El crecimiento de Am¨¦rica Latina palidece ante la efervescencia asi¨¢tica

Latinoam¨¦rica funciona mejor que nunca, pero sus n¨²meros palidecen ante la pujanza de otras regiones emergentes y, en particular, del sureste asi¨¢tico. La econom¨ªa latinoamericana creci¨® el 4,3% en 2005 y cerrar¨¢ este a?o con una tasa superior al 4% por cuarto a?o consecutivo. Pr¨¢cticamente todas las grandes variables apuntalan una situaci¨®n macroecon¨®mica sin parang¨®n en los ¨²ltimos 25 a?os. Pero aun as¨ª las dudas sobrevuelan la zona. "El episodio de volatilidad de los meses de mayo y junio en las bolsas", afirma el Banco de Espa?a en su ¨²ltimo informe semestral sobre la zona, "demuestra que la vulnerabilidad de la regi¨®n subsiste de un modo latente". En la memoria permanece a¨²n fresco el poso dejado por las sucesivas crisis de la ¨²ltima d¨¦cada: el tequilazo mexicano (1995), el efecto samba brasile?o (1999) y el corralito argentino (2002).

La reactivaci¨®n del cr¨¦dito y la fortaleza del consumo se han convertido en los motores de la econom¨ªa de la regi¨®n

El problema de la desigualdad y de la distribuci¨®n de la riqueza sigue siendo una de las grandes asignaturas pendientes

Las incertidumbres pol¨ªticas siguen preocupando al FMI, en especial por los episodios de populismo en algunos pa¨ªses

"Las incertidumbres pol¨ªticas siguen preocupando", asegura el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el World Economic Outlook de 2006. "La lenta reducci¨®n de la pobreza ha alimentado las frustraciones en amplias capas de poblaci¨®n" y alimenta las veleidades populistas de la regi¨®n, con Venezuela y Bolivia a la cabeza, seg¨²n el organismo que tiene como director gerente a Rodrigo Rato.

Las sombras, sin embargo, no esconden un presente en el que predominan las luces. La situaci¨®n econ¨®mica se beneficia de un entorno internacional favorable, marcado por la abundancia de liquidez, los bajos tipos de inter¨¦s y el alza de precios de las materias primas. Y el crecimiento se produce de forma simult¨¢nea al super¨¢vit de la balanza comercial y al saneamiento de las finanzas p¨²blicas. "La coyuntura es excepcional", apunta Guillermo de la Dehesa, presidente del Centre for Economic Policy Research. "El ¨²nico problema es que la costa asi¨¢tica del Pac¨ªfico crece m¨¢s aprisa, y desv¨ªa la atenci¨®n de los inversores", concluye.

La fortaleza del consumo ha tirado de la econom¨ªa latinoamericana en el primer semestre de 2006, apoyada por la fuerte reactivaci¨®n del cr¨¦dito. La tasa de inflaci¨®n sigue su senda descendente -los precios crecer¨¢n una media del 6% este a?o-, y los Gobiernos de la zona han aprovechado el tempo econ¨®mico para reducir la deuda externa considerablemente. ?Por qu¨¦ no crece entonces Latinoam¨¦rica m¨¢s r¨¢pidamente?

Los expertos apuntan a dos factores clave. "La tasa de ahorro es muy baja, a diferencia de lo que pasa en China y la mayor¨ªa de los dragones asi¨¢ticos", apunta De la Dehesa. Los observadores internacionales coinciden en un segundo d¨¦ficit: la falta de estabilidad y de reformas estructurales. Las prioridades deben incluir reformas fiscales que permitan acometer "un mayor gasto p¨²blico en infraestructuras y programas sociales", seg¨²n el FMI. Sin olvidar "mejoras en el funcionamiento del sistema financiero; m¨¢s apertura exterior, y mayor flexibilidad en el mercado de trabajo", prosigue el informe del Fondo, un organismo cuestionado en la regi¨®n tras calificar con un sobresaliente alto las recetas econ¨®micas aplicadas por Argentina justo antes de la crisis del corralito. As¨ª lo ha explicado repetidas veces Joseph Stiglitz, Nobel de Econom¨ªa y ex economista jefe del Banco Mundial.

El ¨²ltimo episodio de turbulencias en los mercados, cerrado a finales de junio, afect¨® de un modo acusado a varios pa¨ªses emergentes, pero s¨®lo se dej¨® sentir moderadamente en Am¨¦rica Latina, en contraste con episodios anteriores. Tanto el Banco de Espa?a como el FMI sugieren una lectura doblemente positiva de esta situaci¨®n: "Demuestra la mejora de los fundamentos econ¨®micos y financieros en estos pa¨ªses y, al mismo tiempo, alerta sobre la necesidad de perseverar" en pos de una mayor ortodoxia econ¨®mica, seg¨²n el banco central.

A pesar de las tasas de crecimiento, el problema de la desigualdad y la pobreza sigue vigente. Los pobres latinoamericanos son tan pobres como los de otras zonas del mundo -aunque son muchos m¨¢s: el 40% de la poblaci¨®n, unos 200 millones de personas-, pero los ricos son mucho m¨¢s ricos, seg¨²n el venezolano Ricardo Hausman. "El crecimiento actual no es suficiente para resolver este problema", apuntaba el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, en una visita reciente a Barcelona. "La mala distribuci¨®n de los ingresos es un problema que engloba todos los dem¨¢s", advert¨ªa.