Un solo hombre contra la corrupci¨®n

Apenas comenzaron a filtrarse los recientes esc¨¢ndalos de corrupci¨®n de Siemens, la compa?¨ªa se apresur¨® a ponerle coto al da?o a su imagen: hizo saber que un abogado de un conocido bufete de N¨²remberg ser¨¢ su ombudsman anticorrupci¨®n. Se trata de una figura que en Alemania funciona con ¨¦xito en unas pocas empresas desde hace siete a?os. Lo instaur¨® la Deutsche Bahn, la compa?¨ªa de ferrocarriles, en la figura de Rainer Buchert.

No extra?a que est¨¦ tan extendida esta costumbre de sobornar si se tiene en cuenta que, hasta finales de los a?os noventa, el soborno se pod¨ªa incluir en Alemania como un gasto m¨¢s. A juicio de Casper von Hauenschild, miembro de la presidencia de la secci¨®n nacional alemana de Transparencia Internacional (TI), es imposible hacer una estimaci¨®n del coste que tiene la corrupci¨®n para las empresas alemanas, aunque aventura que la cifra podr¨ªa situarse entre los 10.000 y los 100.000 millones de euros.

En el caso de Siemens, comienza a salir a la luz el sistema internacional de sobornos que manten¨ªan empleados de la empresa, con el que desviaron unos 200 millones de euros a cuentas secretas en el extranjero. DaimlerChrysler est¨¢ siendo investigado desde 2004 por la supervisi¨®n burs¨¢til estadounidense (SEC) por una red similar.Un ex ejecutivo de compras de BMW ha sido condenado a tres a?os de c¨¢rcel por sobornos a cambio de contratos de suministro de repuestos. Y Volkswagen ocup¨® el verano pasado los titulares por un asunto de empresas fantasma, aderezado con una jugosa trama de pago de viajes y prostitutas a los miembros del comit¨¦ de empresa.

Poco despu¨¦s de que saliera a la luz este asunto de Volkswagen, la empresa contrat¨® a Rainer Buchert, que hab¨ªa ayudado a destapar casos de corrupci¨®n en Deutsche Bahn durante seis a?os. "De los m¨¢s de 400 casos de corrupci¨®n que pasaron por mis manos, alrededor de un tercio acabaron en condena judicial", asegura Buchert, que hoy presta este servicio tambi¨¦n para otras empresas. "Al recibir el aviso hago algunas comprobaciones, sobre todo para asegurarme de la credibilidad del denunciante y de que no es un acto de venganza sin fundamento".

Tras una entrevista personal con el denunciante, pasa la informaci¨®n a la empresa, que se hace cargo de la investigaci¨®n y, en caso necesario, la remite a la justicia. El nombre del denunciante no trasciende, y ah¨ª radica la ventaja del ombudsman. "El 80% de las personas que han venido a m¨ª nunca hubiesen acudido a la empresa directamente", dice Buchert, que asegura que su trabajo le ahorr¨® a Deutsche Bahn decenas de millones de euros, sin contar la suma que la empresa dej¨® de perder al poner fin a las corruptelas investigadas. En Volkswagen, Buchert recibe denuncias de todo el mundo, una de ellas de Espa?a, asegura, pero no da m¨¢s informaci¨®n sobre el asunto dado que hay una investigaci¨®n en curso.

El caso Siemens parece haber tenido efecto sobre los empresarios alemanes, pues al "Dr. Buchert", como el ombudsman se presenta en su p¨¢gina web, le han llegado en las ¨²ltimas semanas solicitudes de decenas de empresas para un asesoramiento sobre c¨®mo implantar un sistema anticorrupci¨®n con la figura de un ombudsman.