"C¨®mo prepar¨¦ el 11 de septiembre"

6. Jaled Sheij Mohamed proporcion¨® informaciones sobre la puesta en pr¨¢ctica de su proyecto de secuestro de aviones en Estados Unidos por kamikazes. Durante 1994, Ramzi Yussef Osama Asmuria, apodado Wali Jan, Abdul Hakim Murad y ¨¦l mismo trabajaron en el llamado plan Bojinka, que consist¨ªa en hacer estallar en vuelo 12 aparatos de compa?¨ªas norteamericanas procedentes o con destino a EE UU. Ese proyect¨® se abort¨® a principios de 1995.

Jaled Sheij Mohamed se desplaz¨® a Afganist¨¢n en 1996 para convencer a Bin Laden de que le diese dinero y hombres para secuestrar 10 aviones en EE UU y estrellarlos sobre objetivos civiles y militares, cinco en la Costa Oeste y cinco en la Costa Este.

Jaled Sheij Mohamed y Abu Hafs instaron a Bin Laden a que fuese m¨¢s discreto en p¨²blico

La decisi¨®n de golpear objetivos concretos con aviones secuestrados fue tomada en Espa?a

Al principio, Bin Laden dud¨® de que la operaci¨®n se pudiese poner en pr¨¢ctica, pero en marzo o en abril cambi¨® de opini¨®n y convoc¨® a Jaled Sheij Mohamed en Kandahar (Afganist¨¢n). Bin Laden le dijo que consideraba que ahora el proyecto era realizable y le inform¨® de que la operaci¨®n contaba con el pleno apoyo de Al Qaeda. Bin Laden le propuso enseguida a cuatro personas dispuestas a llevar a cabo una operaci¨®n suicida: Salid Mohamed Saleh Baattash (alias Jallad), Abu Bara al Yamani, Jaled al Mihdhar (o Midhdar) y Nawaf al Hazmi. Cuando el proyecto de secuestro obtuvo la aprobaci¨®n de Bin Laden, Jaled Sheij Mohamed y otros cuadros importantes de Al Qaeda que estaban informados se refirieron a ¨¦l como "la operaci¨®n de los aviones". Jaled Sheij Mohamed estim¨® que ser¨ªan necesarios unos dos a?os para planificar el proyecto y ejecutarlo.

7. Jaled Sheij Mohamed tuvo que efectuar el primer gran reajuste de su plan durante la primavera y el verano de 1999 cuando se dio cuenta de que Ba'Attash (alias Jallad) y Abu Bara, ambos yemen¨ªes, no podr¨ªan obtener visados norteamericanos. Jaled Sheij Mohamed quer¨ªa que ambos participasen en la operaci¨®n junto con otros yemen¨ªes (...).

Jaled Sheij Mohamed se vio obligado a dividir la operaci¨®n en dos partes distintas para garantizar la participaci¨®n de los yemen¨ªes. La primera parte concern¨ªa a EE UU. Jaled Sheij Mohamed decidi¨® enviar a EE UU a un n¨²mero no precisado de ejecutantes para secuestrar aparatos de l¨ªneas norteamericanas y precipitarlos contra objetivos situados en EE UU.

A mediados de 1999, Al Mihdhar y Al Hazmi, que dispon¨ªan de visados norteamericanos, fueron designados para participar en la operaci¨®n. La segunda parte de la operaci¨®n, concebida como una versi¨®n restringida del plan Bojinka, otorgaba un papel a los yemen¨ªes: los kamikazes secuestrar¨ªan aviones de compa?¨ªas norteamericanas en vuelos sobre el Pac¨ªfico y los har¨ªan estallar en vuelo en lugar de dirigirlos contra objetivos en tierra. A mediados de 1999, Baattash y Abu Bara hab¨ªan sido designados para participar en esta fase de la operaci¨®n (...).

