Comercios al borde de la bancarrota
Juan Jos¨¦ Barrag¨¢n lleg¨® una ma?ana a su tienda de motos de la avenida del Manzanares y la encontr¨® completamente inundada. El agua proced¨ªa de un escape en las obras de construcci¨®n del nuevo colector de la M-30 a su paso por la avenida del Manzanares. Con resignaci¨®n, la fue vaciando. "Con cubos y fregonas, quitando todo el lodo acumulado", cuenta con poco ¨¢nimo de rememorar la historia.
Desde hace un a?o, las obras de la M-30 que tiene enfrente de su comercio han ido reduciendo su volumen de negocio progresivamente. "S¨®lo tenemos a los clientes de siempre", explica preocupado. "Hemos perdido un 30% de las ventas. Pero eso es porque llevamos aqu¨ª 13 a?os, si no ya habr¨ªamos tenido que cerrar", dice, encomend¨¢ndose a la fidelidad de sus clientes.
"Nos han fastidiado la entrada del local, no podemos sacar las motos fuera como sol¨ªamos. Y ahora, encima, quieren cortar las calles laterales por donde acceden la mayor¨ªa de clientes", protesta. "?Sabes qu¨¦ podemos hacer para denunciarlo?", pregunta desesperado.
El Ayuntamiento no ha ofrecido todav¨ªa ninguna compensaci¨®n concreta por las p¨¦rdidas que miles de comercios colindantes a las obras de la M-30 est¨¢n sufriendo. Son los empresarios los que deben acreditar dichas p¨¦rdidas para poder recibir una compensaci¨®n. "Los empresarios no tienen esa informaci¨®n. El Consistorio deber¨ªa recordarlo de igual modo que lo hace cuando es el ciudadano el que tiene que pagar", explica Salvador Bellido, presidente de la Confederaci¨®n de Peque?as y Medianas Empresas (Copyme).
Seg¨²n datos de esta asociaci¨®n, el comercio y los servicios de Madrid situados dentro del per¨ªmetro de la M-30 y aleda?os est¨¢n contabilizando p¨¦rdidas que se cifran en m¨¢s de 500 millones anuales. Las causas que lo originan, seg¨²n ellos, se encuentran en la profusi¨®n de obras que est¨¢n desarroll¨¢ndose en Madrid, incluidas las de la M-30 y la implantaci¨®n de los parqu¨ªmetros.
Copyme considera que estas coincidencias est¨¢n desplazando el consumo a las grandes ¨¢reas comerciales, que son los grandes beneficiarios, ante la incomodidad de desplazamiento y aparcamiento que sufre Madrid en el per¨ªmetro se?alado.
Cerca del taller de Juan Jos¨¦, en la confluencia con la calle del Delf¨ªn, Daniel Roibas, el encargado del taller de coches Automec¨¢nica Manzanares, cuenta los d¨ªas que faltan para que terminen las obras. Quiz¨¢ no le d¨¦ tiempo a ver el final desde el establecimiento donde trabaja. "?P¨¦rdidas? Adi¨®s a un 75% de los clientes", relata. "Algunos clientes ven c¨®mo est¨¢ la calle de mal y vuelven hacia atr¨¢s. Otros ya ni siquiera llegan hasta aqu¨ª, porque en Antonio L¨®pez hay un cartel que dice que la avenida del Manzanares est¨¢ cortada", protesta. "Encima, con la cantidad de polvo y suciedad que levantan las obras, los coches se llenan de porquer¨ªa y tenemos que lavarlos antes de devolverlos", a?ade Daniel.
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