'Los hermanos Rico', de G. Simenon

Los hermanos Rico, escrita por el escritor belga de lengua francesa Georges Simenon, es en realidad una novela negra americana. Todo en ella, el tema, la factura, el ambiente, los personajes por supuesto, todo es americano y m¨¢s concretamente italo-americano. Incluso su autor casi lo es en el momento en que la escribe, en la larga etapa de su vida en que se instala en Estados Unidos, forma una familia americana y recibe serias propuestas de adquirir la nacionalidad.

Los hermanos Rico es una sencilla y perfecta novela de g¨¢nsteres neoyorquinos, que podr¨ªa haber salido de la pluma de Dashiell Hammet o de Raymond Chandler. No es una extravagancia en la obra inmensa de Simenon, un escritor muy viajado y m¨¢s vivido todav¨ªa, en la que hay dos geograf¨ªas preferentes, la europea, con Francia en su n¨²cleo, y la americana, con Estados Unidos. Recorri¨® Francia en su juventud, en chalana, por sus magn¨ªficos canales fluviales, y Estados Unidos en su madurez, por carretera sobre todo.

Su capacidad para crear una atm¨®sfera con muy pocas palabras es prodigiosa

En sus diez a?os de vida americana escribi¨® mucho m¨¢s que sus obras americanas. Gracias a su enorme imaginaci¨®n literaria sigui¨® escribiendo durante estos a?os historias ambientadas en Europa con una capacidad intacta de recreaci¨®n de la vida provincial y de los paisajes y ambientes franceses. Incluso cabe pensar que la distancia le proporcionaba mayor fuerza. Pero para las obras ambientadas en Estados Unidos, con un conocimiento minucioso de la vida cotidiana y de los detalles, es obvio que se hace imprescindible tener en cuenta estos a?os de profunda compenetraci¨®n con Am¨¦rica.

El truco literario de Simenon, seg¨²n Jean d'Ormesson, puede sintetizarse en dos palabras: atm¨®sfera y destino. Su capacidad para crear una atm¨®sfera con muy pocas palabras es prodigiosa y consiste de hecho en la virtud cinematogr¨¢fica de poner bajo el foco unos pocos detalles, muy significativos y sint¨¦ticos.

As¨ª funciona en Los hermanos Rico, donde se nos describe el ambiente de barrio italoamericano de Nueva York, los dioramas de la vida aburguesada del g¨¢nster instalado o las escenas provincianas de una peque?a ciudad californiana agr¨ªcola.

Y junto a la atm¨®sfera, el destino, que act¨²a como motor de las historias; la estructura de tragedia griega sobre la que monta su narraci¨®n este escritor de novelas de la bruma cotidiana. Los hermanos Rico es una especie de Ant¨ªgona al rev¨¦s: la ley de la omert¨¤ se impone implacablemente sobre la afinidad de sangre y sobre el amor fraternal. Y quien se somete a ella sin atenci¨®n a la piedad entre hermanos es precisamente el g¨¢nster acaudalado y educado que nunca ha ba?ado directamente sus manos en la sangre y se ha limitado a obedecer ¨®rdenes y a cumplir la ley del silencio.

Con Los hermanos Rico quedan representadas en esta colecci¨®n sus novelas sin polic¨ªa, que han cosechado ¨¦xitos, han ganado lectores y han pasado tambi¨¦n con tanta fortuna al cine como las novelas que tienen como protagonista al comisario Maigret. Estas ¨²ltimas, que son las que le dieron fama universal, estar¨¢n representadas por El caso Saint-Fiacre (n¨²mero 37 de esta colecci¨®n), una de las primeras aventuras del comisario, escrita en 1932, que representa de forma magn¨ªfica la vida provincial francesa. En 1972, 40 a?os despu¨¦s, publicar¨ªa el ¨²ltimo Maigret (Maigret y Monsieur Charles), que signific¨® la despedida literaria de Simenon. Despu¨¦s ya no escribi¨® m¨¢s novelas.

Las aventuras de Maigret ocupan 72 libros y abarcan 43 a?os de escritura. Pero bajo la firma de Simenon hay m¨¢s de 110 novelas de g¨¦neros variopintos y unas Memorias ¨ªntimas, escritas a?os despu¨¦s de abandonar la actividad literaria, tras el suicidio de su hija Marie-Jo, para pasar cuentas familiares y coronar as¨ª dram¨¢ticamente su obra y su biograf¨ªa al llegar a la edad provecta. Hay que anotar al margen que antes de saltar a la fama literaria escribi¨® algunos centenares m¨¢s de novelas y folletines, que public¨® bajo diferentes seud¨®nimos, y millares de reportajes y noticias como periodista. Mucho tiene que ver su ojo period¨ªstico y la facilidad de escritura adquirida en las redacciones con su ¨¦xito como escritor prol¨ªfico y popular.

Pero tambi¨¦n tuvo que ver la alta cultura, y muy en concreto Andr¨¦ Gide, en el descubrimiento y la buena fama literaria de Simenon. El escritor franc¨¦s fue el principal patrocinador de la novela negra norteamericana en Europa, y por tanto, alguien esencial para el prestigio de este g¨¦nero popular entre los intelectuales europeos. El mandar¨ªn literario e intelectual que domin¨® el imperio de las letras francesas durante medio siglo consideraba ya en los a?os treinta al padre de Maigret "como un gran novelista: quiz¨¢s el mayor y el m¨¢s aut¨¦ntico que hayamos tenido en la literatura francesa hasta hoy". No era de la misma opini¨®n Paul Nizan, que ironizaba a prop¨®sito de las novelas sin Maigret: "Simenon ha empezado a escribir novelas sin polic¨ªa. Se percibe de pronto que era un escritor aceptable de novelas policiacas, pero no es m¨¢s que un mediocre autor cuando se trata s¨®lo de novelas". La lectura de Los hermanos Rico permite comprobar que no ten¨ªa raz¨®n.