Esquerra pretende pactar con Maragall la salida del Gobierno y el calendario electoral

Ning¨²n partido duda en Catalu?a de que habr¨¢ elecciones anticipadas, y Esquerra Republicana (ERC), que ya se ve con un pie fuera del Gobierno, advirti¨® ayer al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, de que una ruptura traum¨¢tica del tripartito impedir¨ªa una eventual reedici¨®n de la alianza de izquierdas. ERC, que pidi¨® pactar el calendario electoral, comenz¨® a agitar el fantasma de una posible gran coalici¨®n entre el Partit dels Socialistes (PSC) y Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU). Mientras tanto, el primer secretario del PSC, Jos¨¦ Montilla, asegur¨® a ERC que "va a arrepentirse" de su rechazo al Estatuto.

Los portavoces de la oposici¨®n en el Parlamento catal¨¢n luc¨ªan ayer a mediod¨ªa una sonrisa de oreja a oreja.Tanto el nacionalista Felip Puig como el portavoz del PP, Francesc Vendrell, consideraron logrado su gran objetivo de esta legislatura: que el tripartito de las izquierdas no agote el mandato de cuatro a?os. Vendrell dictamin¨® que el tripartito "ya est¨¢ acabado". Puig remach¨®: "S¨®lo falta firmar el acta de defunci¨®n".

Esto fue despu¨¦s de que a primera hora el primer secretario del PSC, Jos¨¦ Montilla, admitiera en una entrevista radiof¨®nica que entra "dentro de lo m¨¢s probable" que haya elecciones anticipadas tras el refer¨¦ndum del Estatuto. A Montilla no le gusta la nueva situaci¨®n y no duda en atribuir la responsabilidad del mal paso en que se encuentra el tripartito a ERC, que "ha perdido una gran oportunidad de demostrar que es un partido de gobierno". "Esquerra va a arrepentirse", abund¨®.

Incluso el presidente de ERC, Josep Llu¨ªs Carod, que a¨²n defiende la vigencia del actual Gobierno catal¨¢n, reconoci¨® tambi¨¦n que, una vez pasado el refer¨¦ndum del Estatuto, sea cual sea el resultado, lo mejor es que "un nuevo equipo surgido de las urnas" gestione la nueva situaci¨®n pol¨ªtica. Carod asum¨ªa impl¨ªcitamente la oferta que el viernes le hizo Maragall en el sentido de negociar la salida de los republicanos para, posteriormente, pactar una reedici¨®n del tripartito.

Pactar la ruptura

El tercer socio, Iniciativa Verds-Esquerra Unida (ICV-EUiA), present¨® la crisis del Gobierno catal¨¢n como una consecuencia ya inevitable de la "irresponsabilidad" de ERC al rechazar el Estatuto. Su portavoz parlamentario, Joan Boada, sostuvo que los seis miembros republicanos del Ejecutivo de Maragall deber¨ªan dimitir "por decencia pol¨ªtica". Esto es lo que corresponde, dijo, cuando no se comparte el primer objetivo de un Gobierno, que en este caso es lograr el s¨ª en un refer¨¦ndum.

Producida pues la coincidencia en este punto capital, las tres formaciones del tripartito buscan ahora la f¨®rmula para gestionar la ruptura. Los socialistas saben que echar del Gobierno a Esquerra con malas maneras no har¨ªa m¨¢s que radicalizar a un partido que se engorda como nadie cuando es blanco de todas las cr¨ªticas.

La direcci¨®n republicana, que ayer ratific¨® su apuesta estrat¨¦gica por el tripartito "catalanista y de izquierdas" para la pr¨®xima legislatura, pretende que la ruptura en ciernes no rompa tambi¨¦n las posibilidades de recomposici¨®n de la alianza tras las elecciones. Ayer, dirigentes de Esquerra admit¨ªan que sus bases, que se han demostrado poderosas en el viraje de ERC hacia el no al Estatuto, no querr¨¢n pactar de nuevo con los socialistas si ahora les echan a cajas destempladas del Gobierno. Con la claridad que exigen estas circunstancias, el portavoz de ERC en el Parlamento, Joan Ridao, expuso la demanda de su partido: pactar el final del Gobierno y el calendario electoral. "No es lo mismo una salida pactada que echar a un partido del Gobierno", advirti¨®.

Lograr esta salida consensuada depender¨¢ mucho de la reuni¨®n anunciada para ma?ana de Maragall con Carod Rovira. El presidente catal¨¢n podr¨ªa tomar entonces la decisi¨®n "seria e inmediata" que prometi¨® el pasado martes en caso de constatar que alg¨²n miembro de su equipo no va en la l¨ªnea de promover el s¨ª al Estatuto. La direcci¨®n de Esquerra Republicana ratific¨® ayer que ninguno de sus representantes en el Gobierno, excepto el primer consejero, Josep Bargall¨®, participar¨¢ en la campa?a que impulsa Maragall a favor del nuevo Estatuto.

Puente de plata

Con ¨¢nimo de precipitar inmediatamente el fin del tripartito, Converg¨¨ncia i Uni¨® tendi¨® un puente de plata. Le ofreci¨® al presidente Maragall el apoyo de los diputados nacionalistas en el Parlamento catal¨¢n hasta la convocatoria de elecciones anticipadas, es decir, probablemente en oto?o, si prescinde de Esquerra Republicana.

Aunque a nadie se le escapa que desde ahora y hasta octubre no son m¨¢s de cuatro o cinco los plenos que van a celebrarse en el Parlamento, el ofrecimiento de CiU frena las demandas de un sector de la federaci¨®n nacionalista que reclamaba a su l¨ªder, Artur Mas, la presentaci¨®n de una moci¨®n de censura contra Pasqual Maragall.

El portavoz de CiU, Felip Puig, tambi¨¦n verbaliz¨® el que es uno de los grandes temores de los nacionalistas: que los descontentos con el tripartito voten no en el refer¨¦ndum s¨®lo para castigar al Ejecutivo de Maragall, algo que tambi¨¦n pondr¨ªa en un serio aprieto a la federaci¨®n de Artur Mas, firme defensora del s¨ª desde enero. Puig pidi¨® a los ciudadanos que act¨²en en consecuencia y utilicen el refer¨¦ndum "solo para pronunciarse sobre el Estatuto".

El PSC, que tambi¨¦n se juega mucho en este refer¨¦ndum, ha pedido al presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que encabece hasta cuatro m¨ªtines, uno en cada provincia catalana, en la campa?a. El PSC pretende asegurarse, de esta forma, la victoria del s¨ª en cada una de las circunscripciones.