La ley brit¨¢nica contra el odio religioso prev¨¦ condenas hasta de siete a?os de c¨¢rcel

La Ley sobre el Odio Racial y Religioso, aprobada la semana pasada por el Parlamento brit¨¢nico, pretende perseguir a quienes se escudan en la religi¨®n para en realidad expresar un odio racial. La ley, que define el odio religioso como "odio hacia un grupo de personas definidas en referencia a sus creencias religiosas o a su falta de creencias religiosas", es un compromiso electoral laborista con la comunidad musulmana brit¨¢nica. Los infractores de la ley pueden ser condenados a un m¨¢ximo de siete a?os de c¨¢rcel.

La nueva norma, que enmienda la Ley de Orden P¨²blico de 1986 a?adi¨¦ndole 14 nuevos art¨ªculos, determina que "la persona que usa palabras o comportamientos amenazantes, o exhibe cualquier material amenazante, es culpable de un delito si intenta por medio de eso incitar al odio religioso".

"El delito puede ser cometido en un lugar p¨²blico o privado, con la salvedad de que no existe ese delito cuando el comportamiento o las palabras son utilizadas, o el material escrito es exhibido, por una persona dentro de una residencia y no son o¨ªdos o vistos m¨¢s que por otras personas en esa u otras residencias", puntualiza el texto legal. El acusado tiene derecho a probar que no sab¨ªa que otras personas pod¨ªan verle u o¨ªrle desde fuera de su residencia. La nueva ley afecta tambi¨¦n a la difusi¨®n de material amenazante, a representaciones teatrales, im¨¢genes o sonidos grabados, e incluso a la mera posesi¨®n de "material amenazante" cuando se tiene la intenci¨®n de distribuirlo.

La tramitaci¨®n parlamentaria ha sido muy pol¨¦mica, porque intelectuales y defensores de las libertades civiles, aunque comprensivos con las buenas intenciones del Ejecutivo, han visto la ley como un instrumento que puede limitar la libertad de expresi¨®n.

El comediante Rowan Atkinson, conocido en Espa?a por su personaje M¨ªster Bean, ha liderado la campa?a contra los aspectos m¨¢s restrictivos de la ley con el argumento de que pod¨ªa significar "una traba para la libertad de expresi¨®n de los artistas, escritores y periodistas de este pa¨ªs". "No se debe confundir raza y religi¨®n", declar¨® en su d¨ªa a este diario. "Uno no puede elegir su raza, pero s¨ª puede elegir su religi¨®n. Si eliges tu religi¨®n, o aceptas la que has heredado, tienes que aceptar responsabilidades por ello y por las acciones y actividades que se perpetran en nombre de esa religi¨®n. Me preocupa que la gente pretenda que la religi¨®n ha de recibir garant¨ªa de inmunidad, que no pueda ser criticada ni ridiculizada. Es absurdo criticar a alguien por su raza, pero la religi¨®n es un conjunto de ideas, y es importante que todas las ideas puedan ser sometidas a an¨¢lisis", asegura Rowan Atkinson.

La C¨¢mara de los Lores se hizo eco de esas protestas e introdujo diversas modificaciones durante la tramitaci¨®n del texto, como una enmienda, el nuevo apartado E del art¨ªculo 29? de la Ley de Orden P¨²blico, titulado Protecci¨®n de la libertad de expresi¨®n: "Nada en esta parte debe ser le¨ªdo o debe ser aplicado de manera que proh¨ªba o restrinja la discusi¨®n, cr¨ªtica o expresiones de antipat¨ªa, aversi¨®n, rid¨ªculo, insulto o abuso de religiones en particular o de creencias o pr¨¢cticas de sus seguidores, de cualquier otra creencia o sistemas de creencias o pr¨¢cticas de sus adherentes, o del proselitismo o la b¨²squeda de nuevos fieles de una religi¨®n o sistema de creencias diferente para que dejen de practicar su religi¨®n o su sistema de creencias".

La C¨¢mara de los Comunes ratific¨® la semana pasada los cambios introducidos por los lores y rechaz¨® dos enmiendas del Gobierno que pretend¨ªan endurecer la ley. Una, para tipificar el hecho de "criticar, expresar antipat¨ªa hacia, abusar, insultar o ridiculizar cualquier religi¨®n, creencia religiosa o pr¨¢ctica religiosa". Y una segunda enmienda por la que el Gobierno quer¨ªa penalizar no s¨®lo los comportamientos "amenazantes", sino tambi¨¦n aquellos que fueran "abusivos e insultantes".