El Supremo de Israel ordena cambiar 30 kil¨®metros del muro de separaci¨®n

El Tribunal Supremo de Israel orden¨® ayer la modificaci¨®n del trazado de 30 kil¨®metros del muro construido o en fase de ejecuci¨®n al noreste de Jerusal¨¦n, ya que perjudica los derechos y la libertad de 35.000 palestinos. Con esta sentencia sin precedentes, los jueces dan la raz¨®n a ocho ayuntamientos palestinos que en marzo presentaron un recurso. Representa, adem¨¢s, un precedente para otra veintena de demandas. El Gobierno de Ariel Sharon acat¨® la decisi¨®n y el primer ministro palestino, Ahmed Qurei, dijo que la sentencia era incompleta porque deber¨ªa afectar a todo el muro.

Los vecinos de los ayuntamientos afectados -Beit Sourik, Bidu, El Kabiba, Katane, Beit A'anan, Beit Likia, Beit Ajaza y Beit Daku, situados cerca de Jerusal¨¦n- celebraron la sentencia del Supremo como una victoria. En su denuncia hab¨ªan argumentado que esa secci¨®n del muro les imped¨ªa acceder a sus campos de cultivo, a los recursos acu¨ªferos, a los centros sanitarios, a las escuelas y universidades, y que de hecho representaba una apropiaci¨®n de parte de sus tierras. Los tres jueces del Supremo reconocen en una sentencia de un centenar de folios la mayor parte de estas demandas y ordenan modificar el trazado del muro e incluso destruir algunas partes construidas.

Los magistrados reconocen el derecho del Gobierno de Israel a construir un muro para evitar los ataques de los activistas radicales palestinos, pero sostiene que al mismo tiempo es necesario preservar los derechos de los vecinos. "Los criterios de seguridad tomados en consideraci¨®n son desproporcionados en comparaci¨®n con las necesidades humanitarias y el Tribunal ordena al mando del Ejercito israel¨ª reducir los prejuicios a los derechos de los ciudadanos y reconsiderar el trazado de la barrera", reza el texto, firmado por el presidente de Tribunal, Aaron Barak, y los otros dos jueces, Mishael Heshin y Eliyahu Matza.

Un portavoz del Ministerio de Defensa asegur¨® que Israel estaba dispuesto a acatar la orden judicial y a modificar el trazado de acuerdo con los criterios planteados por los magistrados. Pero en este comunicado, los militares anunciaban la reactivaci¨®n de los trabajos en el muro, congelados desde hace semanas por decisi¨®n de los jueces.

La sentencia es un hecho sin precedentes en el conflicto que enfrenta al Gobierno de Ariel Sharon con los palestino sobre la construcci¨®n del muro y deja la puerta abierta a que se pueda modificar el trazado de otros sectores del muro. Los jueces deber¨¢n resolver en breve otra veintena de denuncias similares. Los razonamientos jur¨ªdicos de los jueces refuerzan las reclamaciones de m¨¢s de 200.000 vecinos palestinos de Jerusal¨¦n Este, especialmente de los barrios de Al Ram, movilizados desde hace semanas contra el trazado del muro que, al pasar por su zona, los segrega de Jerusal¨¦n a pesar de que pertenecen al municipio de la capital, pagan los impuestos a este ayuntamiento y forman parte de su censo electoral.

La sentencia llega en un momento especialmente delicado para Sharon, ya que el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya, har¨¢ p¨²blico, el 9 de julio, su veredicto sobre la legalidad o ilegalidad del muro que se construye desde hace un a?o y que, de terminarse seg¨²n el proyecto actual, tendr¨¢ m¨¢s de 600 kil¨®metros. El dictamen de La Haya fue solicitado por la ONU a petici¨®n de los pa¨ªses ¨¢rabes y en contra de la UE.

El primer ministro palestino, Ahmed Qurei, asegur¨® que la decisi¨®n del tribunal se quedaba corta. "Es un muro de separaci¨®n racista y todo ¨¦l deber¨ªa ser derribado. No hay otra alternativa", dijo. Por su parte, Mohammed Dahla, el abogado que ha representado a los ayuntamientos palestinos afectados, calific¨® de "valiente y muy importante" y dijo que era m¨¢s importante que la de La Haya, pues la del Tribunal Supremo "es de obligado cumplimiento".

El mismo d¨ªa en que se daba a conocer la sentencia del Supremo, el Ej¨¦rcito anunci¨® su intenci¨®n de construir una segunda muralla en torno al norte de Gaza con el objetivo de impedir los ataques de los activistas palestinos sobre las localidades cercanas israel¨ªes. Mientras se inician estas obras, el Ej¨¦rcito mantiene un asedio sobre Beit Hanun, el municipio palestino desde el que Ham¨¢s lanza misiles contra aldeas habitadas por israel¨ªes.