Las tres cajas cuentan desde julio con un texto de la nueva ley adaptada a su fusi¨®n

Las direcciones de las tres cajas de ahorros del Pa¨ªs Vasco disponen desde el pasado mes de julio de un documento entregado por el Departamento de Hacienda que recoje c¨®mo quedar¨ªa el texto de la futura ley auton¨®mica que regula la actividad de estas entidades de cr¨¦dito con las adaptaciones que requerir¨ªan las condiciones de fusi¨®n pactadas por los presidentes de la BBK vizca¨ªna, la Kutxa guipuzcoana y la Vital alavesa. Sin embargo, desde ese mes en que se present¨® oficialmente la fusi¨®n, actualmente paralizada por sus promotores por la falta de un consenso pol¨ªtico que la respalde, las entidades todav¨ªa no han contestado si est¨¢n conformes con dicho borrador o qu¨¦ nuevas modificaciones estiman que ser¨ªa necesario introducir, seg¨²n se?alan fuentes del Ejecutivo.

"La reforma de la ley de Cajas no va a ser problema para la fusi¨®n. Esto se les ha dicho por activa y por pasiva a los presidentes" de las tres entidades -Xabier de Irala, de la BBK; Carlos Etxepare, de la Kutxa, y Gregorio Rojo, de la Vital-, asegura un portavoz de la Vicepresidencia. En el departamento que dirige la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, existe un cierto malestar por la insistencia de los presidentes de las tres entidades en que sea el Gobierno quien saque la operaci¨®n del atasco en que ha quedado al menos hasta la celebraci¨®n de las elecciones municipales y forales del pr¨®ximo a?o.

El PSE decidi¨® a comienzos del pasado mes de octubre abortar el proceso, cuya puesta en marcha sigue apoyando, ante el rechazo rotundo mostrado por el PP, en cuya compa?¨ªa consigui¨® el control de la Vital. El temor a que los populares pudiesen capitalizar electoralmente en 2007 la fusi¨®n, present¨¢ndola como una p¨¦rdida para los ciudadanos alaveses, pese a las garant¨ªas y los equilibrios internos acordados por los presidentes de las cajas, llev¨® al PSE a congelarla, a la espera del nuevo mapa pol¨ªtico que salga de las elecciones.

Los m¨¢ximos responsables de las tres entidades crediticias consideran que esta situaci¨®n podr¨ªa desatascarse si el Ejecutivo aprobase el proyecto de la reforma de la ley de Cajas, que permitir¨ªa y dar¨ªa cobertura legal a la operaci¨®n y a los compromisos pactados por las propias entidades.Irala, Etxepare y Rojo estiman, seg¨²n las fuentes informantes, que la plasmaci¨®n en un texto legislativo de los acuerdos alcanzados entre ellos que aseguran una presencia equilibrada de las tres provincias en la futura asamblea y los ¨®rganos de gobierno de la entidad fusionada, as¨ª como el reparto seg¨²n los mismos criterios de las sedes y de la obra social, podr¨ªa ayudar a despejar cualquier reticencia social y pol¨ªtica. "Seguramente, el PP seguir¨ªa en contra, pero entonces le ser¨ªa muy dif¨ªcil mantener el discurso de que a los alaveses les van a quitar su caja", apunta un directivo de una de las entidades de ahorro.

La existencia de ese texto legal, a?ade esta misma fuente, podr¨ªa empujar adem¨¢s al PSE alav¨¦s a revisar su decisi¨®n, al dotarle de argumentos para rebatir las acusaciones de los populares. "Si no se avanza en el marco legal, va a ser muy dif¨ªcil en estos momentos convocar unas asambleas para aprobar la fusi¨®n", insiste dicho directivo.

Es dudoso, sin embargo, que los socialistas alaveses se aventuren a activar la operaci¨®n mediante un acuerdo con el PNV en la asamblea general de la Vital, a menos de un a?o y medio de las elecciones municipales y forales de 2007 y abriendo a los populares un flanco muy propicio para el ataque.

Malestar en el Ejecutivo

En cualquier caso, el equipo qeu encabeza la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, ya ha comunicado oficialmente a los presidentes de la BBK, la Kutxa y la Vital que el Gobierno no piensa llevar al Parlamento un proyecto de reforma de la actual ley de Cajas que d¨¦ cobertura legal a su fusi¨®n mientras no se produzca el acuerdo en dicho sentido de las asambleas de las tres endidades. "Lo contrario ser¨ªa poner el carro delante de los bueyes y legislar para un futurible", manifiesta un portavoz del Departamento de Hacienda. No oculta este portavoz que en el Ejecutivo ha molestado la insistencia de los presidentes en pedir p¨²blicamente la aprobaci¨®n de la ley. Ello supondr¨ªa de alg¨²n modo que el Gobierno pasase a encabezar la fusi¨®n, cuando siembre ha resaltado que la operaci¨®n no ten¨ªa un impulso pol¨ªtico, sino que ha partido de las entidades y por razones esencialmente empresariales.

Ese malestar lo ha alimentado el hecho de que los presidentes de las tres cajas conocen las l¨ªneas maestras de la futura ley desde d¨ªas antes de que se hiciese p¨²blica, el pasado mes de julio, su intenci¨®n de abordar un proceso de fusi¨®n. En esas fechas, y de acuerdo con un estudio previo elaborado en su d¨ªa por la consultora Landwell y a los propios pactos establecidos por los m¨¢ximos mandatarios de las tres entidades, el Departamento de Hacienda les entreg¨® un borrador de una veintena de folios. Este texto recoge de una forma articulada los cambios necesarios en la ley de Cajas para adaptarla a las condiciones de la fusi¨®n, y que sean al mismo tiempo compatibles con la ley estatal reguladora de los ¨®rganos rectores de las cajas de ahorro (la LORCA).

Los responsables de Hacienda pidieron a las cajas que les comunicasen sus observaciones sobre el borrador del proyecto para introducir los cambios que fuesen oportunos, pero, seg¨²n fuentes conocedoras del proceso, a¨²n no ha habido respuesta. Una explicaci¨®n de ese silencio puede ser el embarrancamiento de la fusi¨®n, pero tal circunstancia no justifica, a?aden, que las cajas quieran pasar la patata caliente al Gobierno.

En algunos art¨ªculos del borrador preparado por el Ejecutivo, seg¨²n las mismas fuentes, se hace aut¨¦ntico "encaje de bolillos" para conciliar los equilibrios pol¨ªticos y territoriales pactados por los presidentes de las tres entidades en lo que se refiere a los ¨®rganos de representaci¨®n y rectores con los principios b¨¢sicos fijados por la LORCA. En determinados casos, para orillar obst¨¢culos insalvables, se evita entrar en detalles y se remite a lo que se establezca en un futuro en los estatutos y reglamentos electorales de la entidad fusionada, as¨ª como en los propios acuerdos de fusi¨®n, normas que son menos recurribles que la modificaci¨®n de la ley auton¨®mica.

No obstante, las cajas estiman que el apartado que puede causar mayores problemas es mantener tras la fusi¨®n el "equilibrio fiscal" que exist¨ªa con tres entidades independientes. Un ejemplo ilustra esta dificultad: en la hip¨®tesis de que la futura caja vendiese la participaci¨®n que ahora posee la BBK en Iberdrola, ?en qu¨¦ Hacienda foral se tributar¨ªan las multimillonarias plusval¨ªas obtenidas?