Bruselas conf¨ªa en cerrar ma?ana el pacto con EE UU

El consejo de ministros de Transportes, Telecomunicaciones y Energ¨ªa de los Veintisiete aprobar¨¢ ma?ana con toda probabilidad la liberalizaci¨®n del tr¨¢fico a¨¦reo entre Estados Unidos y la Uni¨®n Europea, despu¨¦s de cuatro a?os de negociaciones. El Reino Unido no vetar¨¢ el acuerdo, conocido tambi¨¦n como de cielos abiertos, al alcanzar una f¨®rmula transitoria para que no entre en vigor hasta 2008 en el aeropuerto de Londres-Heathrow, que canaliza buena parte de los vuelos entre ambos continentes, seg¨²n fuentes comunitarias.

El acuerdo permitir¨¢ a las compa?¨ªas europeas y americanas volar a todas las ciudades de Estados Unidos y Europa, sin limitaciones. Los vuelos transatl¨¢nticos representan el 60% del tr¨¢fico a¨¦reo internacional. En las negociaciones estaba prevista la intervenci¨®n del presidente de Estados Unidos, George Bush, y el premier brit¨¢nico Tony Blair.

Actualmente, a trav¨¦s del Reino Unido se realiza m¨¢s del 40% de los enlaces entre la Uni¨®n Europea y Estados Unidos, en su mayor parte a trav¨¦s de Heathrow, que ha reservado exclusivamente a dos compa?¨ªas inglesas, British Airways y Virgin Atlantic y a dos estadounidenses, United Airlines y American Airlines, la gesti¨®n de este tr¨¢fico. El acuerdo deber¨¢ ser ratificado posteriormente por Washington el pr¨®ximo verano y podr¨ªa entrar en vigor en octubre.

El acuerdo producir¨¢ importantes beneficios econ¨®micos para los consumidores que fuentes de la Comisi¨®n cifraron ayer en 12.000 millones de euros en los pr¨®ximos cinco a?os. Las mismas fuentes indican que se crear¨¢n m¨¢s de 80.000 empleos a ambas orillas del Atl¨¢ntico y un aumento de 25 millones de pasajeros.

El acuerdo abre la posibilidad, tras la preceptiva autorizaci¨®n, de los inversores europeos puedan participar hasta el 50% del capital de las compa?¨ªas estadounidenses. La Uni¨®n Europea hab¨ªa solicitado eliminar completamente esta limitaci¨®n. Los negociadores comunitarios tampoco han logrado que las compa?¨ªas europeas puedan realizar vuelos internos en Estados Unidos.

Los medioambientalistas han manifestado su preocupaci¨®n porque el aumento del tr¨¢fico genere un incremento de los gases de efecto invernadero que recalientan el planeta, para lo que plantearon la conveniencia de introducir una tasa sobre el queroseno.

Actualmente 16 pa¨ªses ya disponen de acuerdos de cielos abiertos con Estados Unidos mientras que otros cinco tienen acuerdos bilaterales restrictivos como es el caso del Reino Unido y Espa?a.