La libertad por 170 millones
GES se libera de Gamesa para prestar servicios por todo el mundo
De las dos divisiones que se ha desprendido Gamesa (la aeron¨¢utica se cedi¨® a Caja Castilla-La Mancha), la de ingenier¨ªa y mantenimiento (Global Energy Systems) ha sido adquirida por sus directivos, con el apoyo de la firma de capital riesgo 3i en una operaci¨®n de 170 millones. Con m¨¢s de 2.100 empleados, GES recupera su independencia con vocaci¨®n de expandirse por el mundo.
GES vuelve a Tarragona, donde surgi¨® en 1982 para prestar servicios de montajes y mantenimiento industriales a las industrias surgidas en torno a su pol¨ªgono industrial.
La escasez de especialistas en paneles solares se agudizar¨¢ con la entrada en vigor, el pr¨®ximo octubre, del C¨®digo T¨¦cnico de la Edificaci¨®n
Pero vuelve con otro perfil. Los 12 ejecutivos que se han hecho con el 23% de la compa?¨ªa, mediante el procedimiento Management by out (MBO) con el concurso del fondo 3i, apuestan por darle una dimensi¨®n m¨¢s amplia que la desarrollada durante los 15 a?os bajo la tutela de Gamesa.
Ricardo Moro Mart¨ªn, su director general, apuesta por acabar el a?o con una facturaci¨®n de 300 millones de euros, 103 m¨¢s que en 2005, y alcanzar en 2010 alrededor de los 600 millones que figuran en el plan estrat¨¦gico de la compa?¨ªa para codearse con Elecnor, Isolux y Cobra.
Gracias a la experiencia adquirida con Gamesa (un 60% del mercado acumulado) en el montaje y mantenimiento de parques e¨®licos en todo el mundo, la "compa?¨ªa dispone de una infraestructura de servicios muy s¨®lida, con un posicionamiento geogr¨¢fico ¨®ptimo", seg¨²n Moro, al que hay que a?adir la prestaci¨®n de estos mismos servicios a otros promotores e¨®licos.
Esta actividad con ser importante -supone el 50% de la facturaci¨®n- no es exclusiva. El 15% seguir¨¢ dedicada al sector petroqu¨ªmico, un 8% a las plantas nucleares y el 5% a las instalaciones solares, que se perfilan como las de mayor crecimiento en el inmediato futuro de Espa?a.
Escuela en Gij¨®n
La propia sede de la compa?¨ªa en Tarrasa y la del Club Deportivo de Reus, con m¨¢s de 10.000 socios, representan el paradigma de ese objetivo. GES ha dotado a los dos edificios de paneles solares capaces de proporcionar tanto la refrigeraci¨®n necesaria durante el verano como la energ¨ªa para el agua caliente sanitaria, la calefacci¨®n y el mantenimiento de las piscinas y las instalaciones hoteleras durante el invierno y resto del a?o. "Y todo por una inversi¨®n que se amortizar¨¢ entre ocho y diez a?os", recalca Moro. "En este campo, en Espa?a deber¨ªamos de ser l¨ªderes mundiales", insiste
La propia GES es la responsable de la instalaci¨®n y el mantenimiento de una planta solar de Gamesa de 25 megavatios de potencia, una actividad donde no se cubren las ofertas de empleo por la escasez de especialistas y que se agudizar¨¢ con la entrada en vigor el pr¨®ximo mes de octubre del nuevo C¨®digo T¨¦cnico de la Edificaci¨®n.
En GES son tan conscientes de este d¨¦ficit que han montado en Gij¨®n una escuela de formaci¨®n para todos sus empleados nacionales, a la que tambi¨¦n acuden trabajadores de Italia, China, Egipto, Marruecos y de otros pa¨ªses donde opera la compa?¨ªa y la propia Gamesa.
La proyecci¨®n de GES fuera de Espa?a sigue las huellas de Gamesa. Est¨¢ presente en Alemania, Italia, Portugal, Hungr¨ªa y Polonia, y cuenta con planes para instalarse en China, Francia y el Reino Unido. En esta expansi¨®n su proyecto m¨¢s ambicioso a corto plazo es su instalaci¨®n en Pensilvania y Texas, en Estados Unidos, a trav¨¦s de una sociedad reci¨¦n creada mediante la que esperan reproducir el mismo esquema de funcionamiento que en Espa?a en actividades e¨®licas y solares. Los gobernadores de ambos Estados mencionados se han propuesto objetivos ambiciosos en energ¨ªa e¨®lica, a la que incentivan con exenciones fiscales. En Pensilvania pretenden instalar 3.000 megavatios y en Texas 5.000, la mitad de los instalados en Espa?a.
Jorge Quemada, director de inversiones de 3i, avala la estrategia de GES, donde su firma tiene "vocaci¨®n de permanencia al menos entre los pr¨®ximos cinco o siete a?os".
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