El empoll¨®n Tremps
Los amigos de juventud del magistrado destacan su independencia
"La primera obligaci¨®n de un jurista es estudiar. Y si no ten¨¦is tiempo para el partido, pues no durm¨¢is, pero estudiad". Corr¨ªa el a?o 1976 y la universidad espa?ola era un hervidero en la lucha por la recuperaci¨®n de la libertad. Pablo P¨¦rez Tremps ten¨ªa entonces 20 a?os y cursaba segundo de Derecho en la Complutense de Madrid. El magistrado del Tribunal Constitucional recusado esta semana por seis de sus compa?eros era hace 30 a?os un alumno aplicado que alentaba a sus compa?eros a que dedicasen m¨¢s tiempo al estudio y menos a la pol¨ªtica.
"?Tiene narices que le hayan hecho eso a ¨¦l! Desde que le conozco siempre ha llevado a gala su independencia y nunca quiso militar en ning¨²n partido", explica Cristina ?lvarez Baquerizo, compa?era de promoci¨®n de P¨¦rez Tremps. "Yo estaba en el PCE y nunca le pudimos pillar. Ni nosotros ni los del PSOE", recuerda. Pero a la hora de la verdad "se pon¨ªa detr¨¢s de la pancarta, ayudaba a hacer carteles y siempre nos dejaba los apuntes. Era un empoll¨®n, pero de los que no resultan repelentes. Eso lo diferenciaba de los estudiantes fachas", explica la compa?era de promoci¨®n. Aquella hornada de estudiantes de Derecho se denomin¨® de la promoci¨®n constituyente, en recuerdo del proceso hist¨®rico que se viv¨ªa en Espa?a. Y es que quienes por la ma?ana buscaban el consenso pol¨ªtico en las Cortes, acud¨ªan por la tarde a impartir clases de Derecho, por lo que P¨¦rez Tremps y sus compa?eros tuvieron como profesores a Joaqu¨ªn Ruiz Gim¨¦nez, Gregorio Peces-Barba, I?igo Cavero o Jordi Soler Tura. "?Un lujazo!", puntualiza Cristina ?lvarez Baquerizo.
Los abogados de su promoci¨®n le recuerdan como brillante, pero "nada repelente"
"Yo estaba en el PCE y nunca le pudimos pillar", recuerda una compa?era del jurista
La compa?era de promoci¨®n no tiene reparos en admitir que muchos de aquellos estudiantes "¨ªbamos justillos". Por eso recuerdan a P¨¦rez Tremps con un nivel acad¨¦mico por encima de la media. "?En primero de derecho pol¨ªtico ya preguntaba a los profesores por el Estatuto de Autonom¨ªa Vasco de la Rep¨²blica. Se hab¨ªa le¨ªdo los textos y sab¨ªa de qu¨¦ hablaba".
En aquellos tiempos convulsos, desde la muerte de Franco a las primeras elecciones democr¨¢ticas de 1977, los estudiantes sospechosos de militar en el PCE eran arrestados cuando llegaban los ex¨¢menes. Cristina fue una de ellas y lleg¨® a pasar hasta tres meses en prisi¨®n, pero aprob¨®. P¨¦rez Tremps intercedi¨® para que los profesores acudiesen a la c¨¢rcel a examinarla.
Fueron tiempos de represi¨®n pol¨ªtica y policial y algunos de aquellos episodios oscuros nunca se llegaron a aclarar. Uno de los m¨¢s conocidos fue el crimen de Almer¨ªa, en el que Javier Verdejo, de 19 a?os, fue abatido a tiros por la Guardia Civil la madrugada del 14 de agosto de 1976. Estaba realizando una pintada con la expresi¨®n "Pan, trabajo y libertad", pero fue sorprendido y ech¨® a correr, por lo que los guardias civiles abrieron fuego contra ¨¦l. El crimen qued¨® impune y en ello colabor¨® Roberto Garc¨ªa-Calvo, entonces gobernador civil de Almer¨ªa y jefe Provincial del Movimiento. Garc¨ªa-Calvo ha acabado en el Tribunal Constitucional, a propuesta del PP, y fue uno de los seis magistrados que han votado a favor de la recusaci¨®n de P¨¦rez Tremps al considerar que su imparcialidad estaba cuestionada y que deb¨ªa ser apartado de los debates sobre la constitucionalidad del Estatuto porque hab¨ªa realizado un informe para la Generalitat.
La promoci¨®n constituyente se licenci¨® en 1978, el a?o en que se aprob¨® la Carta Magna, y P¨¦rez Tremps no se movi¨® de la Complutense. Ese mismo a?o empez¨® a impartir clases como profesor ayudante de derecho pol¨ªtico y obtuvo una diplomatura en Sociolog¨ªa pol¨ªtica en el Centro de Estudios Constitucionales. En 1986 pas¨® a ser profesor titular, y entre 1986 y 1987 fue el secretario del Consejo Social de esa universidad.
En 1991 alcanz¨® la c¨¢tedra de Derecho Constitucional Universidad de Extremadura, donde fue decano de la facultad de Derecho de 1992 a 1994. En 1998 obtuvo la c¨¢tedra de la misma especialidad en la facultad de Ciencias Jur¨ªdicas y Sociales de la Universidad Carlos III de Madrid. Eso le vali¨® las bromas de sus compa?eros de promoci¨®n en la cena anual que segu¨ªan realizando. ?lvarez Baquerizo, ahora especializada en derecho medioambiental, era de las que m¨¢s se cebaba con P¨¦rez Tremps, pero hace cinco a?os hizo de tripas coraz¨®n y acudi¨® a ¨¦l para pedirle un dictamen de un asunto. "?A ver si ahora hemos de ser los catedr¨¢ticos quienes ayudemos a los ecologistas", le espet¨® el reconocido jurista. "No s¨®lo acept¨® redactar el informe, sino que lo firm¨® ¨¦l mismo y no cobr¨® nada", explica la abogada.
Pablo P¨¦rez Tremps (Madrid, 1956) es hijo de magistrado y est¨¢ casado con una abogada especializada en derecho comunitario. Fueron padres en edades tard¨ªas y tienen dos hijas y un hijo. Es habitual que el jurista acompa?e a sus hijos al colegio cada ma?ana y tampoco es extra?o verle a media tarde haciendo la compra en el supermercado. Es un hombre muy celoso de su vida personal y su n¨²cleo m¨¢s cercano de amigos colabora de manera decidida a mantener esa intimidad. Esta semana adem¨¢s, estaba afectado por un proceso gripal que le ha llevado a recluirse todav¨ªa m¨¢s.
Su tesis doctoral, titulada Tribunal Constitucional y Poder Judicial, obtuvo en 1984 el premio Nicol¨¢s P¨¦rez Serrano y diversos constitucionalistas coinciden en que es un libro de referencia obligada. Desde entonces ha publicado infinidad de ensayos en tres ramas: derecho comunitario, justicia constitucional y financiaci¨®n auton¨®mica. Precisamente porque se le consideraba una voz muy autorizada, el Instituto de Estudios Auton¨®micos de la Generalitat pens¨® en ¨¦l para realizar uno de los diez estudios encargados sobre diferentes materias antes de que se iniciara el proceso de redacci¨®n del Estatuto. Un estudio que, a la postre, puede truncar el mandato de nueve a?os como magistrado del Tribunal Constitucional para el que fue nombrado por el Consejo de Ministros el 4 de junio de 2004.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.