Los palestinos eligen a Ham¨¢s
El movimiento islamista logra la mayor¨ªa absoluta en el Parlamento y desplaza del poder a Al Fatah
Los palestinos han inaugurado en las urnas una nueva etapa en su turbulenta y dram¨¢tica historia. El Movimiento de Resistencia Isl¨¢mica Ham¨¢s ha logrado en las elecciones generales celebradas el mi¨¦rcoles un triunfo tan contundente como sorprendente al cosechar 76 de los 132 esca?os. Relega as¨ª a una amarga oposici¨®n a Al Fatah, el hist¨®rico partido fundado por Yasir Arafat, cuyo estrepitoso fracaso -contar¨¢ con s¨®lo 43 diputados- le margina de la primera l¨ªnea del devenir pol¨ªtico de los palestinos. Ham¨¢s anunci¨® anoche que desea entablar inmediatas negociaciones con todos los partidos para formar un Gobierno de unidad nacional. Al Fatah rechaz¨® la propuesta. El proceso de paz con Israel est¨¢ m¨¢s en el aire que nunca.
Los electores votaban por una lista a escala nacional en la que se eleg¨ªan 66 legisladores. Ham¨¢s se hizo con 30 de esos esca?os; Al Fatah consigui¨® 27; el Frente Popular para la Liberaci¨®n de Palestina, 3; la Tercera V¨ªa, 2; la candidatura de Mustaf¨¢ Barghuti, 2, y Palestina Independiente, 2. Pero fue en la votaci¨®n en cada una de las 16 circunscripciones de Cisjordania y Gaza donde los islamistas arrasaron. Se hicieron con 46 de los 66 esca?os. En ciudades como Hebr¨®n (9), o el distrito Norte de Gaza (5) se alzaron con todas las actas parlamentarias en disputa.
Ya no es s¨®lo la franja de Gaza el basti¨®n de Ham¨¢s. Los resultados revelan que las tesis de los islamistas -tras a?os de ineficacia, corrupci¨®n y nulos frutos en el proceso de paz con Israel emprendido por la Autoridad Nacional Palestina- han arraigado.
Los fundamentalistas enunciaron su listado de prioridades. La primera, reconstruir los territorios ocupados. Ahmed Mubarak, uno de los diputados elegidos en Ramala, se?al¨®: "Estamos satisfechos y orgullosos con la confianza que han depositado en nosotros. Esper¨¢bamos ganar, pero no con semejante mayor¨ªa. Tenemos que ordenar la casa palestina, reforzar la econom¨ªa, luchar contra la corrupci¨®n, reformar el poder judicial, proteger la libertad de pensamiento y acabar con los arrestos pol¨ªticos". No cit¨® la negociaci¨®n con Israel. Son conscientes de que no ser¨ªan admitidos como interlocutores por el Estado jud¨ªo, de ah¨ª su deseo de incluir a ministros de otros partidos que pudieran asumir esa funci¨®n, al tiempo que Ham¨¢s se centra en los asuntos sociales, la verdadera clave de su ¨¦xito.
Gobierno de unidad
El juego pol¨ªtico comenz¨® por la ma?ana, antes de que se conocieran los resultados del escrutinio. El movimiento fundamentalista no desea perder un segundo para poner en pr¨¢ctica su programa. No se saldr¨¢ con la suya en uno de los asuntos cruciales, la constituci¨®n de un Ejecutivo de unidad nacional. "Ham¨¢s quiere reunirse con el presidente [Mahmud] Abbas y las facciones palestinas inmediatamente para comenzar consultas con el fin de formar Gobierno", declar¨® desde Gaza Ismail Hania, n¨²mero uno de la lista nacional de Ham¨¢s.
Los l¨ªderes de Al Fatah se le adelantaron y tomaron la iniciativa para rechazar su oferta. Saeb Erekat, jefe del equipo negociador con Israel, asegur¨® tras una reuni¨®n con Mahmud Abbas: "Se va a solicitar a Ham¨¢s que forme Gobierno. Nosotros, Al Fatah, no iremos con ellos. Seremos una oposici¨®n leal y reconstruiremos el partido". "Ham¨¢s debe asumir sus responsabilidades", a?adi¨® Yibril Rayub, candidato que se enfrentaba en Hebr¨®n a su hermano, que milita en el grupo islamista.
La Autoridad Nacional Palestina afronta una situaci¨®n muy compleja. Abbas, a quien se atribuyen las competencias de pol¨ªtica exterior, est¨¢ abocado a nombrar un primer ministro de Ham¨¢s con inclinaciones pol¨ªticas completamente opuestas. Los encontronazos con los dirigentes islamistas prometen ser sonoros.
La intenci¨®n de Ham¨¢s era componer un Ejecutivo con miembros de Al Fatah. Pero descartada aparentemente esta posibilidad, podr¨ªan optar por Salam Fayad -l¨ªder de La Tercera V¨ªa, ex funcionario del Fondo Monetario Internacional y ex ministro de Hacienda que dimiti¨® del Gobierno del primer ministro Ahmed Qurei tras denunciar pr¨¢cticas corruptas- para ocupar la cartera que ya abandon¨®.
Bruselas tiene ahora una patata caliente entre manos. El Alto Representante de la Pol¨ªtica Exterior de la UE, Javier Solana, anunci¨® hace semanas que si Ham¨¢s formaba Gobierno, las ayudas financieras ser¨ªan revisadas. La amenaza se ha mitigado en las ¨²ltimas jornadas, mientras los dirigentes de Ham¨¢s aseguran haber recibido llamadas de importantes pa¨ªses de la UE prometiendo que esos fondos no ser¨¢n recortados.
En cuanto al proceso de paz con Israel, el porvenir se adivina plagado de obst¨¢culos. El Gobierno del primer ministro en funciones, Ehud Olmert, repite una y otra vez que nunca se sentar¨¢ a dialogar con un Ejecutivo dirigido por un movimiento al que califica de terrorista. Exige su desarme como requisito sine qua non para negociar, pero se trata de una condici¨®n que Ham¨¢s se niega a considerar. La diplomacia internacional encara meses de diab¨®licas negociaciones. Los analistas esperan, en cualquier caso, que la llegada al poder del islamismo radical, atemperar¨¢ su pol¨ªtica.
Abbas, sin citar a Ham¨¢s en ning¨²n momento, anunci¨® anoche, con dos horas de retraso sobre lo previsto, que iba a iniciar sin demora las consultas para formar el Ejecutivo. A?adi¨® que mantiene su compromiso con la Hoja de Ruta y la negociaci¨®n con Israel.
Las celebraciones quedaron empa?adas cuando partidarios de Ham¨¢s izaron su bandera en el Parlamento de Ramala, y se enfrentaron a pedradas con seguidores de Al Fatah. Algunas ventanas del edificio resultaron rotas, y un militante del partido derrotado result¨® herido. Horas despu¨¦s, en la ciudad de Gaza, unos 500 hombres armados de las Brigadas de los M¨¢rtires de Al Aqsa, ligadas a Al Fatah, marcharon para pedir la dimisi¨®n de Abbas y de los dirigentes del partido. Ham¨¢s orden¨® evacuar las calles para evitar choques, seg¨²n Reuters.
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