Mil a?os de civilizaci¨®n turca y otras muestras

A LA ESPERA del gran acontecimiento art¨ªstico del a?o, que se producir¨¢ con la inauguraci¨®n, a finales de febrero, y en la National Gallery, de Caravaggio: los ¨²ltimos cuatro a?os, 1606-1610, la actualidad londinense no est¨¢ precisamente mal surtida en cuanto exposiciones temporales, destacando, en primer lugar, Turcos: un viaje a trav¨¦s de mil a?os, 600-1600, en la Royal Academy, que estar¨¢ abierta hasta el 12 de abril y en la que exhibe un centenar largo de los m¨¢s variados objetos de esta cultura de etnias n¨®madas procedentes de Eurasia, cuya creciente asimilaci¨®n de la civilizaci¨®n china y persa le hizo alcanzar un formidable refinamiento propio, ya maduro hacia el siglo XIV. Es dif¨ªcil resumir las mil maravillas ahora expuestas, pero destacar¨¦ las textiles, la cer¨¢mica y la incre¨ªble caligraf¨ªa, entre otros muy diferentes y distinguidos apartados, lo cual forma un impresionante conjunto, de visita imprescindible.

Junto a esta convocatoria mayor, hay otra a tener muy en cuenta: la peque?a, pero interesante y exquisita de Degas, en la National Gallery, que gira en torno al cuadro de La hija del doctor Rouart; la de Boucher, en la Wallace Collection, que abarca tambi¨¦n todas las manifestaciones de la pintura galante, desde Watteau a Greuze y Fragonard; la de Rostros en la multitud, en la Whitechapel Art Gallery, una idea baudelairiana, que pierde sentido en la medida en que se ha querido embutir all¨ª todo, desde Manet, Munch y Boccioni hasta la m¨¢s rabiosa actualidad, pero que, en cualquier caso, merece, sin duda, una visita; la instalaci¨®n sonora del t¨²nel de Bruce Nauman en la Tate Modern, y, en fin, lo que tambi¨¦n cabe ver en las galer¨ªas privadas, entre lo que destaca una muestra, reci¨¦n inaugurada, de la ahora tan de moda Louise Bourgeois. Evidentemente, hay otras muchas cosas en Londres, que comparativamente sigue siendo una de las capitales de referencia en lo que se refiere a la promoci¨®n de lo art¨ªstico, lo que no pueden alegar otras ciudades de nuestro continente, de oferta m¨¢s irregular.