"Me dije: 'No puedo fallar"

El Carlos Moy¨¤ que entr¨® ayer en la pista era diferente al que sali¨® de ella. Consigui¨® con brillantez el punto que daba la Copa Davis a Espa?a frente a un contrincante del calibre de Andy Roddick, al que no hab¨ªa vencido nunca: "La gente me dec¨ªa que me estaba obsesionando con esto pero es mi manera de afrontar los problemas". Moy¨¤ sufri¨® mucho al no estar en la otra final ganada, a Australia, en 2000. Un pesar que le ha acompa?ado estos a?os, que le ha hecho madurar y que ayer se extingui¨®: "Estaba preparado mentalmente. Me dije; 'No puedo fallar. Si no aprovecho esta oportunidad, no me podr¨¦ considerar un buen jugador". Moy¨¤ es desde ayer el l¨ªder de un equipo ganador con otra generaci¨®n m¨¢s joven que le considera un ejemplo.

Roddick: "?La influencia del p¨²blico? Lo que sucedi¨® es que los espa?oles fueron mejores"

Ferrero: "Estoy igual de contento. Es mi segunda Ensaladera y con 24 a?os"

La cara del mallorqu¨ªn tras la victoria no era la que se podr¨ªa esperar. Seria, pero no grave; sin gestos exagerados o altisonantes. "Muchas veces me he despertado por la noche pensando en este d¨ªa", dijo; "hab¨ªa que ganar. Era muy importante para m¨ª. Me dije que iba a sobrevivir y lo consegu¨ª". Moy¨¤ se declar¨® luego incapaz de explicar lo que sinti¨®: "He estado esperando a que esto sucediera durante tanto tiempo que... Siempre pens¨¦ que, si alguna vez ten¨ªa que jugar el punto definitivo, no podr¨ªa ni coger la raqueta, pero lo he hecho". Lo que s¨ª admiti¨® fue el respeto y los nervios que le supon¨ªan los miles de espectadores presentes: "Estaba nervioso mientras iba hacia la cancha y en calentamiento, pero se me pas¨® en cuanto se jug¨® el primer punto".

No se olvid¨® Moy¨¤ de agradecer a Rafael Nadal la paliza f¨ªsica a la que someti¨® a Roddick el viernes: "No s¨®lo le gan¨®, sino que su victoria le afect¨® psicol¨®gicamente". El mallorqu¨ªn sostuvo que su estrategia frente a Roddick se bas¨® en que ¨¦ste se tuviera que mover detr¨¢s de la pelota todo lo posible y en evitar su drive: "Creo que he tenido suerte, pero es un gran campe¨®n y seguro que puede llegar a jugar muy bien en tierra batida".

Por su parte, Roddick demostr¨® ser un deportista de una talla colosal, alguien de quien aprender muchas m¨¢s cosas que su feroz golpeo de la pelota. Tras sus derrota ante Moy¨¤, compareci¨® ante los medios de comunicaci¨®n escoltado por un hombre de traje azul y cable al o¨ªdo y arropado por otro con ropa deportiva. Caminaba torpe, con la evidencia del dolor en la postura. Acababa de ser derrotado en una de las competiciones mayores del deporte mundial e iba a demostrar la pasta de la que est¨¢n hechos los campeones. Felicit¨® y alab¨® al equipo espa?ol sin tomar ninguno de los atajos que le ofrec¨ªan algunos periodistas de su pa¨ªs, que le llegaron a preguntar hasta en ocho ocasiones sobre el posible perjuicio que el p¨²blico y su bullicio habr¨ªan tenido sobre su juego: "Al final, lo que sucedi¨® es que fueron mejores que nosotros. Se puede decir todo lo que se quiera, pero nos ganaron. Es tan simple como eso".

Tampoco quiso Roddick escudarse en malestares f¨ªsicos y neg¨® que el tir¨®n que sufri¨® en una de sus piernas mientras disputaba el segundo set le afectara. Pero el que no cargara contra el comportamiento en las gradas no significa que no dejara claro su sorpresa. Asegur¨® que, tras jugar el a?o pasado frente al equipo franc¨¦s en Par¨ªs, pens¨® que nunca ver¨ªa nada similar: "El viernes me qued¨¦ un poco sorprendido, pero creo que hoy he conseguido aislarme bastante del ambiente". No obstante, confes¨® que hab¨ªa pasado bastante miedo cuando un espont¨¢neo invadi¨® la pista, ya que pensaba que llevaba un bate en la mano, y se tuvo que contener para no atraparle ¨¦l mismo.

Los cuatro tenistas y los tres capitanes del equipo espa?ol mantuvieron una actitud sorprendentemente desangelada tras el jolgorio vivido a pie de pista y dentro los vestuarios. Juan Carlos Ferrero no pod¨ªa esconder su cara de palo y tampoco le hacia demasiada gracia que le preguntaran por ella. "Yo estoy igual de contento que ellos, pero te has fijado en m¨ª", le solt¨® bruscamente a una reportera; "es mi segunda Ensaladera y con 24 a?os. As¨ª que creo que est¨¢ muy bien".

Los ¨²ltimos en dar su opini¨®n fueron el capit¨¢n estadounidense, Patrick McEnroe, y Mandy Fish, que acababa de lograr una victoria in¨²til sobre Tommy Robredo. Tras bromear sobre el partido de b¨¦isbol que hab¨ªan jugado t¨¦cnicos y jugadores sobre el c¨¦sped del estadio de La Cartuja -"he perdido las dos cosas"-, McEnroe asegur¨® que este tipo de competiciones ayudan a que los jugadores estadounidenses sean m¨¢s completos y dijo que estaba muy orgulloso del comportamiento del equipo "ante los mejores del mundo en tierra batida". Opin¨® tambi¨¦n que el m¨¢s favorecido por estas experiencias es Roddick: "[El suizo Roger] Federer ha llevado el juego a un nivel diferente y Andy est¨¢ haciendo todo lo posible para mejorar. Eso es algo de lo que puede estar muy orgulloso". Finalmente, McEnroe quiso acabar de una vez por todas con el tema de la posible influencia del p¨²blico en la final y sentenci¨®: "Ha estado fant¨¢stico y ha sido correcto en todo momento. No nos pod¨ªa haber tratado mejor".