El S?o Paulo Madrid abre la v¨ªa
El club brasile?o de f¨²tbol, el primer extranjero que crea un filial espa?ol
La estrategia del Madrid y el Bar?a de expansi¨®n internacional de sus marcas en la b¨²squeda de nuevas fronteras comerciales ha ganado adeptos entre otros grandes clubes, lo que puede crear competidores for¨¢neos en uno de los principales mercados del f¨²tbol: Espa?a. Y el primer grande extranjero en atacarlo ser¨¢ el S?o Paulo, brasile?o. La diferencia est¨¢ en que no s¨®lo quiere difundir sus productos. Va m¨¢s all¨¢. Quiere competir con los clubes espa?oles. As¨ª, tramitar¨¢ la inscripci¨®n del S?o Paulo Madrid la pr¨®xima temporada en la Federaci¨®n Espa?ola. Ser¨¢ el primer filial de un club for¨¢neo en las competiciones oficiales espa?olas.
El presidente del S?o Paulo Madrid es el economista espa?ol Gerardo Aranda, que compagina el papel de entrenador del equipo con la direcci¨®n de una empresa inform¨¢tica. Explica que la estrategia es inscribir el equipo en la categor¨ªa regional madrile?a y ascender cada a?o: "Para entrar en el f¨²tbol espa?ol hay dos alternativas. Una es la de comprar las acciones de un club profesional, como pas¨® con el Legan¨¦s, un desastre. Otra, la del Ciudad de Murcia, ascender un equipo de barrio en seis a?os hasta la Segunda Divisi¨®n. Tambi¨¦n el Chievo Verona, en Italia, sali¨® de las catacumbas y est¨¢ en Primera".
El objetivo es ascender a un equipo de barrio, en seis a?os, hasta la Segunda Divisi¨®n
El S?o Paulo Madrid empez¨® en 2003 en un encuentro de negocios entre Aranda, entonces ejecutivo de una empresa de sistemas de seguridad, y los directivos del club Edson Lapola y Marcos de Almeida. Los dirigentes paulistas inspeccionaban los estadios espa?oles para mejorar la seguridad del Morumbi, con capacidad para 80.000 aficionados y patrimonio de su club. Aranda los invit¨® a presenciar un partido del Santangelo, un club de aficionados de su propiedad que juega la Liga de San Gabriel, la mejor competici¨®n privada amateur de Madrid. Para sorpresas de todos, los dirigentes del S?o Paulo llegaron con un regalo, un juego completo de uniformes. La empat¨ªa fue inmediata y Aranda dijo en broma: "Ahora somos el S?o Paulo Madrid".
El s¨ª de los espa?oles desencaden¨® los acontecimientos. El Santangelo cambi¨® su nombre por el de S?o Paulo Madrid; recibi¨® 4.300 euros para los peque?os gastos; edit¨® una web (www.saopaulomadrid.com); los jugadores contaron con el material deportivo paulista y ya tiene un patrocinador con 12.000 euros para federarse. El departamento de m¨¢rketing del S?o Paulo tambi¨¦n cre¨® un juego de uniformes exclusivos para el S?o Paulo Madrid con un escudo con la palabra Madrid sustituyendo las cuatro estrellas que simbolizan dos Copas Libertadores y dos Copas Interncontinentales en 1992 y 1993.
La historia del S?o Paulo esta escrita por futbolistas como Le¨®nidas, Gerson, Careca y Ra¨ª. Su etapa m¨¢s gloriosa fue el bicampeonato mundial. En 1992, bajo la batuta de Tel¨¦ Santana, dos goles de Ra¨ª desmontaron las ilusiones del Bar?a de Cruyff, Koeman Laudrup y Stoichkov. En 1993, un magistral Toninho Cerezo y un gol de tac¨®n de M¨¹ller le dieron la victoria ante el Milan de Capello.
"Seremos un club espa?ol con filosof¨ªa brasile?a", proclama Aranda, que descarta el desembarco de jugadores brasile?os porque la legislaci¨®n deportiva proh¨ªbe extranjeros en las divisiones inferiores. A su vez, Lapola sue?a que un d¨ªa la marca S?o Paulo sea tan conocida como la selecci¨®n brasile?a. Acaba de llegar a Brasil desde China, donde inaugur¨® el S?o Paulo Liaoning, otro filial en la Segunda de aquel pa¨ªs. Pero en este caso el club export¨® a 22 futbolistas, el entrenador y hasta el masajista y se traer¨¢ a 11 chinos para entrenar en sus instalaciones deportivas. "Pero eso no pasar¨¢ en Madrid porque no hay que ense?ar a los espa?oles a jugar", reconoce.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.