Un juez argentino procesa a Astiz por cr¨ªmenes durante la dictadura
La justicia argentina orden¨® ayer el procesamiento con prisi¨®n preventiva del ex marino Alfredo Astiz y otros tres represores por once casos de desaparecidos durante la dictadura militar argentina (1976-1983), entre ellos el secuestro y torturas a dos monjas francesas, seg¨²n informaron fuentes judiciales. La decisi¨®n fue adoptada por el juez federal Sergio Torres, quien dispuso el embargo de 12 millones de pesos (3,41 millones de euros) sobre los bienes de los imputados. Los cuatro detenidos fueron procesados por el delito de "tormentos", previsto en el art¨ªculo 144 del c¨®digo penal, que castiga con hasta 25 a?os de prisi¨®n a quien someta a "cualquier clase de torturas a detenidos".
El fallo judicial incluye a Alfredo Tigre Acosta, Antonio Pern¨ªas y H¨¦ctor Antonio Febres, a quienes, junto con Astiz, el juez hall¨® responsables de torturar en la Escuela de Mec¨¢nica de la Armada (ESMA), uno de los m¨¢s cruentos centros clandestinos de detenci¨®n durante la dictadura. Todos fueron encontrados culpables de las torturas que sufrieron las monjas francesas Alice Domon y Leonie Duquet, secuestradas en 1977, caso por el que Francia ha reclamado reiteradamente la extradici¨®n de Astiz, apodado el ?ngel de la Muerte. Entre los torturados y desaprecidos tambi¨¦n se encontraban Azucena Villaflor, la fundadora de Madres de Plaza de Mayo y otras ocho v¨ªctimas.
En 1990, un tribunal de Par¨ªs conden¨® en ausencia a Astiz a prisi¨®n perpetua por el secuestro, torturas y desaparici¨®n de las religiosas francesas, adem¨¢s de estar acusado por jueces de Espa?a, Italia y Suecia por la desaparici¨®n de personas detenidas en la ESMA durante el r¨¦gimen militar.
"Capucha y capuchita"
En su extensa resoluci¨®n, el juez argentino reconstruy¨® lo ocurrido durante el secuestro de las monjas y el resto de desaparecidos. Seg¨²n la causa judicial, las v¨ªctimas fueron llevadas al llamado Casino de Oficiales de la ESMA, "donde se las interrog¨® mediante la aplicaci¨®n de tormentos para luego ser alojadas bajo condiciones inhumanas en los sectores denominados 'capucha y capuchita". Distintas fuentes consideran que permanecieron all¨ª entre siete y diez d¨ªas y que luego fueron arrojados al R¨ªo de la Plata, dentro de los llamados "vuelos de la muerte", que sirvieron a los jefes de la dictadura para deshacerse de miles de detenidos.
Las cifras oficiales estiman que durante la ¨²ltima dictadura militar fueron asesinadas o desaparecieron con presunci¨®n de muerte unas 18.000 personas, aunque los organismos defensores de los derechos humanos sostienen que las v¨ªctimas fueron 30.000. El recinto de la ESMA fue entregado por el presidente argentino, N¨¦stor Kirchner, a organizaciones de derechos humanos el pasado 24 de marzo, d¨ªa en que se cumpli¨® un nuevo aniversario del golpe de 1976, para que instalen un museo de la memoria por las v¨ªctimas de la dictadura.
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