Al borde de la decisi¨®n industrial

A pesar de las declaraciones de la direcci¨®n de Volkswagen, los sabios industriales de Alemania creen que la compa?¨ªa no sabe qu¨¦ hacer con Seat. Su presidente, Bernd Pischetsrieder, le prometi¨® esta semana al ministro Montilla que no vender¨¢ la marca; pero m¨¢s all¨¢ de esta declaraci¨®n de intenciones no parece que haya un concepto econ¨®mico y empresarial bien definido.

El presidente de Audi, Martin Winterkorn, es el encargado de idear una nueva estrategia para la marca espa?ola. Seat -junto con Audi y Lamborghini parte del grupo de marcas Audi- cerr¨® 2005 con un descenso de ventas del 4,5%. Hace meses que en Ingolstadt, sede de Audi, se trabaja en la nueva Seat, pero hasta ahora no han trascendido m¨¢s que ideas contradictorias.

La estrategia de que Seat emulase a la italiana Alfa Romeo ha fracasado; Winterkorn, presidente de Audi, prepara la nueva l¨ªnea industrial

Los analistas alemanes consideran que la firma de Wolfsburg no puede mantener una divisi¨®n aut¨®noma de ingenier¨ªa en Espa?a

En noviembre se sugiri¨® que la estrategia lanzada hace tres a?os de que Seat emulase a la italiana Alfa Romeo en la construcci¨®n de coches deportivos y de ambicioso dise?o hab¨ªa fracasado y que Winterkorn quer¨ªa hacer de Seat una marca de coches peque?os, ahorrativos y ecol¨®gicos que siguiera el camino del ¨¦xito ejemplar que protagoniz¨® BMW con su marca Mini. Se habl¨® entonces de una m¨¢s estrecha colaboraci¨®n entre Seat y Audi en distribuci¨®n y marketing, y de que Audi tomar¨ªa las riendas en las finanzas.

Pero la semana pasada Winterkorn dio un giro radical: "La estrategia de que Seat construya veh¨ªculos deportivos es definitivamente correcta", declar¨® al peri¨®dico quincenal Automobilwoche. "Winterkorn a¨²n no tiene una soluci¨®n", asegura el experto Ferdinand Dudenh?ffer, catedr¨¢tico del Center for Automotive Research (CAR) de la Universidad de Gelsenkirchen. "Si hubiese intentado hacer coches peque?os al estilo de Mini habr¨ªa fracasado, estoy totalmente seguro. Porque la marca Seat es demasiado poco aut¨®noma y desconocida para generar una imagen en el p¨²blico como la que tiene Mini", explica Dudenh?ffer.

"Me puedo imaginar que Audi convierta a Seat en gama de bajo coste para sus propios veh¨ªculos, que es m¨¢s o menos lo que ya est¨¢ haciendo", apunta el analista experto en el sector Robert Heberger, de la banca de inversiones Merck Finck & Co. "Al fin y al cabo, el Seat Le¨®n es igual que el Audi A3 con un envoltorio un poco diferente", a?ade Heberger. La salida para Seat podr¨ªa ser, a juicio del analista, "ahorrar m¨¢s costes, quiz¨¢ cerrar alguna planta, reducci¨®n de plantilla, alinear m¨¢s los modelos con los de Audi, mejorar la sinergia y aprovechar mejor las capacidades de producci¨®n: fabricar modelos de otras marcas en Espa?a, quiz¨¢ trasladar parcialmente la producci¨®n de Seat a otro pa¨ªs".

Cambio exigido

"No creo que contin¨²en como hasta ahora, porque todos los intentos en todos estos a?os fueron en vano. Seat es para Volkswagen una carga. Econ¨®micamente no es justificable en su estado actual", asegura Dudenh?ffer, el experto m¨¢s prestigioso del sector. Para el catedr¨¢tico, la idea del ex presidente del grupo Ferdinand Pi?ch de que Seat emulara a Alfa Romeo "ha fracasado porque la aspiraci¨®n era demasiado alta".

Seat no tiene futuro en su estado actual, seg¨²n Dudenh?ffer, "porque es una marca conocida s¨®lo en el sur de Europa. En el resto es m¨¢s una marca barata, mientras que sus costes de producci¨®n son demasiado altos". Tambi¨¦n es esc¨¦ptico sobre la independencia industrial de Seat: "Dudo mucho que a largo plazo quede una divisi¨®n aut¨®noma de ingenier¨ªa en Espa?a. Se construir¨¢n veh¨ªculos que se deriven del desarrollo llevado a cabo en Ingolstadt, donde se puede hacer con menores costes que si tuvieran un desarrollo propio", opina Dudenh?ffer. "Yo creo que Seat acabar¨¢ siendo una rama de producci¨®n y ventas de Audi y la marca se llevar¨¢ desde Alemania", a?ade.

El catedr¨¢tico del CAR es tajante: "Si la decisi¨®n fuera m¨ªa y llegara alguien que quisiera comprar Seat, una empresa china quiz¨¢s, la vender¨ªa inmediatamente. Si no encontrara comprador, reducir¨ªa los costes y pensar¨ªa en llevar la producci¨®n a alg¨²n pa¨ªs donde sea m¨¢s barato que en Espa?a para luego empezar a elevar la gama poco a poco, de coches baratos a otros m¨¢s caros. Aprovechar¨ªa para ello componentes de otras marcas del grupo y las redes de distribuci¨®n que ya tiene", asegura Dudenh?ffer.

Para el experto alem¨¢n, el dise?o es importante y la tecnolog¨ªa tambi¨¦n, pero "en este sector sacar una marca adelante es un camino muy largo. A Seat le falta imagen, por lo que habr¨ªa que empezar por la gama barata hasta que se haya dado a conocer y pueda pedir precios m¨¢s altos. Hasta entonces hay que mirar los costes muy de cerca". Y advierte: "Convertir Seat en un ¨¦xito es muy dif¨ªcil y un trabajo de a?os".

Robert Heberger, por su parte, llama la atenci¨®n sobre el hecho de que Seat no es el mayor problema de Volkswagen. "El grupo est¨¢ mucho m¨¢s preocupado por las p¨¦rdidas de Volkswagen en Estados Unidos y en China. Para la magnitud de los problemas que tiene Volkswagen, Seat es demasiado peque?o".