"La inmigraci¨®n ha sido vista por los dirigentes p¨²blicos de forma desenfocada"

Pregunta. ?Qu¨¦ es para usted la Delegaci¨®n del Gobierno?

Respuesta. Creo que no se ha sacado provecho del proceso de modificaci¨®n y de la manera en que debemos organizar la acci¨®n del gobierno a trav¨¦s de la Administraci¨®n General del Estado. Creo que es la asignatura pendiente. Tenemos delegados del Gobierno, pero centrados en la seguridad, pese a que su abanico competencial es mucho m¨¢s amplio. Hay un retraso enorme en la manera en que la Administraci¨®n p¨²blica responde a las demandas ciudadanas. Si supi¨¦ramos hacer bien esa reflexi¨®n, oyendo mucho al tejido ciudadano, seguramente tendr¨ªamos que revisar el marco del espacio p¨²blico, que tiene que estar presidido por la seguridad, que es la garant¨ªa de que el ejercicio de los derechos y las libertades se pueda llevar a cabo.

"El fen¨®meno de la prostituci¨®n debe estar bien regulado"

"La seguridad ciudadana es una demanda social que no ha sido satisfecha"

"En esta Comunidad ha fallado la interlocuci¨®n y muchas demandas no escuchadas"

P. O sea, que no se va a dedicar s¨®lo a la seguridad... Es decir, que no va a ser s¨®lo el jefe de la porra policial.

R. ?No, por Dios...! La seguridad es un problema grave que golpea a la sociedad, pero la vida de los ciudadanos se compone de muchas m¨¢s cosas a la que tenemos que dar respuesta. Por ejemplo, en la coordinaci¨®n entre las distintas instancias administrativas. Formalmente eso est¨¢ resuelto, pero en la pr¨¢ctica no hemos dado grandes pasos.

P. ?Entonces, no viene como un contrapeso a la presidenta regional Esperanza Aguirre ni al alcalde Alberto Ruiz-Gallard¨®n?

R. De ninguna manera. Todo lo contrario. Tiene que haber una coordinaci¨®n entre las tres instituciones para que no se conviertan en un laberinto para el ciudadano. Habr¨¢ problemas sencillos de resolver y otros en los que habr¨¢ que hablar mucho. Tenemos que ser capaces de gestionar las pol¨ªticas p¨²blicas. Unas veces ser¨¢n el transporte y otra la inmigraci¨®n, por poner dos ejemplos. Tengo la siguiente percepci¨®n: la sociedad ha ido m¨¢s deprisa que los poderes p¨²blicos y hay un retraso enorme en la forma en que ¨¦stos responden a las demandas ciudadanas.

P. Da la sensaci¨®n de que se convertir¨¢ en el ¨¢rbitro de la pol¨ªtica madrile?a...

R. No, m¨¢s bien pretendo ser una persona con alt¨ªsima receptividad a las demandas del ciudadano. Creo que en esta Comunidad ha fallado la interlocuci¨®n. Hay muchas demandas de la sociedad no escuchadas ni atendidas. Dedicar¨¦ mucho tiempo a las organizaciones y asociaciones para que me cuenten c¨®mo se sienten atendidas por los poderes p¨²blicos.

P. ?Tiene alg¨²n modelo de seguridad?

R. No, voy a ser profundamente prudente en este tema. Quiero escuchar a los profesionales, quiero compartir con la Comunidad y los municipios su reflexi¨®n sobre c¨®mo coordinar la acci¨®n de los cuerpos y fuerzas de seguridad y los recursos que tienen los ayuntamientos.

P. ?Cree que la seguridad es una demanda social no satisfecha?

R. Totalmente. Sin duda. ?sta es una ciudad profundamente dolida y castigada. No hay que lanzar s¨®lo un mensaje de la voluntad de producir paz y seguridad, sino tambi¨¦n dar respuestas concretas, muy espec¨ªficas. Hay muy diversos problemas que no tienen relaci¨®n entre ellos. No es lo mismo atender la demanda de seguridad de una ciudad como Madrid que la de otros espacios de la regi¨®n; no es lo mismo garantizar los ejercicios de las libertades que otros problemas como las mafias o el terrorismo.

