La suerte suprema del f¨²tbol
En Estados Unidos, donde el f¨²tbol (soccer) les parece lento, violento y con poco movimiento en el marcador, se inventaron unas tandas de pseudopenaltis al final de los partidos. Una forma de animar al p¨²blico.
En Europa, que es donde se ha quedado el Mundial, esta especie de muerte s¨²bita no agrada; ni siquiera a los vencedores. Por culpa de las tandas de penaltis han ca¨ªdo Inglaterra y Argentina. Sus jugadores tiraron mal los penaltis o los porteros de Portugal (Ricardo) y Alemania (Lehman) actuaron muy bien. Aunque se suele decir que los penaltis no se paran, se fallan. Para aprender a tirarlos hay en Internet un mont¨®n de juegos, en donde se combinan fuerza, ingenio y direcci¨®n.
En la p¨¢gina del fabricante de televisores Philips (http://game.fifaworldcup.philips.com) se tiran penaltis en un corral, entre gallinas y perros durmiendo; a medida que se marcan goles, el escenario va subiendo de categor¨ªa, del corral al barrio, y de ¨¦ste al gran estadio. Nuestra labor consiste en darle direcci¨®n y en golpear coincidiendo con la m¨¢xima fuerza de una flecha. Un divertimento simple para cinco minutos de ocio. Lo m¨¢s bonito es el entorno callejero, que nos remite a los tiempos en que se pod¨ªa jugar en cualquier parte.
Tambi¨¦n en un campo de barrio, de tierra y sin p¨²blico, el gran portero italiano Gianluigi Buffon se ofrece a parar nuestros lanzamientos. De entrada intenta desestabilizarnos emocionalmente, haci¨¦ndonos pedorretas. Cuando encaja el primer penalti se cabrea consigo mismo, pega patadas a la porter¨ªa y amenaza teatralmente con irse a su casa. Pero vuelve y, si detiene un disparo, se anima; si detiene el segundo se r¨ªe del lanzador; fallar un tercero es casi imposible a no ser que dispares a las nubes, para nueva mofa de Buffon. Es un juego de la marca deportiva Puma (www.football.puma.com), uno de los m¨¢s entretenidos de los muchos que hay en Red, aunque hay que agradec¨¦rselo a la actuaci¨®n teatral de Buffon, de tal manera que, el otro d¨ªa, cuando realmente se golpe¨® contra el palo, pareci¨® que era una escena m¨¢s del juego virtual.
Tambi¨¦n la BBC (www.bbc.co.uk) incluye un juego para practicar los penaltis. En su caso, el aficionado elige la parte del bal¨®n donde quiere golpear y la fuerza que quiere imprimir. A m¨¢s fuerza, menos precisi¨®n del disparo. Ya lo inclu¨ªa antes de perder su selecci¨®n. Pese a que en algunos casos hay clasificaciones y se sortean entradas, la presi¨®n medi¨¢tica de estos especialistas virtuales nunca llega a semejarse al de los aut¨¦nticos futbolistas. Tampoco el sueldo es el mismo. Ser¨¢ por eso.
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