La fiscal¨ªa paraguaya acusa a siete detenidos por el incendio que ha causado 409 muertos

Siete personas fueron imputadas ayer por el incendio del centro comercial de Asunci¨®n (Paraguay) en el que murieron 409 personas, seg¨²n el ¨²ltimo balance oficial. Seis de ellas, entre las que figuran el due?o del establecimiento, Juan P¨ªo Paiva, y su hijo V¨ªctor, as¨ª como cuatro agentes de seguridad, est¨¢n acusadas de homicidio doloso por los fiscales que investigan el siniestro. Adem¨¢s, el gerente, Humberto Casaccia, fue acusado de omisi¨®n de auxilio. Varios supervivientes aseguraron que el hijo del due?o dio por radio la orden de cerrar las puertas.

Las cifras que maneja la fiscal¨ªa indican que hasta ayer hab¨ªan fallecido 409 personas a causa del incendio. A ello hay que sumar que contin¨²an desaparecidas unas 130 personas y que 454 resultaron heridas, muchas de ellas de car¨¢cter grave.

Ante la magnitud del siniestro, los dos due?os del establecimiento negaron su culpabilidad durante su declaraci¨®n ayer ante el juez. Ambos aseguraron que el control del centro comercial estaba en manos del gerente en el momento del accidente. Pero este extremo fue contradicho por Julio Daniel Selvolierro, un trabajador del local, y N¨¦stor Milciades Vel¨¢zquez, uno de los clientes que hac¨ªan cola para pagar. Los dos sostuvieron ante la fiscal¨ªa que oyeron "al se?or Paiva, hijo, dar la orden" de cerrar las puertas de acceso al local para evitar saqueos y que la clientela se fuese sin pagar.

Estos testimonios han servido a los fiscales dirigidos por Teresa Sosa para imputar a los due?os del supermercado Yku¨¢ Bola?os por homicidio doloso y omisi¨®n de ayuda, delitos por los que pueden ser condenados hasta a 25 a?os de prisi¨®n. Un juez confirm¨® anoche la orden de prisi¨®n.

Por eso, uno de los principales elementos de la investigaci¨®n ser¨¢ establecer la responsabilidad de los due?os de Yku¨¢ Bola?os S.A, una sociedad an¨®nima con varios accionistas. El grupo posee otros tres centros comerciales y dos supermercados, El Principito y La Barca, y tiene un motel. Jos¨¦ P¨ªo Paiva, uno de los principales accionistas, contribuy¨® econ¨®micamente a la campa?a del actual presidente Nicanor Duarte Frutos.

El centro comercial Yku¨¢ Bola?os estaba asegurado por la empresa espa?ola Mapfre desde enero pasado. La cifra del seguro a terceros para este establecimiento en particular no superar¨ªa los 200.000 d¨®lares (165.000 euros). S¨®lo el tratamiento de las v¨ªctimas supervivientes, seg¨²n algunas estimaciones, sobrepasar¨ªa los 20 millones de d¨®lares. La gerente general de Mapfre en Paraguay, Zaida Gabas, indic¨® a Efe que la cobertura alcanza "a los da?os producto del incendio y otras coberturas adicionales a todo lo que es la instalaci¨®n del supermercado y su contenido".

Para asegurar el resarcimiento de las v¨ªctimas, la Fiscal¨ªa General solicit¨® el embargo de todos los bienes de la empresa.

Ayer por la noche se desplaz¨® hacia Asunci¨®n un equipo de identificaci¨®n de v¨ªctimas de cat¨¢strofes de la Polic¨ªa espa?ola, que tiene previsto llegar hoy, con el objetivo de colaborar en las tareas de identificaci¨®n de las v¨ªctimas mortales. Un m¨¦dico, tres bi¨®logos, un especialista en necroidentificaci¨®n y otro en la toma de im¨¢genes en v¨ªdeo permanecer¨¢n al menos una semana en Paraguay. Igualmente, la Cruz Roja Espa?ola envi¨® a Paraguay a cuatro expertos en atenci¨®n psicol¨®gica, que ayudaron a las v¨ªctimas tras el atentado del 11 de marzo en Madrid.

Entretanto cientos de familiares se concentraron ayer en la sede militar de Asunci¨®n, donde todav¨ªa hay cientos de cuerpos carbonizados, a¨²n sin identificar. "Me he arrastrado entre cad¨¢veres en busca de mi mam¨¢ y hasta ahora no la encuentro", aseguraba un superviviente.

En el cementerio del Este, que estuvo abarrotado durante todo el d¨ªa, unas 50 familias dijeron adi¨®s a los restos de sus seres queridos. Muchos fueron enterrados en fosas comunes que tuvieron que ser donadas por el Ayuntamiento de Asunci¨®n. El Gobierno se vio obligado a enviar ladrillos y cemento para poder responder a la demanda de tumbas.