P. Otros antecesores suyos han estado obsesionados con las manifestaciones callejeras. ?Piensa usted regularlas?

R. Es un derecho que debe ser garantizado y que debe tener reglas. Ha de ser posible llegar al entendimiento con una interlocuci¨®n m¨¢s cabal entre los que desean manifestarse y aquellos otros cuyos derechos no deben ser perturbados. Yo no tengo ninguna obsesi¨®n con las manifestaciones. M¨¢s bien dir¨ªa que me preocupa el libre ejercicio de todos los derechos, y no la restricci¨®n de ninguno de ellos.

P. ?Es partidario de modificar la Ley Org¨¢nica de Cuerpos y Fuerzas para que los polic¨ªas locales se incorporen a otras tareas que no sean s¨®lo el tr¨¢fico?

R. Me limito a lo que dice el programa del PSOE. Hay que incrementar los recursos personales y materiales que se han ido perdiendo estos ¨²ltimos a?os. Se ha producido un deterioro importante. Nos estamos jugando nuestra libertad, y la seguridad es un tema prioritario. Los recursos tienen que estar coordinados y cada uno de ellos especializado en un ¨¢mbito completo. Los cuerpos tienen funciones diferentes porque est¨¢n especializados en problemas diferentes. Dar homogeneizaci¨®n a esa acci¨®n ser¨ªa absurdo.

P. Entonces, ?la polic¨ªa local debe tener competencias de seguridad ciudadana?

R. Debe de coordinarse para que esa presencia de proximidad al ciudadano se lleve a cabo.

P. ?Es la inmigraci¨®n otro problema que tiene Madrid? ?O no existe como tal?

R. La inmigraci¨®n es un fen¨®meno que est¨¢ produciendo grandes ventajas de todo tipo, incluso econ¨®micas. Mal atendido se convierte en un grav¨ªsimo problema. La inmigraci¨®n ha estado siendo percibida de forma desenfocada. Este desenfoque de los dirigentes p¨²blicos ha llegado a los ciudadanos en forma de miedo y de incertidumbre ante lo nuevo y lo lejano. Por tanto, la inmigraci¨®n no es un problema de orden p¨²blico, aunque puede serlo. Debe ser atendida desde el punto de vista social, cultural, educativo y laboral. Cuando este fen¨®meno arrastre patolog¨ªas como mafias o redes delictivas, habr¨¢ de ser abordado desde el ¨¢mbito de la seguridad. Se han gestionado p¨¦simamente los servicios de atenci¨®n a los inmigrantes y su mejora es una de las asignaturas pendientes. Yo he sentido verg¨¹enza al pasar por delante de bochornosas colas de inmigrantes, cuando en este pa¨ªs ya las hab¨ªamos olvidado. Tenemos que mejorar la atenci¨®n e informaci¨®n al inmigrante.

P. Durante la etapa de gobierno del PP ha habido un intento de asimilar inmigraci¨®n y delincuencia. ?Cree que es correcto?

R. No. Creo que la delincuencia es algo focalizado y concreto. Siempre habr¨¢ gente dispuesta a utilizar los problemas de los m¨¢s d¨¦biles para obtener su lucro mafioso. Detr¨¢s de la inmigraci¨®n hay fen¨®menos gansteriles. Pero eso y su erradicaci¨®n es una cosa, y otra la llegada de personas que quieren aportar a nuestra sociedad su trabajo y mejorar su calidad de vida. A ¨¦stas las tenemos que acoger e integrar.

P. ?Tiene alg¨²n planteamiento sobre la prostituci¨®n callejera?

R. A priori, no. La regularizaci¨®n siempre es mejor que ninguna otra cosa. Cuando el fen¨®meno no tiene reglas, siempre aparecen actitudes delictivas. Hay que combatir todo el delito incorporado a la prostituci¨®n. Por tanto, mi opini¨®n es que debe estar bien regulada.

