Un grupo de rumanos fingen ser polic¨ªas y asaltan a compatriotas
La banda act¨²a en las estaciones de M¨¦ndez ?lvaro y de Chamart¨ªn
Un juez de Madrid investiga a una banda formada por unos 15 rumanos que, haci¨¦ndose pasar por polic¨ªas espa?oles, se dedican a robar y desvalijar a sus compatriotas reci¨¦n llegados a Espa?a. La banda act¨²a b¨¢sicamente en la estaci¨®n Sur de autobuses y en la de Renfe de Chamart¨ªn, seg¨²n afirman fuentes jur¨ªdicas. En los ¨²ltimos meses, esta banda ha atracado mediante enga?os a una veintena de compatriotas, aunque otros muchos, creyendo que sus asaltantes eran en realidad funcionarios policiales espa?oles, regresaron a sus pa¨ªses sin interponer una denuncia.
Se trata de un grupo de rumanos perfectamente organizado y jerarquizado, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n. Una organizaci¨®n en la que cada uno de sus miembros desempe?a una misi¨®n concreta y enlazada. Los miembros de la banda han llegado a emplear la violencia si la v¨ªctima se resiste a entregarles sus pertenencias o no consiguen su objetivo: desvalijar al compatriota reci¨¦n llegado y, en algunos casos, tambi¨¦n sustraerle la documentaci¨®n.
Los miembros de la banda se aprovechan de que sus compatriotas reci¨¦n llegados ignoran el idioma espa?ol y la forma de actuar de las fuerzas de seguridad para dejar a sus v¨ªctima en una situaci¨®n "de total desesperaci¨®n: sin el poco dinero que traen para subsistir mientras encuentran un trabajo en Madrid y sin documentaci¨®n".
Violencia f¨ªsica
La declaraci¨®n de un testigo protegido ha permitido a la polic¨ªa identificar a una parte de los miembros de esta banda, seg¨²n los citados medios jur¨ªdicos. El testigo ha aseguradoque sus integrantes "son muy violentos".
Algunos de los miembros de esta banda han sido detenidos en varias ocasiones por hechos similares, seg¨²n este testigo, que ha facilitado a los agentes, como supuestos integrantes de la organizaci¨®n, los nombres de B. E. (presunto cerebro y cabecilla de este entramado delictivo), C. M., P. I. y S. Z.
El testigo, que tambi¨¦n es ciudadano rumano, se present¨® el mes pasado en la Brigada Provincial de Extranjer¨ªa y Documentaci¨®n y pidi¨® a los agentes que se le otorgase la condici¨®n de testigo protegido porque, seg¨²n explic¨®, "tem¨ªa por su vida". Este hombre lleg¨® recientemente a Espa?a, donde ya estuvo en 1999 durante casi un a?o. Relat¨® a los agentes que directamente y a trav¨¦s de compatriotas suyos sab¨ªa de la existencia de una banda de inmigrantes rumanos afincados en Madrid que se hacen pasar por funcionarios de la Brigada Provincial de Extranjer¨ªa para robar todo el dinero que traen a Espa?a sus compatriotas reci¨¦n llegados.
Seg¨²n este testigo, son muchas las v¨ªctimas de esta banda, aunque no todas han denunciado lo ocurrido. Y no lo han hecho porque ignoran si quienes se hacen pasar antes ellos por polic¨ªas y les piden el dinero y la documentaci¨®n que llevan encima "son polic¨ªas reales o no". Una vez desvalijados, y sin medios para subsistir, muchas v¨ªctimas han logrado reunir el dinero del billete de regreso a Rumania.
La banda capta a sus v¨ªctimas en las estaciones, en las que saben que llegan autobuses o trenes procedentes de Rumania. Cuando localizan a una posible v¨ªctima, distra¨ªda y como esperando algo o a alguien, justo despu¨¦s de bajarse ¨¦sta del autob¨²s o el tren que le ha tra¨ªdo a Madrid, uno de ellos se le acerca y le pregunta "a qui¨¦n o qu¨¦ espera". Si la v¨ªctima le dice que, por ejemplo, a un familiar, inmediatamente el delincuente aparenta alegr¨ªa y pone en escena su rol y le dice que ese familiar es muy amigo suyo, y se ofrece a acompa?arle en metro hasta la casa de ese familiar. Las salidas del metro las hacen habitualmente en las mismas estaciones. Las m¨¢s utilizadas por esta banda son las estaciones de Conde de Casal, Sainz de Baranda y plaza de Espa?a.
A la salida del metro esperan al gancho y su v¨ªctima otros dos o tres miembros de la banda. Previamente, el gancho ha telefoneado a ¨¦stos para decirles desde que estaci¨®n saldr¨¢ y c¨®mo es el aspecto de la v¨ªctima. Al salir de las boca del metro, los compinches abordan a la v¨ªctima, le muestran falsos carn¨¦s de polic¨ªa y le imponen con vehemencia que se identifique.
Carn¨¦s falsos
Los miembros de la banda que, seg¨²n el testigo, suelen hacer este cometido son Alexandru C. y Bordean M., quienes suelen ir provistos de falsos y variados carn¨¦s. "Les piden la documentaci¨®n y todo el dinero y les dicen que deben regresar a Rumania por donde han venido porque no tienen permiso para estar en Espa?a", se?alan fuentes de la investigaci¨®n. "Es muy fuerte lo que hacen con personas que son de su propio pa¨ªs, que acaban de pisar Espa?a, que desconocen el idioma y que nada m¨¢s apearse del autob¨²s tras un lago viaje se ven de pronto desvalijadas", a?aden.
Aparte de estos falsos policias, otros miembros de la banda se sit¨²an en las inmediaciones para avisar a sus compa?eros en el caso de que se acerquen al lugar polic¨ªas reales espa?oles. Cometida la fechor¨ªa, los miembros de la banda se re¨²nen en un bar que hay en los aleda?os de la avenida de la Albufera y se reparten el bot¨ªn. La polic¨ªa les pisa los talones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.