Cargas de profundidad bailables
Hidrogenesse confirma con 'Animalitos' la desconcertante inteligencia de su m¨²sica
?Qu¨¦ resultar¨ªa de un cruce entre la electr¨®nica militante de Kraftwerk y el lirismo seco de Leonard Cohen? ?Entre el cabar¨¦ y ?lvaro Pombo? ?Entre un poeta ir¨®nico y un bater¨ªa explosivo que miran juntos un documental de La 2? La respuesta es Hidrogenesse, un d¨²o barcelon¨¦s formado por Carlos Ballesteros (cantante) y Gen¨ªs Segarra (instrumentista polifac¨¦tico y 50% de otro d¨²o, Astrud, que en estos d¨ªas ultima su nuevo disco). Ellos se definen como grupo de "art-rock electr¨®nico, compositores de canciones pop populistas, autores de llenapistas situacionistas", y algo de todo eso hay en su segundo elep¨¦, Animalitos (Austroh¨²ngaro).
Hace ya cinco a?os que debutaron con Gimn¨¤stica passiva, una fulgurante presentaci¨®n que, entre otras cosas, se atrev¨ªa a poner envoltorio pop al poema m¨¢s laber¨ªntico de la literatura espa?ola, el Polifemo de G¨®ngora. En aquel disco contaron en una canci¨®n con el concurso de Alfonso Melero, bater¨ªa de Hello Cuca, que en Animalitos ha grabado todos los ritmos. "Quer¨ªamos sonar", afirma Segarra, "como los discos que m¨¢s hemos escuchado ¨²ltimamente: el glam de los setenta, Gary Glitter, que grababa con dos bater¨ªas a la vez, o La D¨¹sseldorf, que eran ritmo y concepto, se adelantan al punk. Ten¨ªamos una libreta con ideas y una serie de ritmos que quer¨ªamos usar. Estaba tan claro que hicimos todas las canciones en una semana".
"Somos compositores de pop populista, autores de llenapistas situacionistas"
Segarra y Ballesteros pasaron dos a?os viviendo en los setenta. Adem¨¢s, a la m¨²sica de esa d¨¦cada a?adieron el cine: Visconti, Pasolini y, sobre todo, Fassbinder. Vieron todas las pel¨ªculas que encontraron del director germano y viajaron en coche a Alemania: "Nunca viajamos y la gente nos dec¨ªa que fu¨¦ramos a Berl¨ªn, pero nos fuimos a M¨²nich, una ciudad pija, como Barcelona, burguesita, con sus cosas cucas y sus tiendas de l¨¢mparas". En Baviera visitaron la tumba de Fassbinder y los delirantes castillos de Luis II, el rey wagneriano. A la vuelta compusieron Schloss (castillo, en alem¨¢n), que condensa en tres minutos lo que a Visconti le llev¨® cuatro horas en Ludwig y que en un mundo ideal ser¨ªa la canci¨®n del verano.
Con todo, la m¨²sica del d¨²o barcelon¨¦s est¨¢ llena de cargas de profundidad bailables. En su primer disco incluyeron un peque?o tratado de sociolog¨ªa en forma de canci¨®n titulada No me digas que no hay nada m¨¢s triste que lo tuyo, que relataba las miles de cosas que son mucho peor que las cuitas de cada uno. Los turnos de noche en una f¨¢brica, sin ir m¨¢s lejos. Carlos Ballesteros conoce de primera mano tanto esos turnos como el absurdo laboral retratado ahora en El poder de mis tejanos: "Son cosas que est¨¢n a la orden del d¨ªa, pero que no vemos en las canciones que se oyen por ah¨ª", afirma Ballesteros. "Al final", a?ade Segarra, "quieres hacer una canci¨®n para cantar cuando est¨¢s solo y que diga eso. Es un deseo pol¨ªtico, no est¨¦tico. Kraftwerk tienen eso. Hacen cr¨ªtica sin hacer panfletos. Nos interesa ese punto entre la belleza y la cr¨ªtica".
Hidrogenesse trata, dicen ellos, de seguir un consejo de Momus, el cantautor escoc¨¦s: hacer canciones sobre "cosas que te irritan y te desconciertan". De ah¨ª surgi¨® Vamos a casarnos, una canci¨®n construida con las excusas de sus amigos para contraer matrimonio: "La gente empez¨® a casarse a nuestro alrededor. No pod¨ªamos creerlo. No pusimos, eso s¨ª, el motivo m¨¢s absurdo de todos: porque ahora podemos". M¨¢s pol¨ªtica. El disco se abre con Caballos y ponis, un tema sobre la mezcla de animales de distintas especies: "Mientras corre la sangre somos lo mismo", sostiene Segarra. "Carlos es veterinario, y cuando ve¨ªamos a un hombre muy alto con una mujer bajita me dec¨ªa, en broma, que era una pareja 'inviable', vamos que no tendr¨ªan hijos, como los cruces entre mulos y burros. Nosotros, como pareja gay estamos en ese caso. Esa canci¨®n es una reivindicaci¨®n de que todo vale. Cuando dos personas se ponen de acuerdo en algo tiran para adelante, y qui¨¦n les va a decir que por una ley biol¨®gica lo suyo no es viable".
De d¨²os viables, por cierto, est¨¢ llen¨® el cat¨¢logo de Austroh¨²ngaro, el sello que Segarra y Ballesteros -que hoy presentan su nuevo disco en directo en Barcelona- montaron para acoger sus propios proyectos y los de Astrud, Chico y Chica, Mano de Santo o Feria: "Nosotros s¨®lo organizamos la log¨ªstica, no la creatividad de la gente. Si fu¨¦ramos muy valientes, dejar¨ªamos de sacar discos y lo colgar¨ªamos todo en Internet. Pero no tenemos mentalidad de negocio y sentimentalmente somos antiguos. Nos gustan los productos que tienen portada y libreto [el de Animalitos recoge una peque?a colaboraci¨®n de ?lvaro Pombo]. As¨ª es que somos un sello en la peor ¨¦poca para ser un sello y sacamos discos cuando nadie los compra".
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