Perder la vida a manos de los padres

La peque?a Alba, de cinco a?os, sigue grave en la unidad de cuidados intensivos de pediatr¨ªa de Vall d'Hebron, con un traumatismo craneal que ha estado a punto de costarle la vida y ahora le dejar¨¢ graves secuelas. La madre y su compa?ero sentimental est¨¢n en prisi¨®n acusados de tentativa de asesinato. ?Qu¨¦ puede llevar a unos padres a agredir e incluso matar a sus hijos? ?Por qu¨¦ es tan dif¨ªcil prevenir la consecuencia m¨¢s tr¨¢gica del maltrato infantil? ?A qu¨¦ se debe que las madres sean las que causan m¨¢s muertes infantiles? Un estudio pionero realizado en Espa?a sobre 31 sentencias judiciales de casos de filicidio, con 42 v¨ªctimas, concluye que el mayor riesgo de sufrir filicidio -la muerte de ni?os a manos de sus progenitores biol¨®gicos o adoptivos- se concentra en los menores de tres a?os, y la mayor parte de las agresiones se producen de noche. Y algo muy inquietante: el 19% se produce como venganza del agresor contra el c¨®nyuge.

Se estima que los servicios m¨¦dicos s¨®lo descubren el 20% de los casos de maltrato

En casi la mitad de los casos de filicidio es la madre la que produce la agresi¨®n

El estudio ha sido realizado por Rosa S¨¢ez Codina, psic¨®loga cl¨ªnica y forense, en el marco del master en Psicolog¨ªa Jur¨ªdica y Peritaje Psicol¨®gico Forense de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona, y fue supervisado por Josep Ramon Ju¨¢rez, doctor en Psicolog¨ªa cl¨ªnica y forense. El informe indica que los ni?os menores de tres a?os son los que m¨¢s sufren filicidio (38,1%), seguidos de los de tres a seis a?os (19%). Las peores horas para estos sucesos son entre las 21.00 y las 2.00 horas. El intervalo entre las 14.00 y las 21.00 tambi¨¦n es dram¨¢tico. Generalmente, act¨²a un solo agresor: la madre, "la persona que m¨¢s tiempo pasa con los hijos", en el 47,6% de las veces; el padre, en el 19%; ambos, en el 16,7%. En el 11,9% de ocasiones, el padre mata tambi¨¦n a la madre. ?Por qu¨¦ parece que las madres agredan m¨¢s? "De las sentencias judiciales es muy dif¨ªcil extraer otra informaci¨®n. Muchas veces las mujeres exculpan al marido o se autoinculpan ellas por miedo", afirma Rosa S¨¢ez.

El m¨¦dico Manuel Mart¨ªn, coordinador de urgencias del ¨¢rea maternoinfantil del hospital de Vall d'Hebron de Barcelona, cree dif¨ªcil que en una pareja "uno maltrate y el otro no lo sepa". El estudio de la psic¨®loga refleja que la edad m¨¢s frecuente de los padres agresores est¨¢ entre 30 y 40 a?os, aunque en las mujeres tambi¨¦n es relevante el intervalo de 18 a 30 a?os.

Manuel Mart¨ªn cree que los servicios m¨¦dicos detectan entre el 10% y el 20% de los casos de maltrato f¨ªsico a manos de los padres, que abarca desde cachetes hasta agresiones m¨¢s importantes. "El 12% de maltratos que hemos detectado se produce durante el primer a?o de vida y el 75% hasta los 12 a?os", a?ade.

El estudio de Rosa S¨¢ez muestra que las agresiones m¨¢s frecuentes a los menores, que a veces sufren simult¨¢neamente varios tipos de maltrato, son el envenenamiento y las quemaduras corporales (ambas, en el 14,3% de los casos), seguidas del abandono (11,9%) y los traumatismos corporales acompa?ados de traumatismo craneoencef¨¢lico, zarandeo y estrangulamiento (en el 9,5% de las v¨ªctimas). Como resultado de la agresi¨®n, la mitad fallecen y el 47,6% sufre lesiones graves. Muy pocos salen ilesos. Cuando no mueren, las secuelas m¨¢s frecuentes son las psicologicof¨ªsicas (11,9%), aunque hay secuelas neurol¨®gicas que aparecen pasados unos a?os.

