La nueva fragancia de los j¨®venes Puig

Puig inicia una nueva andadura. El reciente nombramiento de Marc y Manuel Puig como consejeros delegados de la corporaci¨®n catalana de perfumer¨ªa, cosm¨¦tica y moda -denominada Puig Beauty & Fashion Group desde que en 2000 decidi¨® estructurar su actividad en tres divisiones de negocio- va m¨¢s all¨¢ de una aparente bicefalia. Es la culminaci¨®n de una transici¨®n planificada para que la tercera generaci¨®n de los Puig tomara las riendas de la compa?¨ªa.

Puig es hoy un imperio asociado al lujo que se codea con LVMH, Procter & Gamble o L'Or¨¦al. Factura cerca de 1.000 millones de euros

El proceso de relevo generacional, la aut¨¦ntica piedra de toque de las empresas familiares, se inici¨® a mediados de los a?os noventa. En 1996, los cuatro hijos del fundador, Antonio Puig -Antonio, Mariano, Jos¨¦ Mar¨ªa y Enrique-, iniciaron su retirada de los puestos ejecutivos. Cuatro a?os m¨¢s tarde, se nombr¨® presidente al director general y m¨¢ximo ejecutivo de facto de la compa?¨ªa, Javier Cano. En ¨¦l recaer¨ªa la responsabilidad de pilotar la transici¨®n. El nuevo organigrama empresarial que se deriva de ambos ascensos y la atribuci¨®n de funciones de cada consejero delegado se dar¨¢ a conocer p¨²blicamente ma?ana, lunes, en la presentaci¨®n de las cuentas de la compa?¨ªa correspondientes al ejercicio de 2003.

Los nuevos ejecutivos son primos y dos de los 14 miembros que integran la tercera generaci¨®n de la saga. Manuel Puig Rocha (Barcelona, 1961), ¨²nico hijo de Antonio Puig, es uno de los mejor posicionados de la familia tras los triunfos cosechados al frente de la divisi¨®n de marcas de prestigio de la empresa, cuyos estandartes son Carolina Herrera, Paco Rabanne y Nina Ricci. Lleva 16 a?os en la empresa.

Marc Puig Guasch (Barcelona, 1962) es uno de los descendientes de Mariano Puig. Ha pasado por los puestos de director de investigaci¨®n y desarrollo (I+D), de responsable del grupo en Norteam¨¦rica y de presidente de Carolina Herrera, hasta que en 2001 regres¨® a Barcelona para dirigir la divisi¨®n de moda.

Imperio del lujo

Poco pod¨ªa imaginar Antonio Puig Castell¨® que sus cuatro hijos convertir¨ªan la empresa que fund¨® hace 90 a?os en un imperio asociado al lujo que se codea con LVMH, Procter & Gamble o L'Or¨¦al. Puig ha pasado de ser un elaborador de colonia con materias silvestres al s¨¦ptimo productor mundial de perfumer¨ªa de lujo. Hoy, Puig Beauty & Fashion es la cabecera de un grupo que emplea a 5.000 personas y tiene 10 f¨¢bricas repartidas entre Europa y M¨¦xico. En 2002, alcanz¨® una facturaci¨®n de 924 millones de euros y gan¨®, antes de pagar impuestos, 65,5 millones de euros.

Antonio Puig lanz¨® su primer producto en 1922, Milady, el primer l¨¢piz de labios fabricado en Espa?a. Pero 1940 fue, sin duda, el a?o clave para el devenir de la empresa, al ver la luz una fragancia llamada a convertirse en superventas: Agua Lavanda Puig. El lanzamiento de este perfume constata el talante innovador del fundador. Al estar Espa?a cerrada a las importaciones por la autarqu¨ªa franquista, ide¨® una fragancia elaborada con romero, espliego, lavanda y lim¨®n, entre otros.

Los frutos m¨¢s espectaculares llegaron, sin embargo, por la v¨ªa de la internacionalizaci¨®n, que actualmente representa el 55% de las ventas de Puig. En 1968, con la segunda generaci¨®n ejerciendo el liderazgo del negocio, Puig se instala en Par¨ªs, la meca europea del perfume, y llega a un acuerdo con Paco Rabanne para incorporar su marca al grupo. A mediados de los ochenta, en Nueva York, alcanza acuerdos con Carolina Herrera para la creaci¨®n y explotaci¨®n de todas sus fragancias.

La actividad se torna fren¨¦tica. En 1998 es Nina Ricci quien entra a formar parte de Puig Beauty & Fashion; en 2000, el grupo compra la compa?¨ªa espa?ola Myrurgia y al a?o siguiente culmina la adquisici¨®n de Perfumer¨ªa Gal. Pero el grupo digiere el crecimiento y en 2002 reordena el cat¨¢logo de productos y elimina 25 marcas minoritarias. Ese mismo a?o, sella un acuerdo con la japonesa Comme des Gar?ons para comercializar sus fragancias y otro con la firma Mango para fabricar y vender su nueva colonia, MNG.

El ¨²ltimo gran hito es la creaci¨®n hace un a?o de una joint venture (sociedad mixta) con otra primera espada de la moda, Prada, para el desarrollo del negocio de fragancias y cosm¨¦tica bajo la lujosa ense?a italiana.