El ballet de la ?pera de Par¨ªs exhibe los quilates de sus 'Joyas'

Ya s¨®lo los t¨ªtulos prometen: Esmeraldas, Rub¨ªes y Diamantes. Son las tres partes de Joyas, la coreograf¨ªa de George Balanchine, con escenograf¨ªa y figurines de Christian Lacroix, con la que el Ballet de la ?pera Nacional de Par¨ªs, la compa?¨ªa de danza m¨¢s prestigiosa e importante del mundo, creada por Luis XIV en 1661, se presenta desde hoy y hasta el s¨¢bado en el Teatro Real de Madrid y la semana pr¨®xima en el Liceo de Barcelona.

"Adaptarse a los tiempos", ¨¦se es, seg¨²n Brigitte Lef¨¨vre, directora de la compa?¨ªa, el secreto de su traves¨ªa por la historia y de que un grupo as¨ª, con 160 bailarines y un repertorio en constante renovaci¨®n, perdure. Lo dec¨ªa ayer junto a tres de sus grandes estrellas al presentarse en el Teatro Real de Madrid. Junto a Lef¨¨vre, se sentaron Agn¨¦s Letestu, Kader Belarbi y el espa?ol Jos¨¦ Carlos Mart¨ªnez, que lleva 15 a?os entre sus filas.

Se presentan en Madrid por segunda vez -la primera fue en 1979 en el Palacio de los Deportes- y la semana que viene ir¨¢n al Liceo de Barcelona. Bailan un programa Balanchine, alejado de su repertorio tradicional, pero muy acorde con la forma m¨¢s abierta de ver la danza que pretende imprimir en el presente Lef¨¨vre: "Es una obra rica y variada, que en su primera parte conecta con la tradici¨®n francesa, en la segunda con el ballet americano y los ambientes de Broadway y, en la tercera, con el baile ruso", explicaba ayer la directora.

A su lado, Jos¨¦ Carlos Mart¨ªnez, que bailar¨¢ junto a Letestu Diamantes, se mostraba encantado con presentarse junto a su compa?¨ªa en Madrid, en la que el p¨²blico espa?ol va a encontrar una coherencia que le va a asombrar: "Creo que esta compa?¨ªa tiene una unidad en su manera de bailar. Buscamos la perfecci¨®n sin que se note el esfuerzo y sin efectismo", anuncia.

Mart¨ªnez tambi¨¦n mostr¨® la cara amarga del exilio: "A veces es tr¨¢gico para nosotros estar fuera. M¨¢s cuando en Espa?a existe una escuela reconocida, pero no una gran compa?¨ªa donde los bailarines puedan desarrollarse", asegur¨®.

En Par¨ªs ha encontrado su sitio en un grupo m¨ªtico que trata de abrirse al mundo: "Nuestros bailarines son principalmente franceses y europeos", asegura Lef¨¨vre, "pero debemos abrirnos m¨¢s al mundo", dice. Aunque debe ser dif¨ªcil cuando una tradici¨®n imponente pesa sobre las piernas de todos sus artistas: "Luis XIV cre¨® esta compa?¨ªa, que ha sobrevivido a la Revoluci¨®n y a varios siglos. Y sabemos que cuando todos nosotros estemos muertos, permanecer¨¢", concluy¨® su directora.