Osakidetza prev¨¦ alcanzar este a?o el nivel de actividad m¨¢s alto de su historia

El incesante crecimiento de la demanda de servicios sanitarios en los ¨²ltimos a?os ha conllevado un aumento en la actividad de los hospitales y de los centros de atenci¨®n primaria de Osakidetza. Los hospitales cada vez registran m¨¢s ingresos, atienden mayor n¨²mero de urgencias y realizan m¨¢s operaciones. Las previsiones para este a?o, cuando se cumple el vig¨¦simo aniversario de la puesta en marcha de Osakidetza, son que los hospitales del Servicio Vasco de Salud registren 216.000 ingresos, atiendan cerca de 900.000 urgencias y practiquen 166.500 operaciones, unas cifras nunca antes alcanzadas.

Las cifras de actividad de los hospitales reflejan con nitidez el incremento de la demanda de servicios sanitarios, pero si se echa un vistazo m¨¢s atr¨¢s y se compara con los niveles de trabajo de los primeros a?os de la d¨¦cada de los 90 se puede comprobar que la demanda es imparable. Por ejemplo, frente a las 166.500 operaciones quir¨²rgicas que prev¨¦ realizar Osakidetza este a?o, en 1990 apenas se contabilizaron 70.000. Es a mediados de la pasada d¨¦cada cuando los niveles comenzaron a subir incesantemente.

Lo mismo se puede decir de otros par¨¢metros, como las consultas externas realizadas por los especialistas. Mientras que este a?o rondar¨¢n los 3,5 millones, en 1996 alcanzaron los 2,2 millones y apenas rond¨® el mill¨®n en 1990.

Y es que seg¨²n los c¨¢lculos realizados por el Departamento de Sanidad, cada ciudadano vasco acude 4,3 veces al a?o a consultas de atenci¨®n primaria y 1,5 veces a consultas con los especialistas. Mientras, 42 de cada 100 ciudadanos pasan por los servicios de urgencias de los hospitales. Una cifra muy alta, que en algunas ocasiones puede causar el colapso del servicio.

Con una plantilla estructural de 22.404 profesionales, Osakidetza se ha convertido en la primera empresa de Euskadi por n¨²mero de trabajadores y por presupuesto. La financiaci¨®n de todas sus actividades consumi¨® el a?o pasado pasado una tercera parte del presupuesto total del Gobierno vasco, es decir, 2.040 millones de euros. El desembolso econ¨®mico es enorme, pero seg¨²n indica el consejero de Sanidad, Gabriel Incl¨¢n, al mismo tiempo es "contenido" y ofrece "evidentes resultados". Entre estos resultados se puede mencionar la satisfacci¨®n que muestran los ciudadanos vascos con el servicio y que queda reflejada en las peri¨®dicas encuestas que el Ejecutivo realiza a la poblaci¨®n.

En una comunidad tan convulsa y dividida como Euskadi, que alguien o algo logre concitar adhesiones y simpat¨ªas por parte de la mayor¨ªa de la poblaci¨®n resulta muy complicado. Osakidetza es probablemente la ¨²nica instituci¨®n vasca que cuenta con un respaldo casi total de la ciudadan¨ªa, que se siente mayoritariamente satisfecha con la atenci¨®n que se le brinda y con su nivel de prestaciones.

Cuando se cumplen veinte a?os de su nacimiento, Osakidetza y su progenitor, el Departamento de Sanidad, desarrollan adem¨¢s su labor sin casi apenas oposici¨®n pol¨ªtica. Es de las pocas instituciones que ha conseguido salvarse del enfrentamiento partidista.

En su momento, Osakidetza se configur¨® como un organismo aut¨®nomo para dar atenci¨®n sanitaria completa a toda la ciudadan¨ªa, financiado con presupuestos p¨²blicos y con vocaci¨®n de integrar en su seno a todos los dispositivos y servicios relacionados con la salud. Con el paso del tiempo, ese objetivo se ha mantenido inamovible, aunque el Gobierno ha introducido algunas modificaciones para adaptarlo a los nuevos tiempos.

Seg¨²n Incl¨¢n, este tipo de modificaciones no han hecho sino afianzar la apuesta del Gobierno vasco por disponer de "un sistema sanitario p¨²blico, no excluyente, s¨®lido, efectivo, eficiente, ¨¢gil y de calidad", como principales se?as de identidad.

Uno de los mayores cambios se produjo en junio de 1993, cuando el Parlamento aprob¨® el plan m¨¢s ambicioso del Departamento de Sanidad: Osasuna Zainduz-Cuidando la Salud. Se trat¨® de una reforma sanitaria global dise?ada para acabar con las graves disfuncionalidades aprciadas. Se implantaron sistemas de gesti¨®n procedentes de la empresa privada, mediante la conversi¨®n de los hospitales en sociedades p¨²blicas de derecho privado con plena autonom¨ªa.

Y en 1997 vio la luz la Ley de Ordenaci¨®n Sanitaria, que redujo las competencias de Osakidetza para atribu¨ªrselas al Departamento de Sanidad. Mientras Osakidetza qued¨® encargada de la coordinaci¨®n y control de la red de centros sanitarios, el departamento, adem¨¢s de definir la pol¨ªtica sanitaria y aportar el presupuesto, pas¨® a encargarse tambi¨¦n de dirigir su ejecuci¨®n a trav¨¦s de las direcciones enclavadas en los tres territorios.