Irak inicia el peligroso camino de las urnas

Diecis¨¦is millones de posibles votantes, 5.500 colegios electorales, decenas de listas entre las que elegir... La cita de Irak con las urnas el pr¨®ximo domingo tiene en principio todos los elementos externos para convertirse en un punto de inflexi¨®n con el pasado. Sin embargo, la violencia pol¨ªtica y criminal ha convertido todo el proceso en una operaci¨®n casi clandestina: la localizaci¨®n de los centros de voto permanece en secreto para evitar sabotajes, los candidatos ocultan su identidad por miedo a represalias y el factor miedo puede anular la te¨®rica libertad de los votantes. "Es el caso m¨¢s dif¨ªcil en el que he trabajado", admite un experimentado observador electoral europeo.

S¨®lo el 10% de los iraqu¨ªes en el exterior se ha inscrito, por eso se ha ampliado el plazo

Los centros de voto se han reducido de 8.000 a 5.400 por la falta de seguridad

"Si tienes un ser querido al que no deseas ver as¨¢ndose en las pilas de sucias papeletas electorales el d¨ªa 30 de enero, advi¨¦rtele de que no se condene a su propia perdici¨®n en ¨¦ste y en el otro mundo... no le dejes pensar que los soldados infieles y apostatas pueden protegerle", advierte el foro yihadista Al Maasada. A fin de contrarrestar esas amenazas, la Comisi¨®n Electoral Independiente Iraqu¨ª planeaba utilizar tinta invisible para marcar el ¨ªndice de los electores, pero no ha logrado a tiempo las 80.000 l¨¢mparas de luz ultravioleta que necesitar¨ªa para que todas las mesas puedan comprobar que nadie intenta votar dos veces.

Cualquier iraqu¨ª mayor de 18 a?os inscrito en una cartilla de racionamiento tiene derecho al voto. A falta de correcciones, esos listados arrojan 14,6 millones de electores potenciales. A ellos hay que a?adir otros 1,3 millones de iraqu¨ªes residentes en el extranjero, donde a pesar de no sufrir los problemas de seguridad, apenas se ha inscrito un 10%. Por eso ayer se les ampli¨® el plazo en dos d¨ªas m¨¢s, hasta el martes 25. Dado su peso relativo, los analistas pol¨ªticos esperaban que su voto, al parecer m¨¢s liberal o prooccidental, pudiera compensar la popularidad de los partidos religiosos dentro del pa¨ªs.

Las papeletas ya est¨¢n preparadas. Impresas en Suiza para impedir falsificaciones o robos, han empezado a transportarse a Irak en medio de grandes medidas de seguridad. Sus lugares de almacenamiento, fuertemente custodiados, se mantienen en secreto por la comisi¨®n. Lo mismo sucede con los candidatos que han recibido su visto bueno (6.000 para la Asamblea Nacional y 7.500 para las asambleas provinciales). En los votos, s¨®lo aparecen los nombres de las "entidades pol¨ªticas" que concurren a las elecciones. Por lo que los iraqu¨ªes s¨®lo conocen a las figuras m¨¢s relevantes de cada lista.

Cuando los votantes lleguen a los colegios electorales se encontrar¨¢n con dos papeletas (tres en el caso de las tres provincias aut¨®nomas kurdas, donde tambi¨¦n se elige el Parlamento regional). La principal tiene en el margen superior derecho un recuadro azul en el que puede leerse en ¨¢rabe y en kurdo: Asamblea Nacional Constituyente, junto al s¨ªmbolo de la comisi¨®n. Luego se explica que para elegir la candidatura que uno prefiera hay que marcar la casilla en blanco que aparece junto al s¨ªmbolo de cada una de ellas. Un total de 111 listas compiten por los 275 esca?os de la asamblea que debe designar al presidente y vicepresidente del Gobierno de transici¨®n y redactar la Constituci¨®n definitiva. De ellas, 87 corresponden a partidos o coaliciones de partidos que, seg¨²n la ley electoral, deben presentar un m¨ªnimo de 12 candidatos y un m¨¢ximo de 275. Las otras 24 son candidatos individuales que para ser aceptados han necesitado el apoyo de 500 firmas.

Los esca?os se distribuir¨¢n de forma proporcional entre las listas m¨¢s votadas. Los asesores electorales de la ONU recomendaron el distrito ¨²nico nacional en estos primeros comicios para evitar que el voto sectario y ¨¦tnico consolidara el reparto geogr¨¢fico de las tres comunidades mayoritarias (¨¢rabes chi¨ªes, ¨¢rabes sun¨ªes y kurdos) y facilitar que quienes se sintieran amenazados en su lugar de residencia pudieran ejercer su derecho en lugares m¨¢s seguros. Sin embargo, observadores se?alan que "las restricciones de movimientos que regir¨¢n desde la v¨ªspera de las elecciones reducen esa opci¨®n". Adem¨¢s, ese sistema impide la reserva de esca?os para los sun¨ªes.

Una segunda papeleta permite votar al candidato o lista preferido para la correspondiente Asamblea Provincial. En ¨¦stas, espec¨ªficas de cada una de las 18 provincias, hay menos aspirantes: 11 en el caso de Suleimaniya y 33 en Nayef, por ejemplo. Las candidaturas para la Asamblea Aut¨®noma kurda son 13. Todos los candidatos deben tener al menos 30 a?os y no pueden ser miembros de las fuerzas armadas o antiguos dirigentes baazistas (el partido de Sadam Husein). En teor¨ªa, tampoco pueden pertenecer a partidos que tengan milicias, aunque ni los peshmergas kurdos ni la Brigada B¨¢der chi¨ª han sido desmantelados. Adem¨¢s, al menos uno de cada tres miembros de la lista tiene que ser una mujer y sus nombres deben aparecer intercalados de forma equitativa. "Se trata de conseguir que una cuarta parte de los elegidos sean mujeres", explica una asesora electoral.

Los centros de voto, cuya localizaci¨®n se dar¨¢ a conocer en los pr¨®ximos d¨ªas, se han reducido de los 8.000 previstos inicialmente a 5.400, debido a la dificultad para garantizar la seguridad de todos ellos. "El objetivo es que la operaci¨®n sea lo m¨¢s iraqu¨ª posible", explica un diplom¨¢tico europeo; "por ello, las tropas de EE UU van a ocuparse ese d¨ªa de algunas de las tareas que realizan las fuerzas iraqu¨ªes, para que ¨¦stas se concentren en dar protecci¨®n a los colegios".