Opel eliminar¨¢ 10.000 empleos y garantizar¨¢ estabilidad al resto de la plantilla si acepta cobrar un 15% menos

El fabricante automovil¨ªstico alem¨¢n Opel (filial de General Motors) ya ha decidido c¨®mo hacer frente a la crisis de sus cuatro factor¨ªas alemanas. Entre 6.000 y 7.500 trabajadores, de un total de 32.000, ser¨¢n trasladados a agencias de colocaci¨®n. Otros 2.500, hasta llegar a 10.000 empleos, ser¨¢n prejubilados. El resto de la plantilla mantendr¨¢ su empleo si acepta cobrar menos. Su renuncia a un 15% del salario garantizar¨ªa sus puestos de trabajo hasta el 2010.

Opel pone as¨ª fin a varias semanas de negociaciones y da un primer paso hacia un acuerdo con su casa matriz que pretende un ajuste de 12.000 empleos en Europa, 10.000 de ellos en Alemania, para ahorrar 500 millones de euros. Opel es una de las empresas m¨¢s afectadas por los recortes porque est¨¢ en n¨²meros rojos desde el a?o 2000.

Varios medios alemanes, sin embargo, dudan de que General Motors apruebe los planes adelantados, que asegurar¨ªan a los trabajadores afectados por el recorte de plantilla un 95% del salario durante dos a?os. La Agencia Federal de Trabajo (Bundesagentur f¨¹r Arbeit) cubrir¨ªa un 60% de dichos salarios si las agencias de colocaci¨®n se crean antes del 20 de enero del 2005. El peri¨®dico Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung inform¨® el domingo de que las agencias supondr¨ªan un coste de hasta 1.000 millones de euros. La reducci¨®n salarial, por otra parte, no se cuestiona, porque significar¨ªa una adaptaci¨®n del salario al convenio de la industria del metal.

Pero todo depende de que General Motors acepte el compromiso elaborado por la direcci¨®n y el comit¨¦ de empresa de Opel para salvar sus plantas en R¨¹sselsheim, Bochum, Kaiserslautern y Eisenach. El productor estadounidense decidir¨¢ sobre ello hoy en Detroit. Las negociaciones se iniciaron en octubre tras una huelga que dur¨® varios d¨ªas y que interfiri¨® en la producci¨®n de varios pa¨ªses que depend¨ªan de la alemana. Los trabajadores de Opel reaccionaron en aquel momento con sus protestas masivas, calificadas de ilegales y, por lo tanto, sin respaldo sindical, ante el anuncio de GM de ajustar empleos.

En Alemania, los sindicatos tienen cada vez m¨¢s dificultad en defender los intereses de los trabajadores. La competencia en el mercado internacional requiere adaptaciones. Los trabajadores de DaimlerChrysler y Volkswagen tambi¨¦n han hecho sacrificios salariales, si bien se trata en estos casos de una renuncia al aumento salarial.