En cualquier caso, el proyecto consist¨ªa en estallar en vuelo o en precipitar sobre objetivos en tierra, y casi en el mismo momento, aviones secuestrados en EE UU y en el sureste asi¨¢tico para conseguir con estos ataques el m¨¢ximo impacto psicol¨®gico.

Hacia abril o mayo de 2000 Bin Laden cancel¨® la parte asi¨¢tica de la operaci¨®n porque afirm¨® que resultar¨ªa muy dif¨ªcil sincronizarla con la vertiente norteamericana del plan.

14. Jaled Sheij Mohamed declara que se sinti¨® feliz de que Bin Laden le otorgase la responsabilidad de la operaci¨®n del 11 de Septiembre porque ¨¦l mismo propuso una operaci¨®n similar a Bin Laden cuatro a?os antes, en 1996, justo despu¨¦s de la llegada de ¨¦ste a Tora Bora (Afganist¨¢n) tras su salida de Sud¨¢n. Jaled Sheij Mohamed pensaba que la operaci¨®n resultar¨ªa f¨¢cil. Fue en ese momento cuando sugiri¨® que los muyahidin aprendieran a pilotar para estar en condiciones de secuestrar grandes aparatos, Boeing 707-400 o aviones a¨²n mayores. ?l no quer¨ªa ce?ir el entrenamiento a las t¨¢cticas militares que se ofrec¨ªan en Afganist¨¢n, porque no lo consideraba suficientemente adaptado al plan.

Jaled Sheij Mohamed opinaba que la sencillez era la clave del ¨¦xito. A ¨¦l no le gustaba recurrir a c¨®digos secretos en los mensajes (...). Pidi¨® a sus hombres que tuvieran un comportamiento de lo m¨¢s normal, que se ci?eran en sus cartas a un estilo educativo, social o comercial y que hicieran breves llamadas telef¨®nicas. Tambi¨¦n les prohibi¨® contactar con sus familias. Se lleg¨® incluso a suprimir de sus pasaportes cualquier sello o visado paquistan¨ª. Mohamed Atta hab¨ªa seguido una formaci¨®n en ese ¨¢mbito y dominaba la t¨¦cnica.

15. Jaled Sheij Mohamed declar¨® que el objetivo de los atentados contra las Torres Gemelas era "despertar al pueblo norteamericano". Explica que si el objetivo hubiese sido puramente militar o gubernamental, el pueblo norteamericano no habr¨ªa sido consciente de las atrocidades que EE UU comete al apoyar a Israel contra el pueblo palestino, ni del car¨¢cter ego¨ªsta de la pol¨ªtica exterior norteamericana, que corrompe a los gobiernos ¨¢rabes y acent¨²a la explotaci¨®n de los pueblos musulmanes.

18. Seg¨²n Jaled Sheij Mohamed, cuando Atta fue designado como uno de los futuros terroristas del 11-S, Bin Laden organiz¨® una nueva reuni¨®n en Kandahar para determinar qu¨¦ objetivos ser¨ªan golpeados. (...) El grupo trabaj¨® con la idea de que al menos tres objetivos ser¨ªan atacados, y Bin Laden indic¨® que deseaba golpear un blanco militar, uno pol¨ªtico y uno econ¨®mico.

19. Antes de que Jaled Sheij Mohamed saliese de Afganist¨¢n, Bin Laden le present¨® una lista de objetivos que despu¨¦s se encarg¨® de trasladar a Atta. Bin Laden inform¨® a Atta que deb¨ªa golpear las Torres Gemelas, el Pent¨¢gono y el edificio del Capitolio, pero dej¨® a Atta elegir otros objetivos adicionales, como la Casa Blanca, la torre Sears [en Chicago] o una embajada extranjera en Washington.

Tras esa conversaci¨®n, Atta utiliz¨® un programa inform¨¢tico para localizar una central nuclear en Pensilvania que Bin Laden acept¨® a?adir a la lista.

