Revancha literaria

Pilar Castillo Parra habla con una mezcla de amargura e indignaci¨®n cuando recuerda la historia que ha marcado su vida. En 1985, cuando ten¨ªa 33 a?os, los m¨¦dicos del hospital p¨²blico Virgen de las Nieves le diagnosticaron un c¨¢ncer sin cura. Los m¨¦dicos descubrieron al a?o siguiente que el diagn¨®stico era err¨®neo. Pilar nunca tuvo c¨¢ncer. Pero ella no lo supo hasta 1997, cuando se enter¨® por un amigo. Ahora ha editado un libro, Doce a?os en el corredor de la muerte, en el que relata su calvario. Dos productoras de cine se han interesado por su historia.

"Me robaron el futuro. Me acostaba con la muerte y me levantaba con la muerte", explica Pilar, nacida en Alcal¨¢ la Real y afincada en Granada desde 1971. En 1985 entr¨® en el hospital tras un d¨ªa de mucho trabajo. Le dol¨ªa un costado y le diagnosticaron un liposarcoma, un tipo de tumor muy agresivo que por entonces no ten¨ªa cura. Los m¨¦dicos -Pilar no quiere revelar sus nombres aunque en el hospital todo el mundo los conoce- le dijeron que le quedaban tres meses de vida y que tendr¨ªa una muerte penosa. Le dieron quimioterapia, pero como respondi¨® tan mal suspendieron el tratamiento.

Pese al diagn¨®stico, Pilar no empeoraba. Al a?o, los especialistas pensaron que estaba curada y un equipo del servicio de Anatom¨ªa Patol¨®gica llev¨® su caso a un congreso de medicina en EE UU. All¨ª, la pl¨¦yade de expertos concluy¨® que aquello no hab¨ªa sido nunca un liposarcoma, sino un angiomiolipoma, un tumor benigno. No hab¨ªa curaci¨®n milagrosa porque nunca hab¨ªa existido la grave enfermedad.

"Si en ese momento me hubieran dicho cu¨¢l era el diagn¨®stico, no hubiera pasado nada. Errar es humano. Pero volvieron del congreso y no me dijeron nada. Los m¨¦dicos no quer¨ªan perder su prestigio y mi vida no les importaba nada". Pilar fue operada cuatro veces para extirparle peque?os quistes. Estos s¨®lo se operan si hay antecedentes de c¨¢ncer.

En 1997, un amigo m¨¦dico le cont¨® que en el hospital corr¨ªa el rumor de que en realidad no ten¨ªa c¨¢ncer. "Ped¨ª un diagn¨®stico por escrito al Servicio Andaluz de Salud y casi me caigo cuando me reconocen que el diagn¨®stico era err¨®neo y que lo sab¨ªan", recuerda. "Los m¨¦dicos se rieron de m¨ª y menos mal que no revel¨¦ el nombre de quien los hab¨ªa delatado, porque se lo hubieran comido". En septiembre gan¨® el litigio contra el SAS.

Pilar recuerda que tras el juicio le coment¨® a su abogado que su historia "dar¨ªa para una novela". No olvid¨® aquella idea lanzada al aire y se puso a ello. "Cada noche, al cerrar la tienda de cocinas escrib¨ªa un rato. A l¨¢piz". No le cost¨® escribir las 136 p¨¢ginas del libro pese a no tener experiencia. "Las palabras sal¨ªan solas, ten¨ªa tanto que contar que no necesitaba darle muchas vueltas". All¨ª explica que antes del diagn¨®stico planeaba abrir m¨¢s tiendas de cocina y que paraliz¨® la idea. Que vivi¨® pendiente de cada tos, de cada estornudo pensando que pod¨ªa ser el principio del fin. Pilar escribe de forma concisa y precisa. Con frases cortas.

Tard¨® un mes en escribir el libro. Entonces decidi¨® editarlo ella misma. Se gast¨® 9.000 euros y edit¨® 1.500 ejemplares que se venden a 11,5 euros.. "Si hubiera ido a un editor, el libro no estar¨ªa todav¨ªa en las librer¨ªas". Su objetivo, m¨¢s all¨¢ de la catarsis, era "que la gente conozca el caso y c¨®mo actuaron los m¨¦dicos".