Un pueblo de Toledo planea 20.000 viviendas a 15 kil¨®metros de la macrociudad de Sese?a
El Ayuntamiento socialista de Illescas proyecta parte del residencial en terrenos protegidos
La comarca toledana de la Sagra va camino de convertirse en la del ladrillo. En Illescas, localidad de 17.000 habitantes a 30 kil¨®metros de Madrid, el Ayuntamiento (PSOE) est¨¢ tramitando un inmenso proyecto urban¨ªstico: la recalificaci¨®n de 4,5 millones de metros cuadrados de suelo, 560.000 de los cuales son protegidos, para construir m¨¢s de 20.000 viviendas (60.000 habitantes). Ser¨ªa la segunda macrociudad en la zona despu¨¦s de que hace m¨¢s de un a?o el promotor Francisco Hernando, El Pocero, consiguiera que le recalificaran un secarral en Sese?a para levantar 13.000 viviendas en edificios de 10 alturas.
La zona que une Madrid con Toledo es muy apetecible para los promotores urban¨ªsticos: grandes extensiones de suelo r¨²stico y barato que, con una recalificaci¨®n de por medio, pueden albergar viviendas en una zona relativamente pr¨®xima a la capital. Tras el ejemplo de Sese?a (13.000 viviendas para un municipio de apenas 9.000 habitantes con problemas de abastecimiento de agua), llega Illescas. El alcalde socialista de esta localidad, Jos¨¦ Manuel Tofi?o, asegura que su caso "no es comparable". Aunque el proyecto que se est¨¢ tramitando supone la construcci¨®n de m¨¢s de 20.000 viviendas, Tofi?o argumenta que se har¨¢n "de forma moderada, en unos 30 a?os".
Los cuatro Programas de Actuaci¨®n Urban¨ªstica (PAU) que desarrollan la macrociudad prev¨¦n un 80% de edificios de cuatro y cinco alturas y el resto de hasta 10 plantas. El enclave elegido para la futura Illescas est¨¢ separado del casco urbano por la v¨ªa del ferrocarril. El alcalde alega que la nueva urbanizaci¨®n le viene de perlas para enterrar los ra¨ªles y lograr que el pueblo de toda la vida y las futuras casas est¨¦n integradas "sin barreras que las separen". El espacio que ocupan los ra¨ªles se transformar¨¢ en una ronda de circunvalaci¨®n. Bajo tierra, se instalar¨¢ una doble v¨ªa que permitir¨¢ que el tren de cercan¨ªas llegue a Illescas.
Soterramiento
Del soterramiento de la v¨ªa f¨¦rrea se encargar¨¢n cuatro entidades. Las mismas que, seg¨²n el convenio firmado en 2005 con el Ayuntamiento, ya se han postulado como agentes urbanizadores para desarrollar los PAU cuando est¨¦n aprobados. Para IU, estas sociedades ser¨¢n las ¨²nicas beneficiarias de la operaci¨®n. La coalici¨®n lamenta que el asfalto "se lleve por delante" cientos de miles de metros de suelo protegido "por su valor ecol¨®gico". Tambi¨¦n reprocha que se tramite un proyecto "descomunal" sin que el municipio haya aprobado todav¨ªa un Plan de Ordenaci¨®n Municipal. Ecologistas en Acci¨®n y la asociaci¨®n de vecinos Al-Sagra respaldan estas cr¨ªticas.
El concejal de Urbanismo de Illescas, Pedro Caballero, se defiende: "Todo es legal, ordenado y transparente". Lo argumenta diciendo que el proyecto fue aprobado en un pleno municipal por unanimidad y que la zona protegida no tiene "tanto valor ecol¨®gico" como dice IU. Otra ventaja que ve la corporaci¨®n es que los promotores construir¨¢n los equipamientos y servicios p¨²blicos necesarios.
Sobre la petici¨®n de IU de declarar nulo el convenio urban¨ªstico, el Gobierno municipal recuerda que las instituciones superiores ya se encargar¨¢n de revisar o corregir lo que haga falta. Mientras, el Ministerio de Fomento ha encargado un estudio informativo sobre el soterramiento de la v¨ªa, "el primero en una ciudad de tama?o medio que se financia en Espa?a", destaca el concejal.
Respecto al modelo de la nueva Illescas, Tofi?o defiende que es "asequible y sostenible". "No ser¨¢ un enjambre", aleg¨® el edil, que no teme que Illescas se convierta en una ciudad dormitorio. Ser¨¢ una ciudad en toda regla. El Ayuntamiento prev¨¦ dedicar otros 14 millones de metros cuadrados a industrias y servicios.
El proyecto tiene todav¨ªa mucho camino que recorrer. Falta que la Comisi¨®n Provincial de Urbanismo de Toledo lo apruebe y que el pleno municipal le d¨¦ el visto bueno definitivo. La ¨²ltima palabra la tendr¨¢ la nueva corporaci¨®n que salga de las elecciones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.