39. Los detalles de la operaci¨®n del 11-S fueron estrictamente compartimentados y s¨®lo Jaled Sheij Mohamed, Bin Laden y algunos miembros de los comandos estaban al corriente de los objetivos precisos, del calendario, de la identidad de los terroristas y de la forma de operar.

41. En un determinado momento del entrenamiento de Atta, Bin Laden decidi¨® que ¨¦l ser¨ªa el emir de los kamikazes en EE UU, y su adjunto Al Hazmi. Jaled Sheij Mohamed firma que no desempe?¨® ning¨²n papel en la designaci¨®n de Atta como emir. Jaled Sheij Mohamed conserva de Atta el recuerdo de un agente valioso. Atta se familiariz¨® mucho con Occidente, trabajaba duro y aprend¨ªa con rapidez.

53. La decisi¨®n final de golpear un objetivo con un determinado avi¨®n fue dejada en manos de los pilotos. Fue durante un encuentro en Espa?a, en julio de 2001, cuando Atta inform¨® a Ben al Shibh de los blancos elegidos. Despu¨¦s de ello, Ben al Shibh traslad¨® la informaci¨®n a Jaled Sheij Mohamed. La distribuci¨®n definitiva de objetivos entre pilotos fue llevada a cabo por Atta, Shehhi, Hanjour, Jarrah y Hazmi.

63. Durante el verano A finales de agosto, cuando los ¨²ltimos detalles de la operaci¨®n fueron establecidos, Bin Laden anunci¨® al consejo de la shura de Al Qaeda que un ataque de gran envergadura contra objetivos norteamericanos no precisados iba a llevarse a cabo en las pr¨®ximas semanas, pero se abstuvo de dar m¨¢s detalles.

64. Bin Laden formul¨® varias observaciones que alud¨ªan vagamente a la inminencia de un ataque, lo que suscit¨® rumores en la comunidad yihadista mundial. Bin Laden anunci¨® a destacados visitantes que deb¨ªan esperarse a un pr¨®ximo ataque contra intereses norteamericanos y, durante un discurso pronunciado en el campamento de Al Faruq, pidi¨® a los j¨®venes reclutas que rezasen para el ¨¦xito de una operaci¨®n de gran envergadura en la que estaban implicados 20 m¨¢rtires. Jaled Mohamed y Abu Hafs se preocuparon por la falta de discreci¨®n e instaron a Bin Laden a que no evocase p¨²blicamente la operaci¨®n.

65. En tres ocasiones Jaled Mohamed se neg¨® a ceder a un Bin Laden que le insist¨ªa en que adelantase el lanzamiento de la operaci¨®n. (...) Bin Laden quer¨ªa que tuvieran lugar el 12 de mayo de 2001, siete meses despu¨¦s del atentado contra el Cole en Yemen. En todos los casos, Jaled Mohamed pudo resistir las presiones de Bin Laden explicando que su equipo no estaba listo.

79. Jaled Mohamed declara que Mussaui fue reclutado para formar parte de una "segunda oleada" de ataques planeada para despu¨¦s del 11-S. Para esta segunda oleada de atentados estuvo previsto utilizar a ejecutantes de origen europeo o de Extremo Oriente porque Jaled Mohamed cre¨ªa que les resultar¨ªa m¨¢s f¨¢cil operar tras los ataques del 11 de septiembre que a las personas originarias de Oriente Pr¨®ximo.

Por esta raz¨®n, Jaled Mohamed s¨®lo ech¨® mano de individuos originarios de esta regi¨®n en la primera oleada y reservaba a Moussaoui para la segunda, a causa de su nacionalidad francesa. Jaled Mohamed precisa que la segunda oleada no estaba del todo planificada, (...) pero estaba en vela. ?l mismo no imaginaba que las consecuencias de la primera oleada ser¨ªan tan catastr¨®ficas como lo fueron y no hab¨ªa previsto que EE UU reaccionar¨ªa con tan virulencia, de manera que la siguiente fase fue congelada.