El continente de la impunidad

En Am¨¦rica Latina, el n¨²mero de asesinatos con armas de fuego triplica la media mundial y seis de cada diez secuestros se llevan a cabo entre el R¨ªo Grande y Tierra de Fuego. La gente no s¨®lo est¨¢ harta del crimen, sino tambi¨¦n de la impunidad. No s¨®lo debe cuidarse de los delincuentes, sino tambi¨¦n de la polic¨ªa y los jueces que muchas veces, como en M¨¦xico, no combaten el crimen sino que son parte interesada en ¨¦ste.

"La seguridad ciudadana se utiliza como arma electoral en Am¨¦rica Latina. Se promete mano dura con el crimen, se persigue el aumento de las penas y se garantiza una mayor presencia policial en las calles", explica el chileno Jos¨¦ Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch para Am¨¦rica Latina. De visita en Madrid, Vivanco est¨¢ convencido de que ninguna de estas promesas lograr¨¢ reducir el crimen en la regi¨®n si antes no se mejora la capacidad y la calidad de las fuerzas de seguridad.

"La seguridad ciudadana se usa como arma electoral", seg¨²n Human Rights Watch

"La clave es vincular los planes sociales con los de seguridad", dice un ministro brasile?o

"Cuando en Am¨¦rica Latina se quiere dar m¨¢s seguridad, la primera v¨ªctima son los derechos humanos. Todas las soluciones son superficiales, para la galer¨ªa, pero no hay voluntad pol¨ªtica para erradicar el problema, empezando con una polic¨ªa y un sistema judicial que prediquen con el ejemplo", a?ade Vivanco.

Tarso Genro, ministro de Justicia de Brasil, est¨¢ de acuerdo en que hay que dotar de medios y capacitar a la polic¨ªa. Genro se entrevist¨® ayer con el ministro de Interior espa?ol, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, para invitarle a visitar Brasil con vistas al nuevo plan de lucha contra el crimen que el gigante suramericano pondr¨¢ en marcha, casi con seguridad, en septiembre. Este plan pretende complementar la ofensiva que el Gobierno ya ha puesto en marcha contra el crimen organizado, enviando a miles de polic¨ªas federales a combatir contra las bandas armadas en R¨ªo de Janeiro.

"Mientras la polic¨ªa no se someta a controles externos, Brasil dif¨ªcilmente reforzar¨¢ la seguridad ciudadana. Conozco muy bien el problema brasile?o y tambi¨¦n el argentino. He visto muchos buenos programas de seguridad de la provincia de Buenos Aires que se estrellaban contra lo evidente: la vinculaci¨®n entre los delincuentes, los polic¨ªas y los pol¨ªticos son muy estrechas. Es imposible implementar los programas sobre el terreno", explica el experto en derechos humanos.

"El nuevo plan de nuestro Gobierno no consiste ¨²nicamente en poner m¨¢s polic¨ªas en la calle", replica Genro. "Vamos a desarrollar un plan social destinado a las zonas donde las mafias captan a los hombres y mujeres de entre 15 y 30 a?os de cinco regiones de Brasil [entre ellas R¨ªo de Janeiro y S?o Paulo]. En definitiva, se trata de vincular estrechamente los planes sociales con los de seguridad. Aparte de esto, formaremos adecuadamente a los polic¨ªas, tanto federales como estatales, e incluso vamos a igualar los salarios entre los agentes de distintos Estados del pa¨ªs. La financiaci¨®n del plan, cuya duraci¨®n ser¨¢ de tres a?os y medio, correr¨¢ a cuenta del Gobierno central", explic¨® el ministro brasile?o. El programa tambi¨¦n incluye la construcci¨®n de presidios espec¨ªficos para mujeres y j¨®venes.

Genro no habl¨® de purgas entre los mandos de la polic¨ªa brasile?a como se ha hecho en M¨¦xico o como se hizo desordenadamente en Argentina tras graves delitos que involucraron a la polic¨ªa, como fue el secuestro y asesinato del joven Axel Blumberg en marzo de 2004. "En lo que respecta a la preparaci¨®n de la polic¨ªa brasile?a, cada Estado es diferente. La polic¨ªa militar de mi Estado [Rio Grande do Sul] es muy respetada por la poblaci¨®n, pero hay otros en los que los agentes son violentos y la gente les teme. Sin duda tenemos un problema, no lo voy a negar, pero creo que nuestro nuevo plan puede igualar hacia arriba, hacia una mejora, a la polic¨ªa de todo Brasil", a?ade el ministro.

El Gobierno de Luiz In¨¢cio Lula da Silva ya ha comenzado a reforzar los recursos econ¨®micos de la polic¨ªa federal. El presupuesto para este cuerpo alcanzar¨¢ casi los 1.500 millones de euros este a?o, casi el doble del que ten¨ªa hace tres a?os. Pero las polic¨ªas estatales y locales, en general, apenas han mejorado.

Recientemente, el diario O Globo, public¨® cifras escalofriantes sobre el grado de impunidad del que gozan las autoridades en Brasil. El peri¨®dico, echando mano de datos oficiales, ha comprobado que en los ¨²ltimos 15 a?os hubo 14.000 denuncias contra autoridades pol¨ªticas, pero que solamente 1.035, apenas el 7%, fueron condenadas. En lo que respecta a los delitos financieros, menos del 5% de los casos conducen a una condena. En materia de violencia, el diario expone el caso del Estado de Pernambuco, al noreste del pa¨ªs, donde en 2006 se registraron 4.638 asesinatos, aunque solamente 38 presuntos asesinos hab¨ªan sido capturados a finales de a?o.