Subasta sanitaria

El considerable retraso del final de la II Conferencia de Presidentes no pudo dejar completamente satisfechos a todos: al Rey, porque el inicio del almuerzo en el palacio de Oriente se demor¨® dos horas; a Rodr¨ªguez Zapatero, porque los presidentes de las comunidades aut¨®nomas gobernadas por el PP le hurtaron, como era previsible, el ¨¦xito de poder anunciar su primer gran pacto auton¨®mico (un acuerdo sobre la financiaci¨®n sanitaria), y a ¨¦stos, porque son conscientes de que, euro m¨¢s o euro menos, terminar¨¢n por aceptar el pr¨®ximo martes, en el Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera, la propuesta que present¨® el presidente del Gobierno en el ¨²ltimo tramo del encuentro, sin apenas margen de discusi¨®n, lo cual es criticable.

Zapatero habl¨® al t¨¦rmino de la reuni¨®n de que hab¨ªa un "consenso b¨¢sico" al respecto, pero Pedro Sanz, presidente de La Rioja y portavoz de los populares en la conferencia, lo neg¨®. En cualquier caso, la oferta significa de alg¨²n modo triplicar la que anunci¨® inicialmente el vicepresidente y ministro de Econom¨ªa, Pedro Solbes, y que ven¨ªa aparejada con una subida de los impuestos de la electricidad y la gasolina por los Gobiernos regionales.

Las comunidades aut¨®nomas tienen graves problemas de caja para financiar la sanidad, debidos no s¨®lo a problemas de gesti¨®n. Si el Gobierno se muestra dispuesto a aliviarlos aportando recursos adicionales con cargo al presupuesto, aunque sea a modo de remedio temporal, es dif¨ªcil que los Gobiernos aut¨®nomos rechacen la oferta por celos de partido. ?se es el corolario del actual debate de la sanidad en Espa?a. En asuntos de dinero los gobiernos dejan a un lado las siglas de partido, gastan a veces sin control y se olvidan de sus responsabilidades. Pero ahora no podr¨¢n olvidar el aviso de la Administraci¨®n: de rechazarse la propuesta, el Gobierno no aportar¨¢ un solo euro para financiar la sanidad de las comunidades, que desde 2002 es competencia exclusiva de ellas.

Zapatero les puso ayer sobre la mesa la suma de 1.677 millones de euros anuales, consolidados hasta la aprobaci¨®n de un nuevo modelo de financviaci¨®n que modifique el de 2001: 500 millones en ayuda directa y el resto repartidos en varios fondos y garant¨ªas para las comunidades m¨¢s pobres. Lo ofertado es el triple de lo que el Gobierno comunic¨® a principios de mes, y que no satisfizo a ning¨²n dirigente auton¨®mico, del PP o del PSOE, por la presi¨®n impositiva que comportaba, y mejorado d¨ªas despu¨¦s por el ministro Solbes. Ahora el Ejecutivo deja al arbitrio de cada comunidad la posibilidad de recaudar m¨¢s ingresos a trav¨¦s de una subida de la tasa de los carburantes. Ya han anunciado que ninguna lo har¨¢. Zapatero, en cambio, incrementar¨¢ los impuestos del alcohol y del tabaco. A esa suma habr¨¢ que a?adir otros 1.365 millones en concepto de anticipos de los impuestos cedidos a las comunidades. El PP afirma que esa oferta no es aut¨¦ntica y est¨¢ lejos de su exigencia de 1.800 millones.

Es deseable que se logre un pacto, pero bueno ser¨ªa que las comunidades aut¨®nomas, que tanto han reclamado en materia de competencias, sean m¨¢s responsables en la gesti¨®n de los recursos y no pidan auxilio al Estado para sacarles las casta?as del fuego.