"Dejar los centros en manos privadas puede favorecer el inter¨¦s econ¨®mico"

Catalu?a es una de las pocas comunidades que gestiona directamente los centros de internamiento de menores. En la regi¨®n hay siete centros y dos pisos de rehabilitaci¨®n que acogen, a d¨ªa de hoy, a un total de 268 chavales que han cometido alg¨²n delito. El m¨¢ximo responsable de estos centros, Josep Font, director general de Justicia Infantil, defiende el modelo p¨²blico para ejecutar medidas de privaci¨®n de la libertad y se?ala que si entidades privadas se hacen con la gesti¨®n de los centros, se corre el riesgo de fomentar los intereses empresariales.

P. ?Por qu¨¦ todos los reformatorios son p¨²blicos en Catalu?a?

R. Todo esto surge con la Ley del Menor. Cuando la norma oblig¨® a sacar de las c¨¢rceles a los menores de 18 a?os y agruparlos en centros especiales para ellos, las comunidades se dieron cuenta de que no ten¨ªan sitio para acogerlos a todos. Esa avalancha de menores oblig¨® a las autonom¨ªas a dar la gesti¨®n a asociaciones y fundaciones sin ¨¢nimo de lucro. A nosotros, la aplicaci¨®n de la ley, nos cogi¨® preparados. En 2001 aprobamos una norma de desarrollo de la Ley del Menor y en ella dejamos claro que los centros ten¨ªan que tener siempre un car¨¢cter p¨²blico, salvo que sirvan para ejecutar medidas de r¨¦gimen abierto o de internamiento terap¨¦utico.

P. ?Los trabajadores son siempre funcionarios?

R. S¨ª. Nuestra regulaci¨®n establece que las distintas consejer¨ªas de la Generalitat deben proporcionar los recursos a los centros. Por ejemplo, los maestros que imparten clases a los chavales son siempre funcionarios de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n. Tambi¨¦n sacamos a concurso p¨²blico la contrataci¨®n de los servicios de cocina, de la seguridad y de la limpieza.

P. ?Qu¨¦ problemas ve en el sistema privado?

R. El debate es de car¨¢cter jur¨ªdico. Nosotros creemos que lo mejor es que sea la Administraci¨®n la que ejecute las medidas de privaci¨®n de libertad. Los trabajadores tienen una mayor estabilidad en sus empleos y la responsabilidad ¨²ltima es siempre de la Generalitat a trav¨¦s de sus funcionarios. Si lo dej¨¢ramos en manos privadas podr¨ªamos correr el riesgo de fomentar intereses econ¨®micos en las fundaciones y en las asociaciones, aunque ¨¦stas sean sin ¨¢nimo de lucro. Tambi¨¦n se puede optar por un modelo mixto, que ya se da en algunas comunidades y que permite que, aunque la gesti¨®n sea privada, sea siempre un funcionario el que dirija el centro.

P. Catalu?a tiene s¨®lo siete centros. ?No son pocos para toda la regi¨®n?

R. Podr¨ªa parecer que s¨ª, pero es que intentamos siempre que las medidas de internamiento sean la ¨²ltima soluci¨®n. De cada 10 chicos que han cometido delitos tan s¨®lo uno acaba en un centro de internamiento. Con el resto trabajamos en centros de r¨¦gimen abierto o procuramos la mediaci¨®n, a la que nos instan siempre los fiscales. Pese a todo, es necesario aumentar la capacidad y por eso abriremos dos centros nuevos en breve, cada uno de ellos con 70 plazas.