El maestro en el trigal

La clasificaci¨®n despu¨¦s de la primera jornada da pistas, pero ninguna certeza. Si acaso, la de que todo es mutable, que los que hoy est¨¢n aqu¨ª ma?ana estar¨¢n all¨ª y todas esas cosas sobre lo temporal de la existencia. Hoy, los que est¨¢n ah¨ª, entre los primeros, son Anthony Wall, el hijo de un taxista londinense; Miguel ?ngel Jim¨¦nez, el malague?o que no pudo soportar la frialdad de Estados Unidos; Tiger Woods, que concluy¨® con un eagle [dos golpes menos sobre el par del hoyo] espectacular; Greg Owen, un muchacho ingl¨¦s sin historia ni victorias previas que relatar y el japon¨¦s Fukabori. Todos con cinco golpes bajo par.

Detr¨¢s de ellos, un pelot¨®n con ilustres. Ernie Els y Sergio Garc¨ªa, por ejemplo, que suman un golpe m¨¢s. El primero, el l¨ªder, es un irland¨¦s llamado Graeme McDowell que una vez no pudo participar en el Open porque le castigaron. S¨ª, le tocaba jugar por un asunto de baremos y r¨¢nkings, pero el Royal and Ancient es rencoroso y record¨® que McDowell le hab¨ªa hecho un feo y se hab¨ªa negado a jugar la previa. El a?o pasado qued¨® el und¨¦cimo y el anterior fall¨® el corte.

Severiano Ballesteros concluy¨® con +2, aunque mejor¨® notablemente sus ¨²ltimas actuaciones y algunos especialistas comentaron que su hijo Javier, su caddie, era el "mejor ayudante que ha tenido desde que sali¨® de los puestos altos". El chico, de 16 a?os, se tom¨® su trabajo muy en serio y dio consejos e indicaciones a su padre durante toda la jornada. "Estoy bien, contento, relajado", comento Seve con cara de estar bien, contento y relajado. Chema Olaz¨¢bal firm¨® una tarjeta de 73 golpes, uno sobre el par, y no ten¨ªa tan buena cara.

Ayer, la tierra y la paja del Royal Liverpool ya no echaban humo convertidas en el espejo del sol. Por la noche llovi¨®. "Ha sido importante para los que hemos salido pronto porque no era tan dif¨ªcil de predecir qu¨¦ har¨ªa la bola y se quedaba mucho m¨¢s quieta en los greenes", reconoci¨® Sergio Garc¨ªa. Jim¨¦nez tambi¨¦n alab¨® al desconocido campo de Hoylake y dijo que era un recorrido "noble y franco", un buen chico que no te traiciona: "Si juegas bien, pues te salen bien las cosas", coment¨®. ?l jug¨® bastante bien. El malague?o tambi¨¦n habl¨® sobre la circunstancia de que el ¨²ltimo hoyo sea un par cinco y no un par cuatro, como es cosa habitual en estos campos brit¨¢nicos que est¨¢n junto al mar: "Facilita las cosas si t¨² las has hecho correctamente". Lo cierto, es que hubo una cantidad asombrosa de birdies en los hoyos 16 y 18. Los que llevaban una tarjeta mediocre, arreglaron los n¨²meros en ese tramo final. Los que iban bien, pasaron a ir muy bien. Fue el caso del estadounidense Woods, que comenz¨® el d¨ªa con un bogey [un golpe por encima del par del hoyo] y la extra?a sensaci¨®n de que no ser¨ªa su d¨ªa. Hac¨ªa muecas, ten¨ªa la boca seca, mov¨ªa las manos. Acab¨® con una sonrisa inequ¨ªvoca de felicidad. Hizo un eagle magn¨ªfico en el ¨²ltimo hoyo y cerr¨® la ronda a un golpe del l¨ªder, demostrando una fortaleza psicol¨®gica muy por encima de sus rivales.

Desde luego, mucho mayor que la de Garc¨ªa, que ha reconocido en ocasiones que le pueden la presi¨®n y las expectativas. El castellonense neg¨® que su tarjeta fuera fruto de una mayor relajaci¨®n: "Yo no dir¨ªa eso, a¨²n tengo que mejorar mi juego y trabajar en aspectos concretos para ello. No estoy completamente satisfecho", dijo el espa?ol.

Resultados: 1. G. McDowell (Irl.), 66 golpes (-6). 2. G. Owen (Ing.), A. Wall (Ing.), M. ?. Jim¨¦nez, K. Fukabori (Jap.) y T. Woods (EE UU), 67. 7. M. Fraser (Aus.), S. Ho (Cor.), M. Clonen (Fin.), M. Hensby (Aus.), S. Garc¨ªa, M. Weir (Can.), E. Els (Sur.), J. Furyk (EE UU), T. Lehman (EE UU), C. Petterson (Sue.), A. Scout (Aus.), B. Crane (EE UU) y B. Runford (Aus.), 68. 33. Fdez-Casta?o, 70. 92. Olaz¨¢bal, 73. 107. Ballesteros, 74.