S¨®lo casas y m¨¢s casas

Unas 25.000 familias viven ya en los desarrollos urban¨ªsticos de Madrid: Montecarmelo, Las Tablas, Sanchinarro y Carabanchel. La Administraci¨®n (Ayuntamiento, Comunidad y Gobierno central) prev¨¦ dotar a las nuevas zonas urban¨ªsticas de todos los servicios, pero a¨²n queda mucho trabajo por hacer. Mientras, los vecinos se sienten aislados. Seg¨²n ¨¦stos, faltan colegios, polideportivos, bibliotecas... Adem¨¢s, no hay ning¨²n centro de salud en funcionamiento. Los vecinos protestan por la falta de infraestructuras, comercios y transportes. Y se quejan de que durante las vacaciones y los fines de semana los nuevos barrios parecen un desierto. Reclaman m¨¢s polic¨ªas, pero califican como bueno el servicio de limpieza.

Los vecinos de los nuevos barrios est¨¢n cansados de vivir en una zona donde los pisos se han multiplicado m¨¢s r¨¢pido que los servicios que reciben. Decenas de gr¨²as y esqueletos de edificios en construcci¨®n constituyen el paisaje de los nuevos barrios. En Madrid existen cuatro grandes barrios en desarrollo donde se alojan desde hace unos meses m¨¢s de 70.000 madrile?os. Cuando est¨¦n terminados acoger¨¢n a m¨¢s de 120.000 personas.

"Sobre todo, falta informaci¨®n", cuenta Ana Navarro, vecina de Sanchinarro desde hace un a?o. "No hay nada. Nos imaginamos lo que van a hacer por los carteles de los solares". Navarro se queja por la escasez de locales comerciales que existe en todo el Plan de Actuaci¨®n Urban¨ªstica (PAU). "S¨®lo hay dos grandes centros comerciales. No tenemos tiendas. La gente viene cargando con las bolsas de la compra desde Madrid".

Ram¨®n Silva, edil socialista, dice que en el barrio s¨®lo existe un hospital privado. "Hace cuatro a?os que el Ayuntamiento cedi¨® a la Comunidad un solar para que levantara un centro de salud. Y todav¨ªa nada". Silva denuncia que en el nuevo planeamiento no hay escuelas infantiles "ni privadas ni p¨²blicas". El a?o pasado entr¨® en funcionamiento un colegio, pero s¨®lo el ¨¢rea de primaria. "No hay ning¨²n instituto, los vecinos nos vemos obligados a llevar a los ni?os a alg¨²n centro de Hortaleza", dice Ana Navarro. Silva cuenta que "tampoco hay centros de mayores, ni bibliotecas, ni polideportivos. Tan s¨®lo dos pistas deportivas elementales".

Ana Navarro reconoce que la polic¨ªa ha incrementado su presencia en la zona tras las constantes denuncias de los vecinos. Pero carecen de comisar¨ªa propia. "Hab¨ªa muchos robos en viviendas, en garajes y en los coches", cuenta. "Lo peor de todo es el transporte. El autob¨²s que pasa por aqu¨ª hace ahora un recorrido mucho m¨¢s largo, porque pasa por El Corte Ingl¨¦s", se queja. "Los fines de semana esto es un desierto", protesta amargamente.

En Montecarmelo, las cosas no son muy diferentes. Ahora viven unas 12.000 personas en el barrio, cuenta Alberto Navazo, presidente de la asociaci¨®n de vecinos. Navazo dice que hay muchas menos personas censadas de las que est¨¢n viviendo en el barrio: "Como aqu¨ª a¨²n no hay servicios, tienen miedo a perder los derechos de su empadronamiento para los colegios, centro de salud, etc¨¦tera".

Pedro S¨¢nchez, concejal socialista, denuncia que las "nuevas ciudades se han hecho con improvisaci¨®n". Y enumera los servicios pendientes para el barrio: "En Montecarmelo y Las Tablas no hay centro de salud (aunque el Ayuntamiento ya ha cedido una parcela). Los vecinos reclaman un instituto. Tampoco hay nada para mayores. Y el centro cultural est¨¢ previsto para la pr¨®xima legislatura". S¨¢nchez define estos barrios como "islas urban¨ªsticas no integradas con la ciudad".

Alberto Navazo critica la limpieza del barrio. "Hay muchas obras que generan muchos desperdicios". Tambi¨¦n se queja del transporte. "Pedimos un b¨²ho [un autob¨²s nocturno] para que la gente pueda salir por la noche". Y agrega: "Hay poca presencia policial. Hay problemas de inseguridad porque el poblado marginal de La Quinta est¨¢ cerca". El representante de los vecinos de Montecarmelo dice que "hab¨ªa muchas zonas verdes, pero ahora est¨¢n abandonadas".

El Ayuntamiento de Madrid invierte 24 millones de euros al a?o en recogida de residuos y limpieza viaria en los nuevos barrios. Adem¨¢s, ha destinado 147 millones en mejorar los accesos a los nuevos PAU.

En Carabanchel, fuentes socialistas apuntan que s¨®lo hay un colegio p¨²blico, "pero no hay escuelas infantiles, no hay centros de salud. Hay un cartel que anuncia la construcci¨®n de un polideportivo desde hace tiempo, pero a¨²n no hay nada". "Se ha hecho el ladrillo primero y luego se ha olvidado el resto", protesta Lorenzo ?lvarez, presidente de la asociaci¨®n de vecinos de Las Tablas. "?ste es un PAU dise?ado para uso exclusivamente residencial. No hay mercado municipal, tenemos que coger el coche para todo. Hay muchos solares para construir infraestructuras p¨²blicas, pero todav¨ªa no hay nada", remacha.

Seg¨²n ?lvarez, el desarrollo del barrio deber¨ªa ser paralelo a la construcci¨®n de viviendas. "No hay una biblioteca donde leer un libro, ni un polideportivo donde llevar a los ni?os a jugar".

La Comunidad ha anunciado que los nuevos barrios tendr¨¢n 2.400 nuevas plazas escolares para el pr¨®ximo curso, donde cada nuevo barrio tendr¨¢ un colegio en funcionamiento.