P. ?Poner tanta polic¨ªa en la calle de la Montera, como ha hecho Ruiz-Gallard¨®n, puede solucionar el asunto?

R. Hay que ser muy ingenuo para pensar que se resuelve nada por esa v¨ªa. Lo ¨²nico que se conseguir¨¢ es que lo que est¨¢ hoy como fen¨®meno en un sitio, aparecer¨¢ en otro. Pero el alcalde lo sabe igual que cualquiera de nosotros.

P. ?La delegaci¨®n tiene suficientes medios para atender todas las demandas sociales?

R. Lo sabr¨¦ cuando vea los recursos y las prioridades. Lo m¨¢s seguro es que tenga recursos suficientes. El problema es utilizarlos bien. Creo que la delegaci¨®n, al estar muy posicionada en los temas de seguridad y orden p¨²blico, desatiende las necesidades de otras ¨¢reas como la atenci¨®n de la inmigraci¨®n, por poner un ejemplo.

P. ?Habr¨ªa que replantearse la seguridad en las zonas rurales de la Comunidad?

R. Estoy reci¨¦n incorporado y no s¨¦ cu¨¢l ser¨¢ la forma de afrontarla. La regi¨®n ha cambiado en los ¨²ltimos a?os. Hay n¨²cleos que antes eran atendidos desde un punto de vista m¨¢s rural y que ahora se han convertido en el equivalente de muchas de las capitales de provincia. Y la respuesta en materia de seguridad sigue siendo la antigua. Ni hay recursos, y los que hay est¨¢n especializados en fen¨®menos de naturaleza urbana. No podemos atender un fen¨®meno urbano desde el punto de vista rural. En este mandato tenemos que dar una respuesta a estos n¨²cleos municipales.

P. Su antecesor en el cargo apost¨® por la seguridad privada...

R. A la derecha le parece que el espacio p¨²blico puede ser atendido por igual desde lo p¨²blico que desde lo privado. Su respuesta ser¨ªa que la inseguridad y el miedo requiere una complementariedad por parte de aquel que pueda financiar su seguridad desde el ¨¢mbito de lo privado. Nosotros creemos en la seguridad, que comporta elementos muy positivos de libertad, paz, solidaridad y de preservaci¨®n del espacio com¨²n. Y como queremos un espacio com¨²n muy grande, para que acoja las libertades, tiene que haber una respuesta desde los poderes p¨²blicos. ?Que no tenemos los recursos adecuados? Pues tendremos que tenerlos.

P. ?Ha apreciado alg¨²n cambio en Madrid tras los atentados del 11-M?

R. Madrid ha sido un extraordinario ejemplo, tanto por el extraordinario comportamiento de los responsables p¨²blicos como por la respuesta de los ciudadanos. Yo destacar¨ªa enorme solidaridad de la sociedad. Otra cosa es que no sepamos darle los cauces adecuados. Y ah¨ª hay un enorme problema de los poderes p¨²blicos. Frente al enorme castigo que supone ese tipo de terror, la respuesta de Madrid ha sido extraordinaria y ejemplarizante. Y hay algo m¨¢s: los ciudadanos no han renunciado en absoluto a seguir ocupando la calle. Somos un pa¨ªs muy luchador para que no nos acobarden ni nos echen de lo que es nuestro.

P. ?Comparecer¨¢ en la Asamblea de Madrid si es requerido?

R. He dicho que la interlocuci¨®n y la participaci¨®n es uno de los ejes de nuestro programa. Lo que ocurre es que las instituciones tienen un marco legal que a veces restringe lo que queremos hacer, porque lo impide. Sin entrar en la forma en la que eso sea posible, mi disponibilidad no es s¨®lo total y absoluta, sino que estar¨¦ encantado de informar en los t¨¦rminos en los que el marco me permita.