La UE alcanza sus 50 a?os en crisis

"Sacar a Europa de la crisis". "Encontrar una salida a la crisis". Esta es la cantinela que m¨¢s se oye estos d¨ªas en los foros europeos y a la que deber¨¢n dar una respuesta convincente los l¨ªderes de los 27 Estados miembros que se reunir¨¢n los pr¨®ximos 24 y 25 para celebrar el 50? aniversario del Tratado de Roma, que dio origen al proyecto europeo. La imagen de crisis por la que atraviesa la UE est¨¢ tan arraigada que el propio presidente de la Comisi¨®n, Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso, ha tenido que salir al paso "contra la moda de la crisofilia" que invade el debate pol¨ªtico.

El proyecto pol¨ªtico se encuentra atascado institucionalmente desde el a?o 2005

El proyecto europeo, que ha logrado su objetivo esencial de evitar la guerra entre sus asociados durante m¨¢s de medio siglo, se encuentra atascado institucionalmente tras el rechazo en 2005 de Francia y Holanda, dos pa¨ªses fundadores, al Tratado Constitucional. A pesar de que posteriormente nueve Estados lo ratificaron, otros siete han aplazado pronunciarse a la espera de un nuevo texto.

Para el primer ministro luxemburgu¨¦s, Jean Claude Juncker, la crisis es mucho m¨¢s profunda. "El no de Francia y Holanda", ha se?alado, "no son la causa de la crisis, sino que simplemente la han hecho m¨¢s visible". Tambi¨¦n Jacques Delors, que lider¨® el proyecto comunitario durante una d¨¦cada (1985-1994), considera que la crisis es la "peor de su historia".

La historia de la UE ha sido, no obstante, una sucesi¨®n de tropiezos y acuerdos de ¨²ltima hora desde que el 25 de marzo de 1957 seis pa¨ªses (Francia, Holanda, B¨¦lgica, Luxemburgo, Italia y Alemania) firmaron dos Tratados que daban existencia a la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) y a la Comunidad de la Energ¨ªa At¨®mica (EURATOM). El ministro franc¨¦s Robert Schuman, el canciller alem¨¢n Konrad Adenauer y las ideas de Jean Monet fueron los impulsores del proyecto.

Los comienzos ya fueron dif¨ªciles. La Comunidad naci¨® coja por la negativa del Reino Unido a incorporarse, ampar¨¢ndose en los lazos comerciales con sus colonias. Despu¨¦s fue el franc¨¦s Charles De Gaulle, quien puso el veto al ingreso de los brit¨¢nicos, que se incorporaron en 1973. En 1965, De Gaulle tambi¨¦n protagoniz¨® la crisis de la silla vac¨ªa al retirar sus representantes de las instituciones comunitarias. La ca¨ªda del muro de Berl¨ªn en 1989 y la posterior ampliaci¨®n a los pa¨ªses del Este en 2004 completada este a?o con la entrada de Bulgaria y Rumania dieron un nuevo impulso al proyecto europeo hasta convertir a la Uni¨®n Europea en la primera potencia econ¨®mica y comercial del mundo, con casi 500 millones de habitantes.

Ante la posibilidad de nuevas ampliaciones de la Uni¨®n a otros pa¨ªses, especialmente por el caso de Turqu¨ªa, se ha vuelto a crear una sensaci¨®n de v¨¦rtigo, cuando no una fuerte oposici¨®n. Aunque un 46% de los ciudadanos apoyan nuevas ampliaciones, este respaldo es muy bajo en algunos Estados, como Alemania (30%), Austria (31%), Francia (34%) y Reino Unido (36%).

Un tercer frente de problemas es el derivado del creciente envejecimiento. En 2010, habr¨¢ m¨¢s europeos en sus sesenta a?os que en sus 20. Si no cambian los h¨¢bitos sociales, la UE ver¨¢ reducida su poblaci¨®n en 50 millones de personas para 2050.

Con este panorama de crisis formal, por la falta de un Tratado que permita un funcionamiento ¨¢gil de la UE, y crisis de fondo provocada por los desaf¨ªos de la globalizaci¨®n y la potencia de los nuevos pa¨ªses emergentes, como China, India y Brasil, la canciller alemana, Angela Merkel, intentar¨¢ el pr¨®ximo fin de semana en Berl¨ªn que los 27 firmen una Declaraci¨®n para "buscar los pr¨®ximos pasos que deben darse en la construcci¨®n del proyecto europeo com¨²n", como ha explicado la comisaria de Pol¨ªtica, Danuta H¨¹bner.

Merkel tiene previsto apoyarse en ¨¦xitos como el euro, que ya utilizan 13 pa¨ªses, o el acuerdo de Schengen, que elimina los controles fronterizos en 12 Estados, para afrontar los nuevos retos. La aspiraci¨®n de la canciller es preparar el terreno para que en junio, conocido el resultado de las presidenciales de Francia, pueda trazar una hoja de ruta que saque a la Uni¨®n del marasmo durante 2009.