Un gran pleito familiar
Milan y Bar?a, dos equipos que se cartean y admiran, se baten hoy en San Siro en una eliminatoria sin t¨¦rmino medio
El Milan y el Barcelona se baten durante una semana en un gran pleito familiar que provocar¨¢ registros hist¨®ricos como el de hoy: 76.858 espectadores para una recaudaci¨®n de 3.260.405 euros. Ambos equipos se gustan tanto y comparten tantas cosas que de vez en cuando se juntan para disputar un partido de f¨²tbol, ya sea oficial o amistoso, ni que sea para homenajear a il metr¨®nomo Albertini, que jug¨® en uno y otro lado. El de esta noche es un encuentro por decreto y en juego est¨¢ una plaza en la final de la Liga de Campeones, un marco que parece concederle un punto de ventaja al club rossonero, m¨¢s laureado, experto y pu?etero y m¨¢s veces campe¨®n. Y tambi¨¦n m¨¢s envejecido, circunstancia que avala la candidatura de los azulgrana, un conjunto m¨¢s joven, vital y primaveral. De alguna manera, la pretensi¨®n del Bar?a es jubilar al Milan (23 a?os de media frente a 30) con la misma normalidad que un hijo toma el relevo del padre en el negocio. El problema es que el Milan se niega a abdicar, convencido de que precisamente por su madurez puede volver a ganar la Copa de Europa tras el fiasco del curso pasado porque lo suyo son los t¨ªtulos y no los torneos veraniegos.
A favor del Milan juega su curr¨ªculo y tambi¨¦n el factor campo y la profundidad de su plantel. Ning¨²n equipo europeo ha ganado en San Siro desde octubre de 2003, cuando el Brujas se apunt¨® un 0-1 (12 victorias y un empate) y el grupo de Carlo Ancelotti ha saldado sus 23 partidos de esta campa?a con 21 victorias y dos igualadas. Y, a pesar de que Inzaghi es v¨ªctima de un proceso gripal, el t¨¦cnico se maneja en la abundancia. La tendencia de la alineaci¨®n del Milan la marcar¨¢n los laterales m¨¢s que los delanteros porque ya se sabe que Shevchenko se basta para conseguir goles: nueve en diez partidos europeos: Stam y Maldini defienden tanto en las bandas como atacan Caf¨² y Serginho. La duda est¨¢ en saber qui¨¦n tomar¨¢ a Ronaldinho, cuya importancia ha quedado retratada en los p¨®sters con los que Gatusso ha empapelado su habitaci¨®n de la residencia de Milanello.
Ronaldinho ya abati¨® al Milan en el Camp Nou, acab¨® con la leyenda del Chelsea y fue despedido con aplausos del Bernab¨¦u. La vitalidad de brasile?o, que ha guardado reposo desde la visita del Benfica, anima al Bar?a, que acude a la cita de Mil¨¢n sin el punto de excitaci¨®n y de juego con el que conquist¨® Stamford Bridge. El equipo ha perdido presi¨®n, velocidad, gol y encanto por la acumulaci¨®n de partidos y las lesiones. Hoy faltar¨¢n el pase de Xavi, el oficio de Deco, el gol inevitable de Larsson y el cambio de marcha que pone Messi a los encuentros empinados. M¨¢rquez y Motta, adem¨¢s, se reincorporan despu¨¦s de largos procesos de recuperaci¨®n. A Frank Rijkaard, consecuentemente, se le presentan problemas con los volantes, no le queda m¨¢s remedio que confiar en la delantera del curso pasado, con Eto'o a la cabeza (11 goles en 24 partidos de la Champions) y se conforma con poder alinear a la defensa titular.
La consigna es mover al Milan hasta llevarle al equ¨ªvoco en una ronda cuyo ¨¦xito o fracaso parece depender de un detalle. Los dos cuadros, los mejores en los ¨²ltimos cinco a?os de acuerdo al baremo de la UEFA (127,97 puntos del Milan por 120,39 del Bar?a) se conocen demasiado y se alimentan de la misma fuente futbol¨ªstica como para aguardar una sorpresa en un pleito que suena a muy familiar.
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