Una ONG presenta en Chile pruebas para la extradici¨®n de Fujimori

Un informe de la organizaci¨®n Human Rights Watch (HRW) difundido ayer en Chile contiene testimonios y evidencias que comprometen al ex presidente peruano Alberto Fujimori en cinco casos de violaci¨®n de los derechos humanos y corrupci¨®n, y que justifican su extradici¨®n a Per¨². "Existen analog¨ªas y similitudes con los casos por los que se proces¨® en Chile al ex dictador Augusto Pinochet", sostuvo Jos¨¦ Miguel Vivanco, de HRW.

Las autoridades peruanas presentar¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas la solicitud formal para la extradici¨®n de Fujimori, quien est¨¢ detenido en Chile desde su llegada de Jap¨®n a Santiago el 6 de noviembre. La Corte Suprema chilena resolver¨¢ la petici¨®n peruana evaluando la contundencia de las pruebas que se adjunten, y ha requerido que ¨¦stas sean suficientes para establecer una presunci¨®n fundada e iniciar una acci¨®n penal.

Titulado Presunci¨®n fundada: pruebas que comprometen a Fujimori, el informe de HRW, de 23 p¨¢ginas, concluye que hay evidencias m¨¢s que suficientes para justificar su acusaci¨®n y procesamiento en Per¨², y por tanto su extradici¨®n desde Chile. El tratado de extradici¨®n firmado en 1932 entre los dos pa¨ªses requiere requisitos como, por ejemplo, que los cr¨ªmenes por los que se acusa a Fujimori est¨¦n tipificados por la legislaci¨®n chilena y que las eventuales penas sean superiores a un a?o.

Uno de los casos descritos por el informe es las masacres de La Cantuta y Barrios Altos, Fujimori y otras 57 personas, entre ellos su ex asesor Vladimiro Montesinos, est¨¢n acusados de los asesinatos de 25 personas, cometidos por el Grupo Colina, un escuadr¨®n de oficiales militares y de Inteligencia, creado para eliminar a presuntos terroristas. Las pruebas indican que Fujimori conoc¨ªa la existencia y operaciones de este grupo, pero que no hizo nada para detenerlos ni tom¨® medidas para castigar los cr¨ªmenes, "lo cual genera una posible responsabilidad penal".

Declaraciones de varias fuentes tambi¨¦n demuestran que Fujimori orden¨® interceptar llamadas telef¨®nicas de numerosos dirigentes, pol¨ªticos y periodistas, y los equipos y el personal encargado de hacerlo fueron pagados con fondos p¨²blicos. Incluso instal¨® un equipo de intercepci¨®n en el propio palacio de Gobierno, y cuando el general Gerardo P¨¦rez, jefe de la Casa Militar, orden¨® desconectarlo, el propio Fujimori le dio una contraorden para reinstalarlo. El tercer caso es el desv¨ªo de millones de d¨®lares de fondos p¨²blicos a "fines ilegales, incluidos sobornos y pagos personales a Fujimori y su familia", as¨ª como de donaciones realizadas desde Jap¨®n a Per¨², a trav¨¦s de ONG y cuentas manejadas por Fujimori y su familia.

El informe de HRW incluye otros dos casos de corrupci¨®n: la compra de parlamentarios mediante sobornos "para unirse al partido de Fujimori despu¨¦s de las elecciones de 2000". Esos cr¨ªmenes "violaron los derechos fundamentales de los peruanos, erosionaron el Estado de derecho y corrompieron la democracia", concluye el estudio.