.000 millones de d¨®lares.
Mills y otras fuentes consultadas critican la falta de mecanismos de trasparencia y control, as¨ª como la "innecesaria velocidad" con la que se sacan los concursos que, en un gran n¨²mero de casos, dan s¨®lo de tres a siete d¨ªas a las empresas para que presenten sus proyectos. Tales condiciones han convertido el proceso de reconstrucci¨®n en un laberinto en el que nadie sabe c¨®mo se otorgan las contratas, ni cu¨¢ntas hay, ni qui¨¦n las supervisa. "Quienes se benefician son las empresas con conexiones o las que tiene informaci¨®n [sobre los requisitos de las licitaciones]", subraya Mills.
Las contratas concedidas hasta el momento confirman la teor¨ªa de Mills. La pr¨¢ctica totalidad de los proyectos, de cerca de 4.000 millones de d¨®lares, han sido para compa?¨ªas estadounidenses conectadas, aunque tambi¨¦n es cierto que la mayor¨ªa de las subcontratas se las han entregado a empresas iraqu¨ªes. Halliburton, la corporaci¨®n que dirig¨ªa el vicepresidente, Dick Cheney, hasta asumir el cargo, ya ha cobrado m¨¢s de 1.400 millones de d¨®lares por obras de reconstrucci¨®n de infraestructura petrolera y est¨¢ en primera fila para el reparto de otros m¨¢s de 1.100 millones para la segunda fase, junto con otras dos americanas, Parsons y Fluor. La reconstrucci¨®n de infraestructura no petrolera la realiza la constructora Bechtel por 680 millones de d¨®lares iniciales (Bechtel, a su vez, ha dado 140 subcontratos, 102 de ellos a empresas iraqu¨ªes que emplean a 40.000 iraqu¨ªes).
BearingPoint, una firma de inform¨¢tica y servicios de consultor¨ªa, se encarga de reformar la econom¨ªa de Irak por 80 millones de d¨®lares. BearingPoint ha subcontratado a su vez parte de las labores con otras empresas americanas, entre ellas Chemonics International Inc., J. E. Austin Associates y Services Group.
Participaci¨®n de La Caixa
La reconstrucci¨®n de las telecomunicaciones se la reparten Lucent, Raytheon y Northrop Grumman. Y la gesti¨®n del Banco de Comercio de Irak se la ha llevado un consorcio internacional encabezado por JP Morgan Chase, del que forma parte La Caixa de Barcelona.
En el rompezabezas de concesiones, la Agencia de EE UU para el Desarrollo Internacional (USAID) -que es, junto con el Pent¨¢gono, quien ha resuelto los concursos- ha decidido contratar hasta la propia supervisi¨®n de las contratas. USAID paga, por ejemplo, 10 millones de d¨®lares al Cuerpo de Ingenieros del Ej¨¦rcito para que supervise la megacontrata de Bechtel. Tambi¨¦n ha contratado a Management Sciencies Inc. para que eval¨²e el progreso de las obras de desarrollo social y econ¨®mico.
USAID aduce que no tiene suficientes funcionarios para resolver los concursos. En Bagdad s¨®lo tiene cuatro. Su gesti¨®n ha frustrado al mismo administrador estadounidense en Irak, el diplom¨¢tico Paul Bremer, que acaba de crear su propio equipo de resoluci¨®n de contratas, encabezado por el antiguo almirante David Nash.
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