Corbacho y Cruz tejen cinco historias de amor y soledad

Jos¨¦ Corbacho y Juan Cruz, que debutan como directores con Tapas, son amigos del alma desde hace media vida. Se conocieron, de adolescentes, haciendo teatro aficionado en la parroquia de su barrio, el de Santa Eul¨¤lia, en el populoso L'Hospitalet de Llobregat del extrarradio barcelon¨¦s. ?Qui¨¦n les iba a decir entonces que aquel pasatiempo que les permit¨ªa empezar a explotar su vis c¨®mica, descargar su energ¨ªa juvenil y, sobre todo, tontear con las chicas -Cruz sigue con su novia de aquellos a?os, hoy su mujer, la actriz Pilar Arcas- se convertir¨ªa en su profesi¨®n? Pues s¨ª, los dos, que ya han alcanzado la cuarentena, acabaron gan¨¢ndose el sustento con el espect¨¢culo: Corbacho, hasta ahora, frente a los focos (como actor de La Cubana y, luego, en la televisi¨®n, donde ha triunfado con sus irreverentes parodias de Homo zapping y en el programa de Buenafuente), y Cruz, detr¨¢s, casi siempre en tareas de guionista.

"Las pel¨ªculas no son de quienes las hacen, sino de quienes las ven y las viven", dice Corbacho

Hace unos cuatro a?os, entre tapa de calamares, pincho de tortilla y alguna ca?a de cerveza de m¨¢s, los dos colegas empezaron a hablar de escribir juntos un gui¨®n cinematogr¨¢fico. Una historia que les inspiraba la propia realidad. En su caso, la del barrio en el que hab¨ªan crecido, pero susceptible de ocurrir en cualquier otro lugar. "Todo el mundo tiene secretos, tapa cosas", constata Corbacho. "Te ha dejado tu mujer e intentas ocultarlo; tu marido se va a morir de c¨¢ncer y te lo callas, o est¨¢s enamorado de una t¨ªa mucho mayor que t¨² y no lo cuentas", a?ade aludiendo a algunas de las tramas cruzadas de su pel¨ªcula. As¨ª que lo primero que tuvieron claro del futuro gui¨®n fue el t¨ªtulo, Tapas, que encierra un doble significado. Por una parte, el gastron¨®mico, y por otra, es la segunda persona del singular del presente de tapar. "Detr¨¢s de cada persona con la que te cruzas por la calle hay una pel¨ªcula. Y, si te propones seguirla, la ves. Y, a lo largo de nuestra vida, nos hemos cruzado con muchos Lolos, Conchis, Raqueles... [personajes de la ficci¨®n]. As¨ª que nos empe?amos en dar protagonismo a la gente que jam¨¢s lo tuvo". As¨ª explica Corbacho c¨®mo se inspiraron.

Cuando tuvieron m¨¢s o menos listo el texto, se lo mostraron a la productora Luisa Matienzo. Le entusiasm¨®. Y tras varios encuentros con ella para ir puli¨¦ndolo, los tres sellaron el acuerdo. "Fue en un bar, en una noche de borrachera", recuerda Corbacho. "Pero el mal trago vino cuando Luisa va y nos dice: 'Bueno, pues ya est¨¢; ahora habr¨¢ que ir pensando en qui¨¦n puede dirigir la pel¨ªcula'. Juan y yo nos miramos y, como est¨¢bamos completamente bebidos, le soltamos que nosotros ¨¦ramos capaces. Si no llega a ser por el alcohol...".

Corbacho y Cruz aseguran que si algo han puesto en Tapas, tanto ellos como el equipo entero, es "mucho amor". Y eso se nota en la pantalla, pero tambi¨¦n se percib¨ªa durante la filmaci¨®n de la cinta, el verano pasado en el bar Comercio de L'Hospitalet -bar Lolo, en la ficci¨®n- y en las calles y plazas de la poblaci¨®n. Un rodaje que los vecinos, con el permiso de los directores, dos chicos del barrio, hicieron suyo y con el que disfrutaron un mont¨®n compartiendo charleta con el reparto: ?ngel de Andr¨¦s, Mar¨ªa Galiana, Elvira M¨ªnguez, Rub¨¦n Ochandiano, Alberto de Mendoza... Incluso los hospitalenses m¨¢s distinguidos, como el cocinero Ferran Adri¨¤, que hace de s¨ª mismo en un cameo, y el cantautor Antonio Orozco, que firma uno de los temas de la banda sonora, lo pasaron fenomenal participando en el filme de sus conciudadanos.

Los directores dicen que les gustar¨ªa que esa "historia de amor tan bonita" que han vivido con Tapas -donde act¨²an tambi¨¦n sus mujeres, Anna Barrachina y Pilar Arcas, as¨ª como la hija de esta ¨²ltima, Aina, y en la que iban a salir las respectivas madres, desaparecidas al fin en la mesa del montador- conmoviera al p¨²blico. "Las pel¨ªculas", afirma Corbacho, "no son de quienes las hacen, sino de quienes las ven y las viven". De momento, el p¨²blico del Festival de M¨¢laga, el primero que ha tenido ocasi¨®n de ver Tapas, ya se ha apropiado del largometraje, en el sentido en el que habla Corbacho, premi¨¢ndolo. Pero es que la pel¨ªcula obtuvo adem¨¢s la Biznaga de Oro y Elvira M¨ªnguez -Raquel en la trama, una mujer abandonada por su marido y que vive dos amores secretos, uno por Internet y otro con un chico al que dobla la edad, a quien da vida Rub¨¦n Ochandiano- fue considerada la mejor actriz.

En cuanto al reparto, un elenco eminentemente coral, sostienen los directores que "se parece mucho" al que hab¨ªan imaginado. Ambos est¨¢n encantados con el trabajo de todos los actores. "Como espectador, lo que me llena de verdad es dejar de ver al actor para descubrir al personaje, y eso ya me sucedi¨® en Tapas desde el comienzo del rodaje. Por ejemplo, para m¨ª, Alberto de Mendoza ya no es Alberto, sino Mariano, el marido de Conchi", ilustra Corbacho.

La pel¨ªcula, al igual que la vida, tiene un final completamente abierto. Aun as¨ª, Corbacho y Cruz rechazan la idea de la secuela. "Si no hay una segunda vida, en contra de lo que nos han querido hacer creer desde hace 2.000 a?os, y Tapas es un trozo de vida, no tiene por qu¨¦ haber una segunda Tapas", zanja Corbacho.

El filme, que coproduce y distribuye Filmax, llega a los cines con un n¨²mero espectacular de copias para una pel¨ªcula espa?ola: 185.