Detenida la mujer del ex director financiero de Parmalat por retirar fondos de cuentas secretas
La polic¨ªa registra la sede de Citigroup en Mil¨¢n para verificar su relaci¨®n con la empresa
Fausto Tonna, el ex director financiero que organiz¨® el gigantesco fraude contable de Parmalat, guardaba todav¨ªa un as en la manga. Su esposa, Donatella Alinovi, fue detenida ayer por retirar, la semana pasada, un mill¨®n de euros de una cuenta secreta de Parmalat que deposit¨® en dos cajas de seguridad a su nombre. La investigaci¨®n de los fiscales de Parma y Mil¨¢n sigui¨® centr¨¢ndose en los bancos que trabajaban con el grupo parlamentario italiano. La sede milanesa de Citigroup, la mayor entidad financiera de Estados Unidos, fue registrada por la polic¨ªa.
Donatella Alinovi siempre hab¨ªa asegurado no saber nada sobre la actividad laboral de su marido, Fausto Tonna, el irascible contable que, como director financiero y hombre de la m¨¢xima confianza del presidente y propietario, Calisto Tanzi, false¨® durante a?os las cuentas de Parmalat para encubrir las p¨¦rdidas y las apropiaciones indebidas. La esposa de Tonna, sin embargo, s¨ª sab¨ªa. Incluso ten¨ªa firma en varias de las cuentas secretas que, a trav¨¦s de sociedades con sede en Luxemburgo, hab¨ªan recibido fondos desviados il¨ªcitamente de Parmalat.
La semana pasada retir¨® casi un mill¨®n de euros de una de esas cuentas, en varios cheques de 50.000 euros cada uno que deposit¨® en dos cajas de seguridad a su nombre en una entidad bancaria de Parma. La polic¨ªa hab¨ªa descubierto ya la existencia de esas cuentas y las manten¨ªa bajo vigilancia. Fue el propio Tonna quien habl¨® por primera vez a los fiscales parmesanos de la red bancaria oculta en la que recib¨ªa bonificaciones extraordinarias, en dinero negro, por su manipulaci¨®n de los balances.
La polic¨ªa detuvo ayer a Donatella Alinovi, a la que el juez puso en arresto domiciliario bajo la acusaci¨®n de lavar dinero negro, y se incaut¨® de los dos cheques que conten¨ªan las cajas fuertes. Alinovi se convirti¨® en la d¨¦cima persona detenida por el esc¨¢ndalo de Parmalat, el mayor grupo alimentario italiano, en el que durante m¨¢s de una d¨¦cada se gener¨® un agujero de al menos 8.000 millones de euros. Cuando fue informado de la detenci¨®n de su esposa, Tonna, que declaraba en ese momento ante los fiscales, se neg¨® a seguir hablando y pidi¨® ser trasladado de nuevo a prisi¨®n.
Seg¨²n Calisto Tanzi, el fundador, due?o y presidente, los grandes bancos conoc¨ªan la situaci¨®n del grupo y, sin embargo, siguieron respaldando las emisiones de deuda y cobrando las preceptivas comisiones hasta que, a mediados de diciembre pasado, se lleg¨® a una situaci¨®n de insolvencia. Entre los bancos se?alados por Tanzi figuran los mayores de Estados Unidos (Citigroup, JP Morgan Chase y Bank of America) y de Italia (Capitalia, Intensa, San Paolo y Monte Paschi di Siena). La sede milanesa de uno de ellos, Citigroup, fue registrada ayer por la polic¨ªa, que buscaba documentos sobre la relaci¨®n entre la entidad y Parmalat.
Los abogados de Citigroup intentaron el martes retomar la iniciativa y presentaron una demanda contra Parmalat, afirmando que en 2003 la empresa les hab¨ªa encargado, con enga?os y bas¨¢ndose en datos falsos, la colocaci¨®n en el mercado de obligaciones por importe de 200 millones de euros.
M¨¢s control en Bolsa
El Gobierno de Silvio Berlusconi, que a finales de diciembre aprob¨® una ley espec¨ªfica para facilitar la suspensi¨®n de pagos de Parmalat y su tutela por parte del Ministerio de Actividades Productivas (Industria), se plantea estos d¨ªas un reforzamiento de la Consob, la comisi¨®n de control de la Bolsa, para dotarla de poderes similares a los de la Securities and Exchange Commision (SEC) estadounidense.
La reforma, sin embargo, tiene un trasfondo pol¨ªtico. El ministro de Finanzas, Giulio Tremonti, est¨¢ enfrentado al gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, nombrado por la anterior mayor¨ªa de centro-izquierda, y quiere aprovechar el caso Parmalat para forzar su retirada o, al menos, para reducir los poderes del banco central. La izquierda est¨¢ dispuesta a que se mejore la capacidad de la Consob y a que se haga lo posible por evitar nuevos fraudes, pero se niega a que esos cambios sean a costa de Fazio y del Banco de Italia.
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