Plut¨®n y compa?¨ªa

Al parecer, nos quedamos sin Plut¨®n. Con lo bien que sonaba la lista de planetas acabando en esa ¨®n de Plut¨®n... A cambio, no han ampliado la lista a 12. Hubieran sido demasiados y ya nadie tiene memoria para retener tantos. Pobre Plut¨®n. Lo quer¨ªan salvar los americanos, porque para eso lo consideraban su planeta -no en vano lo descubrieron en 1930-, pero no pudo ser. Lo han echado por peque?o. Cualquier d¨ªa de estos echan tambi¨¦n al del Principito. Vaya modales. Claro que a los astr¨®logos les ha sentado peor, porque si les falta en el cielo un planeta a ver c¨®mo predicen. Cabe suponer que a partir de ahora predecir¨¢n a la baja. Nos esperan tiempos muy duros. Leer el hor¨®scopo se va a convertir en una labor de titanes. Hay que tener est¨®mago para leer de par de ma?ana que a uno le va a ir m¨¢s bien mal en amor, trabajo y dinero y empezar la jornada como si tal cosa. Se van a notar en las oficinas. Preveo -sin necesidad de recurrir a cartas astrales- semblantes muy sombr¨ªos. Nada de ese alegre compa?erismo al que ya le dio una buena pu?alada la prohibici¨®n de fumar. Y como se instale la melancol¨ªa, que Dios nos coja confesados. Los astr¨®nomos ten¨ªan que hab¨¦rselo pensado mejor antes de desahuciar al pobre Plut¨®n, porque la econom¨ªa se va a resentir. Y mucho. Lo que me extra?a es que todav¨ªa no se haya puesto un poco m¨¢s por las nubes el barril de petr¨®leo, porque los barriles de petr¨®leo son los grandes detectores de la marcha del mundo.

Y es que no ganamos para disgustos. Por si no tuvi¨¦ramos bastante con la extinci¨®n de Plut¨®n, resulta que han echado a otro astro, Tom Cruise. Las malas lenguas dicen que Pen¨¦lope Cruz lo vio venir y que por eso se separ¨®. ?Qu¨¦ pintaba ella con un parado? Pero no seamos as¨ª, amigos, me refiero a tan mal pensados. Por el contrario, pensemos en positivo. Ahora que Cruise est¨¢ disponible, podr¨ªamos invitarle a venir, porque en su doble condici¨®n de cienci¨®logo -toma ya- y de experto en misiones imposibles nos vendr¨ªa de perlas. Lo digo por c¨®mo anda Batasuna. En el Gobierno est¨¢n muy equivocados pidi¨¦ndoles as¨ª, por las buenas, que dejen de ser lo que fueron y lo que, en realidad, siguen siendo. Y est¨¢n muy equivocados, porque la esencia del nacionalismo es la continuidad con lo que son desde tiempos ancestrales y la comuni¨®n con las hondas ra¨ªces de la piedra -y con su edad-; es decir, que Batasuna se ve a s¨ª misma como un continuum que la une a todos los que lucharon contra los invasores de una tierra que consideran sagrada y que, pasando por los que luchan ahora mismo, la proyecta hacia un futuro en que no haya necesidad de luchar m¨¢s, porque la tierra de los antepasados por fin ser¨¢ libre. Como para decirles que se olviden de todo eso para acogerse a una legalidad que encima consideran impuesta...

Dec¨ªa que se podr¨ªa intentar con Tom Cruise, pero a lo mejor ni siquiera ¨¦l tiene ¨¦xito. No importa. Tiempo tendremos de ced¨¦rselo a Madrazo para que promocione esas viviendas imposibles que se trae entre manos. Pero si nos falla Tom Cruise y deserta Plut¨®n, el gobernador de los infiernos, no s¨¦ qu¨¦ ser¨¢ de nosotros, porque si por las buenas no hay tu t¨ªa no veo c¨®mo se pueda convencer a Batasuna por las malas. Sin contar con que siempre les quedar¨¢ la posibilidad de poner en pie m¨¢s Tierras Vascas Manifestantes convirtiendo el Parlamento en un simulacro de representaci¨®n o, mejor dicho, en un teatro, porque all¨ª se va a representar mucho, demasiado. Yo, de hecho, me miro y ya no s¨¦ qui¨¦n soy en medio de esta sociedad en que nadie es lo que parece, empezando por los que no siendo Batasuna se manifiestan para que Batasuna se manifieste. Lo confieso, no entiendo nada. En cuanto empiece el curso me apunto a un taller de algo. Una muchacha que participaba en el simposio mundial de matem¨¢ticas ya lo dijo el otro d¨ªa: "Las matem¨¢ticas son m¨¢s abstractas de lo normal". Y como esto tambi¨¦n se va volviendo m¨¢s abstracto de lo normal, igual me apunto a Plut¨®n. Porque tampoco est¨¢.