El resto de autonom¨ªas rechaza bomberos privados

La externalizaci¨®n de los parques comarcales desarrollada en Galicia durante los ¨²ltimos a?os es un caso ins¨®lito en los servicios de emergencias espa?oles. Ninguna otra comunidad, diputaci¨®n o consorcio ha puesto el servicio de bomberos en manos de empresas privadas. Para encontrar una experiencia similar hay que remontarse a los inicios del Consorcio de Toledo, que en el a?o 2002 decidi¨® adjudicar la gesti¨®n de los parques provinciales a la empresa Lainsa. El experimento dur¨® apenas a?o y medio hasta que la Diputaci¨®n provincial rescat¨® el servicio p¨²blico.

Actualmente Cantabria mantiene un operativo de extinci¨®n mixto cuya contrataci¨®n corresponde a una sociedad semip¨²blica, Servicio de Emergencias de Cantabria (Semca) con 67 agentes y siete parques de emergencias.

En gran parte de las autonom¨ªas, la privatizaci¨®n de los bomberos est¨¢ prohibida por ley. En Andaluc¨ªa, Navarra, Arag¨®n y Madrid las normativas establecen que los cuerpos de prevenci¨®n y extinci¨®n de incendios deben estar formados por funcionarios. En las leyes catalana y vasca los bomberos tienen adem¨¢s la consideraci¨®n de agentes de la autoridad, lo que les confiere potestad para evacuar edificios, cortar el tr¨¢fico o desalojar calles en caso de cat¨¢strofe.

Ni una ni otra calificaci¨®n aparecen en el anteproyecto de Ley de Emergencias que el jueves aprob¨® el gobierno gallego. Tal y como est¨¢ redactado, el texto no estipula la regulaci¨®n del servicio de extinci¨®n y salvamento en la comunidad. De aprobarse en estos t¨¦rminos, la norma avalar¨ªa la continuidad de los 15 parques privados que ya operan en Galicia y de los otros seis que la Xunta y los distintos consorcios pretenden inaugurar el a?o pr¨®ximo. Ser¨ªa la consagraci¨®n legal de un modelo que no tiene parang¨®n en el resto de Espa?a.

Distintos modelos

En Catalu?a por ejemplo la Generalitat cuenta con 2.346 bomberos funcionarios repartidos en 180 parques. All¨ª, desde hace a?os, funciona la figura del bombero voluntario, personal que debe estar localizable para actuar en caso de cat¨¢strofe y que cobra seg¨²n las horas realizadas. Algo parecido sucede en el Pa¨ªs Vasco, donde los 900 agentes son contratados por las diputaciones . Junto a los bomberos profesionales operan voluntarios cuya formaci¨®n asume el Gobierno Vasco. En la Comunidad de Madrid, la que m¨¢s ha profesionalizado el servicio de emergencias, los 1.400 bomberos dependen directamente de la Administraci¨®n Auton¨®mica que gestiona 19 instalaciones. Los 400 agentes asturianos contratados por el Gobierno regional tienen la categor¨ªa de personal laboral.