La francesa Eiffage retira el voto a 89 accionistas espa?oles para frenar a Sacyr

Guerra abierta entre Eiffage y Sacyr. La junta de accionistas de la entidad francesa ech¨® ayer por tierra la pretensi¨®n del grupo espa?ol, que es su mayor accionista, de lograr cinco asientos en el consejo de administraci¨®n. Para ello, retir¨® parte de sus derechos de voto a 89 accionistas espa?oles. Su argumento: que todos estaban concertados para apoyar a Sacyr, que ya ha anunciado que no piensa rendirse y que emprender¨¢ "todos los procedimientos necesarios" para quitarle validez a la junta de ayer. Eiffage, por su parte, amenaz¨® con demandar a Sacyr por violar la normativa burs¨¢til gala.

"Con esta acci¨®n, se?or Roverato ha ido demasiado lejos", espet¨® Luis del Rivero, presidente de Sacyr Vallehermoso, al m¨¢ximo dirigente de Eiffage antes de abandonar airadamente la junta que se celebraba en Par¨ªs como gesto de protesta. M¨¢s tarde, Del Rivero le pidi¨® que "reflexione sobre una decisi¨®n absurda porque esto acabar¨¢ en los tribunales".

Adem¨¢s del 33% de Sacyr, otros grupos espa?oles, como Rayet (4,2%) e Inversiones Portival (2,1%) participan en el capital del tercer grupo franc¨¦s de construcci¨®n y de concesiones a autopistas. Un porcentaje indeterminado de acciones, no superior al 7,8%, tambi¨¦n est¨¢ en manos hispanas. Si la AMF (la autoridad francesa de los mercados financieros) considera que hay suficientes indicios de que todos se han puesto de acuerdo con Sacyr, entonces ser¨¢n v¨¢lidas las trabas para que el grupo presidido por Luis del Rivero entre en el consejo de administraci¨®n. Pero la decisi¨®n de la asamblea quedar¨¢ anulada si no hay razones para pensar en esa conspiraci¨®n organizada a 89 bandas.

Y esta segunda opci¨®n es la que defienden en Sacyr. "La mesa de constituci¨®n de la asamblea ha tomado una medida ilegal, absurda y sin precedentes", asegura un portavoz. Seg¨²n dice, el criterio de Eiffage para retirar el voto a 89 accionistas ha sido el de arrebatar sus derechos a todos aquellos a los que no controla. "Y s¨®lo porque le suenan a espa?oles; entre los perjudicados hay bancos de inversiones y multitud de sociedades de los que no es seguro que su nacionalidad sea espa?ola", afirma.

Sacyr estudia todas las posibilidades "legales, jur¨ªdicas y financieras" para responder al ¨®rdago de los franceses. "Adem¨¢s, la retirada de derechos ha sido decidida por un ¨®rgano, la mesa de constituci¨®n de la asamblea, sin competencia para constatar la existencia de una acci¨®n concertada", a?aden. Respecto al anuncio hecho por Eiffage de que emprender¨¢n acciones legales contra Sacyr por haber violado la normativa burs¨¢til francesa, desde Madrid niegan categ¨®ricamente haber infringido la legalidad. Adem¨¢s, afirman que act¨²an solos y desmienten cualquier concertaci¨®n con otros grupos.

Esta opini¨®n la comparten en Rayet, sociedad espa?ola que tiene 3,9 millones de acciones de Eiffage y a la que s¨®lo le han reconocido los derechos de 13.000. "La inversi¨®n en Eiffage responde a nuestra estrategia de diversificaci¨®n; en ning¨²n momento nos hab¨ªamos puesto de acuerdo con Sacyr para votar en un sentido u otro", dice la portavoz del grupo inmobiliario, que anuncia acciones legales contra una decisi¨®n que considera "ilegal e irregular".

Para Jean Fran?ois Roverato, ¨¦sta es su segunda victoria contra el asalto de Sacyr, que el a?o pasado ya reclam¨® sin suerte dos puestos en el consejo. Parece improbable que en 2008 vuelva a repetirse la situaci¨®n de manera que, o bien la AMF da la raz¨®n a Sacyr o ¨¦stos se sentir¨¢n tentados de vender unas acciones que adquirieron a 61 euros y ayer val¨ªan 108,6.

Roverato ha movilizado contra los intereses espa?oles el 22,4% de las acciones que est¨¢n en manos de los asalariados. ?stos temen que el grupo espa?ol desmantele Eiffage y lo venda por partes a fondos de pensiones, separando sus distintas actividades. Sacyr ha insistido en que "no lidera ning¨²n proyecto de desmantelamiento o de cesi¨®n de activos" y espera que la sociedad siga siendo "un grupo franc¨¦s, dirigido por franceses y que cotice en la Bolsa de Par¨ªs".

La alianza entre Roverato y los trabajadores es sin embargo fr¨¢gil, pues el directivo intent¨® que ¨¦stos no pudieran vender sus acciones en ning¨²n caso, imponiendo una prohibici¨®n que fue desautorizada por la AMF.

Adem¨¢s, la imagen de Roverato aparece tambi¨¦n empa?ada por el "obsequio" que el consejo de administraci¨®n vot¨® en su favor: un lote de 195.000 acciones que, al precio de ayer, val¨ªan 21,2 millones de euros, un montante que se beneficia ahora del 64% de aumento del precio de la acci¨®n desde que el grupo Eiffage est¨¢ en el ojo del hurac¨¢n burs¨¢til. Roverato minimiza el valor de las acciones: "Equivalen a dos mil¨¦simas del capital del grupo, algo que no se me antoja excesivo para alguien que lo ha dirigido durante 20 a?os".