En las sentencias analizadas por la psic¨®loga, la gran mayor¨ªa de las v¨ªctimas no present¨® un s¨ªndrome espec¨ªfico de maltratos, aunque el que aparece con m¨¢s frecuencia es el del ni?o zarandeado (11,9%); tambi¨¦n se encuentran algunos con s¨ªndrome de M¨¹nchhausen por poder (se le originan s¨ªntomas de enfermedad). Algunos padres automedican o provocan el v¨®mito de los ni?os y los llevan continuamente a urgencias. "Son sobreprotectores y deber¨ªan ser tratados psicol¨®gicamente", dice Mart¨ªn.

Las sentencias analizadas sobre maltrato infantil son, a juicio de S¨¢ez, "la punta de un iceberg a¨²n m¨¢s grande que el de la violencia de sexo". S¨¢ez relaciona el hecho de que se produzcan tantas agresiones a ni?os menores de un a?o al c¨®lico del lactante, que les hace llorar sin un motivo aparente. Por la noche, los padres se encuentran m¨¢s cansados, se angustian y pueden perder los nervios y agredir. La psic¨®loga recomienda realizar campa?as de educaci¨®n y prevenci¨®n. Mart¨ªn cree que muchas familias no son conscientes de que maltratan, "se van excediendo y aumentan la intensidad de los maltratos hasta que se les va de las manos".

El mapa del filicidio est¨¢ concentrado en Catalu?a (19%), Madrid (14%) y Baleares (11%): "En las zonas m¨¢s pobladas y con mayor estr¨¦s se denuncian m¨¢s casos de maltrato infantil", dice S¨¢ez. Ni el padre ni la madre inculpados tienen antecedentes penales. S¨®lo el 31,8% de los padres y el 18,5% de madres presentan atenuantes, principalmente por toxicoman¨ªa y confesi¨®n antes del descubrimiento de los hechos. Escasea el arrepentimiento espont¨¢neo o la anomal¨ªa o alteraci¨®n ps¨ªquica, y casi nunca presentan eximentes.

Pero el 55,6% de los progenitores agresores presentan alguna psicopatolog¨ªa. En el padre inculpado aparece, sobre todo, el trastorno paranoide de la personalidad; tambi¨¦n se dan casos de alcoholismo, trastorno mixto de la personalidad y trastorno ansioso depresivo. La esquizofrenia paranoide es el trastorno mental m¨¢s presente en las madres agresoras.

Parad¨®jicamente, a pesar de ser un delito tan grave, s¨®lo se ha evaluado pericialmente a la tercera parte de los padres inculpados en el estudio. Esta exploraci¨®n, que debe solicitar el juez, permite conocer las capacidades cognitivas y volitivas: si sab¨ªan o no lo que estaban haciendo y pod¨ªan controlarlo. Son ¨²tiles para considerar qu¨¦ atenuantes o agravantes se pueden aplicar, pero sobre todo "permiten obtener datos para elaborar protocolos de educaci¨®n y para prevenir y conocer qu¨¦ es lo que les lleva a matar a sus hijos". Muchas veces las encargan a m¨¦dicos forenses y, contrariamente a lo que S¨¢ez considera que ser¨ªa mejor, "pocas veces las hacen psic¨®logos forenses".

S¨¢ez ha peritado a padres inculpados en tres casos de filicidio. Los tres eran conscientes de lo que hac¨ªan y s¨®lo uno, que ten¨ªa un trastorno de control de los impulsos y dej¨® la medicaci¨®n, reconoci¨® los hechos y se dej¨® evaluar psicol¨®gicamente. "Estoy segura de que en el caso de una madre que mat¨® a su hija, pod¨ªa tener atenuantes porque ten¨ªa depresi¨®n posparto y alteraci¨®n hormonal, pero no reconoci¨® los hechos ni se dej¨® evaluar", explica.

El estudio de S¨¢ez se ha basado en la clasificaci¨®n del filicidio seg¨²n Joseph Guileyardo, que sigue criterios de medicina forense. Esta tipolog¨ªa tiene en cuenta los motivos, las causas, el m¨¦todo y los factores desencadenantes. "Es muy concreta y espec¨ªfica y da muchas orientaciones y herramientas para trabajar la prevenci¨®n", explica, pero considera que la psicolog¨ªa forense podr¨ªa definir una nueva taxonom¨ªa que tuviera en cuenta factores culturales para la poblaci¨®n espa?ola.