La polic¨ªa sospecha del Grupo Combatiente Marroqu¨ª
La organizaci¨®n tiene conexiones en Espa?a, Reino Unido, Dinamarca, Italia, Irlanda, B¨¦lgica y Turqu¨ªa
Los investigadores espa?oles sospechan que los autores de las masacres de Madrid y Casablanca estar¨ªan vinculados al Grupo Isl¨¢mico Combatiente Marroqu¨ª (GICM), cuya financiaci¨®n procede de Al Qaeda y de la colecta de fondos en Europa, seg¨²n informes de servicios antiterroristas de la UE. El grupo fue fundado, aunque con otro nombre, en 1993 en Peshawar (Pakist¨¢n) por veteranos de la guerra de Afganist¨¢n y algunos de sus integrantes han recibido cursos de explosivos en el campo de entrenamiento creado por la red de Osama Bin Laden cerca de Jalalabad. Uno de los detenidos hasta ahora por la masacre de Madrid, Jamal Zougam, tendr¨ªa relaciones con esta organizaci¨®n, seg¨²n fuentes antiterroristas. La investigaci¨®n sigue en todos los frentes.
Las pesquisas van avanzando en torno a ciudadanos marroqu¨ªes, de forma que la polic¨ªa cree tener identificados a seis nacionales de ese pa¨ªs (uno detenido y cinco huidos) como autores materiales de la masacre, sin descartar la participaci¨®n de personas de otras nacionalidades ni otras l¨ªneas de investigaci¨®n. La polic¨ªa ha ense?ado fotos de integristas isl¨¢micos a m¨¢s de un centenar de testigos, que han ofrecido alg¨²n reconocimiento coincidente con sus propias investigaciones.
Las indagaciones apuntan al grupo Al Jamaa Al Islamia Moujaida Fi Al Magrhib, nombre cuya traducci¨®n ser¨ªa Grupo Isl¨¢mico Combatiente Marroqu¨ª (GICM), al que supuestamente estar¨ªa vinculado Jamal Zougam. ?ste y su madre fueron investigados en 2003, a petici¨®n de las autoridades francesas, por el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, una indagaci¨®n que posteriormente se adjunt¨® a otra investigaci¨®n sobre el terrorismo isl¨¢mico llevada a cabo por el juez Baltasar Garz¨®n, seg¨²n informaron ayer fuentes judiciales. Zougan habr¨ªa tenido relaciones tambi¨¦n con el mul¨¢ Krekar en Noruega
El GICM fue fundado en 1993 con el nombre Al Harakat Al Islamia Al Maghiribia, pero cambi¨® de nombre. Los servicios de informaci¨®n europeos y de otros pa¨ªses informan de que tienen fuertes lazos con el Grupo Isl¨¢mico Armado (GIA) Argelino, inicialmente prest¨¢ndoles apoyo log¨ªstico. Sus integrantes rechazan cualquier gobierno que no se someta a la Sharia e interpretan de una forma extremadamente rigurosa el Cor¨¢n.
Uno de sus objetivos declarados es hacer retornar a Marruecos a miembros del grupo que hubieran recibido entrenamiento terrorista en Afganist¨¢n "para cometer atentados". Nueve miembros del grupo, todos de origen marroqu¨ª, fueron detenidos por las tropas de Estados Unidos en dicho pa¨ªs y se encuentran encarcelados en Guant¨¢namo, aunque tres de ellos (Tarek Dergoul, Abu Dar y Hamed Erachidi) han adquirido la nacionalidad brit¨¢nica y uno (Mosa Zemouri) est¨¢ naturalizado en B¨¦lgica.
Pero los que m¨¢s preocupan son los otros ocho supuestos miembros de la organizaci¨®n que se encuentran en paradero desconocido y est¨¢n en busca y captura por orden de varios pa¨ªses. Entre ellos supuestamente estar¨ªan algunos de los investigados por la matanza de Madrid. Las fuentes consultados han rechazado rotundamente facilitar las identidades de estas personas e indicar si hay coincidencias.
El GICM ha mantenido, seg¨²n los servicios de inteligencia, contactos con Al Qaeda, a fin de obtener apoyo log¨ªstico, fondos y entrenamiento. De hecho, la organizaci¨®n de Bin Laden y los Talib¨¢n los acogieron en sus campos de entrenamiento en las localidades afganas de Bagram, Kabul, Kandahar y Jalalabad. En esta ¨²ltima poblaci¨®n supuestamente recibieron instrucci¨®n para la fabricaci¨®n de explosivos en el campo de Abou Khabab Al Misri.
Los contactos se extienden por todo el mundo, desde Argelia (el GIA y su escisi¨®n, el Grupo Salafista para la Predicaci¨®n y el Combate) y su propio pa¨ªs (con Harakat Al Salafia Yihadia), pasando por Egipto (Yihad Isl¨¢mica Egipcia) y Turqu¨ªa (se han detectado contactos con tres personas). Pero tambi¨¦n las polic¨ªas europeas y de Marruecos han detectado contactos y enlaces de este grupo en Europa. En el Reino Unido residir¨ªa un miembro de esta organizaci¨®n, aunque nacionalizado brit¨¢nico, que habr¨ªa sido sometido a investigaci¨®n, como tambi¨¦n lo han sido un dan¨¦s-marroqu¨ª. Igualmente se han rastreado contactos en Italia (Abu Al Baraa), Irlanda y B¨¦lgica (dos personas). Espa?a, una tradicional "retaguardia" del islamismo radical (Mohamed Atta estuvo en Espa?a antes del 11-S), habr¨ªa albergado a numerosos miembros del grupo.
La investigaci¨®n de los cr¨ªmenes masivos avanza dato a dato y van surgiendo sorprendentes coincidencias, como la detenci¨®n de un argelino en San Sebasti¨¢n que en enero increp¨® a dos ertzainas dici¨¦ndoles que en dos meses iba a haber una matanza en Madrid. Se le investiga por si tuvo alguna participaci¨®n en los preparativos o escuch¨® algo en c¨ªrculos islamistas radicales. Como tambi¨¦n se investiga la supuesta participaci¨®n en el 11-M de un argelino, ya investigado en 2001, llamado Said Arel, e incluso si un coronel iraqu¨ª, Walid Salem Omar, nacido en Bagdad y entrenado en ex Yugoslavia (en fabricaci¨®n de aviones teledirigidos) tuvo algo que ver, aunque los investigadores creen que no. Igualmente, la Guardia Civil tom¨® declaraci¨®n ayer en Almer¨ªa a un magreb¨ª por el 11-M.
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